Al detalle, el look de Ana Obregón en el día más especial de su nieta

Este domingo, 17 de diciembre, le esperaba a Ana Obregón un día repleto de emociones. Después de mucho sufrimiento tras la muerte de su hijo Aless, llegó a su vida Ana Sandra, su nieta e hija biológica de Aless Lequio. Desde entonces, Ana Obregón volvió a ver la luz al final del túnel.

Ahora, la pequeña ha sido bautizada en la Moraleja, un esperado momento para su abuela y toda su familia.

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El mensaje que ha enviado Ana Obregón a Lequio referente a su nieta

Laura G. Vara

Radiante de felicidad, con la niña en brazos, ha aparecido Ana a su llegada a la iglesia Nuestra Señora de Alcobendas (Madrid). La pequeña lucía el mismo faldón con el que fue vestido su padre cuando tenía tres meses.

Por su parte, Ana Obregón se ha decantado por un diseño exclusivo del alicantino Rubén Hernández, el mismo que la vistió en otros momentos importantes para ella como fueron las campanadas o la presentación de su libro. Es, por tanto, su diseñador de confianza y quien conoce a la perfección el estilo de la bióloga y lo que mejor le sienta.

Hernández también tiene muy en cuenta cada momento vital que atraviesa la bióloga cada vez que realiza una aparición con uno de sus diseños y trabaja con ella codo con codo para expresar sus sentimientos a través de las prendas de la mejor manera posible.

Cuando Obregón dio las campanadas, aseguró a este medio que pidió entonces un vestido “lleno de magia y pureza, para una noche tan especial”. Sobre Hernández dijo en aquel momento que “es un gran diseñador que sabe captar las emociones a la perfección, con lo cual el vestido será una prolongación mía con un claro mensaje de que... siempre el menos es más”.

Para el bautizo de su nieta, Ana Obregón ha escogido el color rosa, quizás haciendo un guiño a la inocencia infantil de la hija de Aless Lequio.

El conjunto ha estado formado por una falda midi plisada y confeccionada en crepé que ha combinado con una chaqueta tweed, entallada a la cintura con un cinturón ancho adornado con una flor en la parte delantera. Ha completado el look con unos zapatos destalonados de tacón ancho.

Para el peinado, ha decidido retirar su larga melena del rostro con una diadema rosa que le ha proporcionado comodidad para llevar en brazos a la pequeña protagonista del día y que ha permitido que se vean los pendientes circulares de brillantes que ha lucido en este gran día.

Una vez finalizada la misa, la presentadora, junto a su familia y unos pocos amigos muy cercanos han disfrutado de una merienda en su casa de la Moraleja.