Laura Madrueño: pasión por el mar, deporte al aire libre, novelas gráficas y lavanda silvestre

Licenciada en Comunicación Audiovisual y presentadora de televisión, Laura Madrueño (Madrid, 1986) comenzó su carrera en la redacción de los informativos de Telecinco y, desde hace ocho años, además de colaborar en otros espacios emblemáticos de la cadena, se ocupa de ofrecernos a diario la información meteorológica. En estos momentos, podemos verla en las playas de Honduras para presentar las conexiones en directo del reality 'Supervivientes'.

Entusiasta, pertinaz, deportista y gran defensora de la naturaleza y la vida eco, Laura es, además, fundadora de la productora We Are Water Films, que realiza documentales centrados en el mundo submarino, y en la que trabaja junto a su marido, el fotógrafo Álvaro Puerto. Tanta es su pasión por el mar que hasta dedicó a este tema su primer libro, 'Somos agua', una reflexión sobre la necesidad de proteger nuestros océanos. Además, es la heredera de la licorería más antigua de Madrid y ha creado un vino junto a su padre llamado Apnea.

PARA COMER

El desayuno más sabroso: “Me encantan los desayunos caseros, fuertes y largos, en los que me puedo beber hasta un litro de té a lo largo de la mañana, ¡adoro el té!, especialmente el japonés y el de Ceilán, dos de mis países favoritos. Cada vez que visito Sri Lanka, traigo cantidad para una buena temporada. En casa tostamos el pan en el horno de leña y desayunamos huevos de nuestras propias gallinas y las mermeladas caseras que preparo cada otoño. Otro desayuno que me apasiona es el del Hotel Villa Rosario (Dionisio Ruisánchez, 6), en Ribadesella, mientras veo romper las olas del Cantábrico”.

Homenaje gastro: “En Filandón (Ctra. El Pardo-Fuencarral, km 1.9), donde siempre pido el lenguado Evaristo a la brasa, único en Madrid. Otra opción top es el restaurante O’Pazo (Reina Mercedes, 20), porque en su carta solo hay mariscos y pescados maravillosamente cocinados. Si me apetece tomar pizza, voy a Trattoria Manzoni (Rosario Pino, 6), finísimas y hechas en horno de leña. Y aunque no soy mucho de hamburguesas, una vez al año voy a Don Oso (De la Cruz, 26), las más ricas y caseras de Madrid. En Nueva York, me gustan las de Shake Shack (691, 8th Ave)”.

Aperitivo rico rico: “En mi familia, los aperitivos son casi un ritual, y Madrid, la mejor ciudad del mundo para disfrutarlos. La mejor cerveza, bien fría, la tiran en El Cangrejero (Amaniel, 25); acompañada de unos boquerones fritos con patatas fritas, es un lujo total. La caña de cerveza y esos pinchos de anchoa, pimiento, aceituna y pepinillo de toda la vida de El Doble (José Abascal, 16) es otro de mis infalibles. Para los amantes del vinagre, el pepinillo más picante de Madrid y la mejor ensaladilla rusa pueden encontrarlos en Bar Morales El Atómico (Meléndez Valdés, 58)”.

Postres tentadores: “La tarta de queso de La Viña (31 de agosto, 3), en Donosti, es un must de toda la vida, y el tiramisú de La Tavernetta (Orellana, 17), el mejor que he probado en mi vida. El helado de pistacho de Ultramarinos Quintín (Jorge Juan, 17) es otro de mis preferidos. Aunque en casa somos de tomar queso de postre, ninguno como los que compramos en la frontera de Formigal con Francia, de pura leche de oveja y vaca”.

Buenos vinos: “Soy la cuarta generación de una familia dedicada al vino y los licores en la tienda de vinos más antigua de Madrid, Licores Madrueño (Postigo de San Martín, 6). Mi bisabuelo la abrió en 1895 y mi padre sigue al frente del negocio, en el que se pueden encontrar vinos españoles —todos catados por nosotros— de pequeños bodegueros, muy especiales y destilados prémium de todo tipo. En casa tengo la suerte de probar vinos constantemente y me encanta el vermut, los vinos finos, los tintos del Bierzo, el champán…”.

PARA COMPRAR

Básicos de moda: “Soy de prendas atemporales, elegantes y clásicas. Desde hace años me hago las camisas a medida y me encanta elegir las telas y personalizarlas. Mi debilidad son los abrigos y parkas de Barbour, tengo muchos de todo tipo y, para ocasiones especiales, siempre confío en firmas españolas como Yolancris —​que me vistió en mi boda— o Pronovias, que diseñaron el vestido de la final de ‘Supervivientes’, con el azul turquesa que les pedí, el azul de los arrecifes de los Cayos. ¿Mi último flechazo fashion? Un total look de Masavi que me ha enamorado y unas sandalias de Fígara de rafia”.

Último capricho: “El bolso Herradura de Loewe, que hace poco me regalaron mis padres, una preciosidad. También me entusiasman las botas de Rey Pavón, una firma española y muy familiar que trabaja el cuero de forma espectacular”.

Flores y más flores: “Las cojo del campo, ¡cultivo muchas en casa! Mis favoritas son las mimosas. Siempre tengo en casa ramos de salvia, lavanda o hierbabuena fresca, que cojo en mi huerta ecológica. En mi boda, por ejemplo, regalé una pequeña encina a mis invitados para que la pudieran plantar en casa y verla crecer”.

Hora de lectura: “Como me apasionan los cómics y la novela gráfica —tengo estanterías llenas en casa—, suelo visitar la librería Generación X (Carranza, 25), en Madrid. También me gusta mucho La Central (Postigo de San Martín, 9), que me resulta muy entretenida. Para escribir el libro me documenté mucho con ejemplares que encontré en la librería Rafael Alberti (Tutor, 57), una maravilla de lugar. Ahora estoy leyendo 'Trilogía de Alexandros', de Massimo Manfredi, y 'Un plan sencillo', de Scott Smith. Otro que me ha parecido una verdadera delicia ha sido 'Nagori', de Ryoko Sekiguchi”.

PARA CUIDARME

Melena top: “Cuido mi pelo en Aveda (Claudio Coello, 46), por sus productos naturales y su filosofía sostenible. Siempre me hago el tratamiento Botanicals, para hidratar el cabello en profundidad. Ahora, en Honduras, utilizo productos de Icon, porque sus tratamientos de hidratación mantienen mi pelo superbonito y lo cuidan del sol y el mar”.

En forma: “El deporte es indispensable para mí de toda la vida. En Madrid entreno en el Metropolitan Gym (Padre Damián, 23) con Sergio, mi entrenador personal. Hago ejercicios de fuerza y, al menos tres días a la semana, natación. Aunque lo que más me gusta es entrenar al aire libre. Los fines de semana salgo al campo con mis perras, y me encantan tanto los deportes de alta montaña o el trekking como los de invierno: esquí de fondo, de travesía, raquetas… También practico natación en aguas abiertas y kayak en verano”.

Centro de belleza: “Maribel Yébenes (Pº de la Habana, 14), donde suelo hacerme el tratamiento Imperial para eventos especiales. Durante estos meses previos a 'Supervivientes' han preparado mi piel para el sol con tratamientos faciales de última generación y exfoliaciones corporales, ¡una maravilla!”.

Últimos descubrimientos beauty: “Las cremas y los solares respetuosos con el mar de Biotherm, especialmente la crema de noche Blue Therapy Cream. También me gusta el tónico facial de romero, naranja y agua de mar de Mel Ibiza. En mi día a día, fuera de la tele, no me maquillo, pero siempre llevo la piel superhidratada y con un toque del blush Sayoko de Shiseido. Mi barra de labios preferida es el tono Barbarella de Nars. No utilizo perfumes, pero sí uso la fragancia de la crema de cuerpo Oil Therapy Baume Corps de Biotherm y la loción corporal Blue Mediterráneo de Aqua di Parma”.

PARA VIAJAR

Hotel de ensueño: “Tres: el Juvet Landscape Hotel (Alstad, 24), en Valldal, Noruega; el hotel Mara Engai Wilderness Lodge, en el corazón del Massai Mara, Kenia, y el Sentidos Beach Retreat, en Praia da Barra Inhambane, Mozambique”.

De música y televisión: “Llevo todo este año queriendo ver pinchar a Fred Again, mi artista más escuchado en 2023. Verle crear música es todo un espectáculo. ¿La mejor serie que he visto últimamente? 'Poquita fe' y 'Memorias de una escritora'. Os recomendaría ver la peli 'Vidas pasadas' y la sueca 'Turist".

Un monumento en el mundo: “Dos: Villa Imperial Katsura, en Kioto, uno de los lugares más especiales y ceremoniosos que he visitado. Mi marido es un enamorado de la arquitectura japonesa y me ha enseñado lugares tan mágicos como este. El otro es el Coliseo de Roma, cada vez que lo veo intento transportarme al espectáculo romano que tuvo que ser aquello”.