¿Qué va mejor para desenredar el pelo? ¿Acondicionador, mascarilla o spray?
Es tal la oferta de marcas, productos y consejos de expertos que comprarlos resulta a veces complicado. Aquí tienes las claves para acertar y lucir un pelo brillante y sedoso
Esta primavera es fundamental que inicies una recuperación del cabello, hay que prepararlo para el verano, prestando especial atención a los productos que te recomendamos para proteger el cabello de los primeros rayos de sol a la vez que reparamos los daños ocasionados durante los meses de frío.
Sabemos que uno de los momentos más placenteros que hay es lavarte el pelo y notar el aclarado, pero el problema radica, si lo tienes largo, en el momento de desenredado posterior. Para que este proceso de peinar el cabello sea menos doloroso para ti y para tu melena debes comprar un producto adecuado para evitar los dichosos nudos. Pero cuando te encuentras ante la mascarilla, el acondicionador o el spray, ¿cuál elegir? ¿Harán todos lo mismo? ¿Hidrata más la mascarilla que la crema? ¿El spray hay que aplicarlo antes o después de secarte el cabello? ¿Existe alguno que funcione mejor o es lo mismo utilizar acondicionador que mascarilla o que spray para lograr que el cabello brille?
Para aclarar todas esas dudas, conocer los beneficios de cada tratamiento (de una vez por todas) y aprender a utilizarlos, hemos consultado a varios expertos. Y mira lo que nos han contado.
María Baras, estilista de Pantene, aconseja siempre ser constante en la rutina capilar para tener un pelo fuerte y sano. Por ello, la mejor solución es la hidratación mediante acondicionadores y mascarillas que aportarán al pelo las vitaminas necesarias para reparar la fibra capilar.
Tratamiento en crema o acondicionador
Según Nadia Barrientos, experta en el cuidado del cuero cabelludo, del centro The MadRoom, un referente en peluquería y en tratamientos de spa capilar, apunta: "Los productos en crema o acondicionadores son de uso frecuente o diario. Aconseja utilizarlos a diario, después del champú para hidratar, desenredar y evitar así que el pelo se deteriore o parta por el desgaste del peinado posterior". ¿La recomendación de la experta? Usar un acondicionador como Soin Fondamental de la nueva línea Aura Botanica de Kérastase.
Y es que al aplicarlo después del champú se funde en la fibra del cabello aportando una nutrición profunda y duradera. Además, gracias a la alta concentración de aceites naturales de coco de Samoa, argán y naranja dulce, tu melena ganará brillo, fuerza, flexibilidad y podrás quitar enredones de una pasada.
La mascarilla: uso menos frecuente
“La mascarilla, en cambio, hay que entender que es un producto diseñado para uso semanal o quincenal, y su función es aportar al cabello las proteínas y lípidos que pierde con los lavados, secados y peinados diarios (a pesar de que uses acondicionador). Digamos que se trata de reponer el cemento que sostiene a cada pelo, dándole cuerpo y estructura”, afirma Barrientos. Eso sí, “extiéndela sobre todo el cabello y coloca un paño caliente durante diez minutos, de tal modo que penetren los activos en profundidad”. ¿Cuál comprar?
¿Y en modo spray?
En spray toma nota, porque hay distintas versiones y tratamientos según las necesidades de tu cabello (seco, con color, graso, apagado…), pero la clave es que todos encierran una altísima concentración de propiedades en una sola pasada. De hecho, la experta asegura que hay fórmulas hidratantes tan poderosas como una mascarilla, tipo
“Hay que aplicarlo con el cabello también mojado -dice- y después conviene aclarar antes de peinar”. Otra opción es apostar por productos de efecto final como
¿Quieres un producto para fortalecer el pelo y ayudar a fijar la humedad en profundidad? Mascarilla Repara y Protege de Pantene. Es recomendable dejar que el producto actúe durante algo más de tiempo, para que haga todo su efecto y conseguir el mejor resultado.
Esta primavera es fundamental que inicies una recuperación del cabello, hay que prepararlo para el verano, prestando especial atención a los productos que te recomendamos para proteger el cabello de los primeros rayos de sol a la vez que reparamos los daños ocasionados durante los meses de frío.