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Ernesto Sevilla: tres novias famosas, asco al dinero y su frustrado primer amor
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detrás de las risas

Ernesto Sevilla: tres novias famosas, asco al dinero y su frustrado primer amor

Desde que debutara con sus monólogos en Paramount Comedy, el albaceteño se ha convertido en uno de los pilares del humor patrio

Foto: Ernesto Sevilla, en una imagen de archivo. (Cordon Press)
Ernesto Sevilla, en una imagen de archivo. (Cordon Press)

Celoso de su vida privada, al menos en el aspecto amoroso, aunque sea todo un galán, al Chanante no se le han conocido muchas parejas. Allá por 2015 en Vanitatis jugábamos a adivinar por qué Ernesto Sevilla y su pareja de entonces, Patricia Conde, no durarían más de seis meses. "¿Quién se quedará con el rol de gracioso/a de la relación?", escribíamos entonces de forma profética, porque, en efecto, a los cuatro meses rompían su noviazgo.

¿Los motivos? Supuestamente, la presentadora no estaba cómoda con los diferentes estilos de vida de ambos. Ella es hogareña y él, fiestero irredento. Y de esto último ha dado buena muestra en innumerables ocasiones. La más sonada (hasta el punto de viralizarse), cuando en 'La resistencia' explicó que en las fiestas que organiza, si ve que el ambiente decae, lo soluciona con la aparición de "la momia fantástica". Ante la sorpresa de David Broncano, el cómico cogió un bote de espuma de afeitar y se untó toda la cara con ella, para después ponerse unas gafas de sol.

Soltero de momento, que se sepa, al humorista albaceteño se le atribuyen otros dos romances con rostros muy conocidos. Entre 2006 y 2008 salió con la actriz Natalia Verbeke y con la presentadora Berta Collado entre 2010 y 2012, saltando así de los programas de comedia a las páginas de la prensa rosa.

Hijo y nieto de maestros, Ernesto tiene una hermana melliza, Josefina, y otra hermana mayor, Carmen. Como también ha contado en varias ocasiones, estudió junto a Joaquín Reyes –su pareja profesional– en la Universidad de Bellas Artes de Cuenca. Ese fue el germen de una fructífera relación creativa que más tarde vimos en espacios ya de culto como 'La hora chanante' o 'Muchachada Nui'.

No en vano, de quien también es inseparable es del actor Pablo Chiapella. Los actores y humoristas, íntimos desde la infancia, ya que se conocieron en el colegio, han llevado vidas profesionales paralelas e, incluso, han coincidido en algún que otro proyecto. Juntos han recordado aventuras como la de buscar piso tras mudarse a Madrid.

"Primero llegamos a Madrid con la intención de buscar piso. Y estuvimos como una semana o dos buscando, pero que no buscamos piso [...]. Nos entreteníamos, nos surgían aventuras. Al final tuvo que venir mi padre y decirnos 'sois imbéciles". ¡Y en tan solo una tarde les encontró una humilde morada: "Tuvo que venir su viejo y nos lo encontró en una tarde", contaban en 'La noche D' a Dani Rovira.

Todoterreno en el mundo del humor, Ernesto Sevilla es muy activo en su cuenta de Instagram, en la que tiene un millón de seguidores y donde a menudo comparte chistes, montajes, fotos antiguas suyas y anécdotas siempre divertidas. A menudo sin pelos en la lengua, no le importa confesar, por ejemplo, que es un desastre a la hora de gestionar sus finanzas y que le tiene "asco al dinero".

"No lo sé. Cuando te digo no lo sé, es que no lo sé porque soy un desastre total", revelaba en 'La resistencia' cuando le preguntaban por sus ahorros. "Tengo varias cuentas en el banco, sé que hay dinerete, voy sacando a cholón y no se acaba. La que me lleva las cuentas es mi madre y yo te juro que no sé el dinero que tengo. Es más, me compré una casa. ¿Sabes cuánto me costó? No lo sé", aseguraba entre risas.

Entre otras muchas vivencias que ha compartido tanto en sus monólogos como en otras entrevistas televisivas, nos quedamos con la que contó en 'El hormiguero' sobre su primera experiencia en el amor. "Fue una cosa que me pasó cuando era un niño", empezó a relatar Ernesto. "Me gustaba la más guapa de mi clase y en ese momento no me comía un colín. No tenía yo entonces mucha suerte con las chicas. Le pedí salir, muerto de la vergüenza, pero tardé como un cuarto de hora en armarme de valor".

"Entonces me acerqué a ella y le dije: '¿Quieres salir conmigo?", prosiguió la historia. Y, sorpresa, la chica aceptó la cita, a lo que él respondió dándole las gracias: "No sé por qué le dije gracias". Pero la historia no acabó ahí. "Cuando le dije gracias, sonreí como un gilipollas y justo en ese momento me salió una pompa de moco y explotó. El caso es que la chica, como media hora después, mandó a su amiga para decirme que cortaba conmigo. Esa fue mi primera relación, muy intensa". Según Sevilla, "lo pasé fatal porque me gustaba muchísimo".

Celoso de su vida privada, al menos en el aspecto amoroso, aunque sea todo un galán, al Chanante no se le han conocido muchas parejas. Allá por 2015 en Vanitatis jugábamos a adivinar por qué Ernesto Sevilla y su pareja de entonces, Patricia Conde, no durarían más de seis meses. "¿Quién se quedará con el rol de gracioso/a de la relación?", escribíamos entonces de forma profética, porque, en efecto, a los cuatro meses rompían su noviazgo.

Joaquín Reyes
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