Pablo Chiapella ('La que se avecina'): origen de su apellido, primer trabajo y pareja
Su familia, sus aficiones, el golpe de suerte que cambió su vida... Repasamos la vida personal y profesional de este rostro habitual de la pequeña y gran pantalla
Pablo Chiapella sigue confirmando que es uno de los referentes del humor en nuestro país con cada uno de sus proyectos. No en vano, es 'La que se avecina' la serie que le encumbró a la fama y donde demostró que talento no le falta para hacer absolutamente de todo. Y es que su personaje, el icónico Amador Rivas, pasó de trabajar en una sucursal bancaria a reinventarse como masajista tántrico -entre los miles de oficios en los que probó suerte- para terminar siendo el archiconocido 'capitán Salami'.
Un apodo que, lejos de lo que pueda parecer, el actor lleva con orgullo, tal y como ha demostrado en 'Zasback', la original ficción de Movistar+ en la que distintos rostros conocidos repasan, a través de un monólogo, e interpretan, al mismo tiempo, algunos de los episodios más embarazosos y divertidos de su pasado e infancia. Con un abuelo original de Turín (Italia), a quien debe su apellido, padres valencianos y nacido en Albacete, en el caso de Pablo Chiapella, su carrera no parecía encaminada precisamente al mundo de la actuación. El intérprete estudió Magisterio y se diplomó en Educación Física, por lo que su primer trabajo fue como profesor.
Un golpe de suerte y un buen amigo cambiaron su destino. Todo ocurrió cuando acompañó a Ernesto Sevilla, al que conoce desde pequeño, a un casting en Madrid para un nuevo programa de humor. Así se coló por primera vez en nuestros televisores cuando empezó a aparecer en 'La hora chanante'. Posteriormente, repetiría con Joaquín Reyes y compañía en 'Muchachada Nui', en una época de la que guarda muy buenos recuerdos.
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Pero cuando de verdad saltó a la fama, como comentamos, fue cuando en 2007 debutó como el sinvergüenza pero muy 'cuqui' Amador en 'La que se avecina'. Y eso que él, como confesaba en una entrevista con 'El Periódico', no es dado a acudir a reuniones de vecinos. "Hasta hace poco no era propietario, así que tenía excusa para escaquearme. Y ahora que ya lo soy, por temas de curro y laborales, todavía no he ido. ¡Pero estoy seguro de que cuando vaya va a ser un cachondeo, más por parte de ellos que por la mía!".
En lo que respecta a su vida personal, Pablo Chiapella la lleva con discreción, pero con naturalidad, sin dejar de presumir orgulloso de la familia que ha construido junto a Natalia Puente. Ella también trabajaba en la serie de Telecinco, pero detrás de las cámaras como estilista. Juntos tienen una hija, Valentina, de la que, hace algún tiempo, el albaceteño reveló una divertida anécdota en 'La noche D'.
Tenía solamente cinco años cuando, en una comida familiar, la pequeña le llamó por el nombre de su personaje. "Hasta ahora no se daba mucha cuenta, pero el otro día me dijo 'Amador pásame la sal", contaba entre risas. Poco a poco, es más consciente de la profesión de su padre, pero ha dejado de sorprenderse con cosas como ver la foto de su padre en la caja de un juego de mesa en una tienda, ya que, se trataba de la edición especial de 'La que se avecina', algo que Pablo compartió en sus redes.
Fan de los perros y gran aficionado a los videojuegos, el actor sufrió en 2018 un accidente de tráfico que le obligó a perderse varias funciones de la obra 'Alguien voló sobre el nido del cuco', que estaba representando en Madrid. A raíz de aquel suceso ha confesado que ahora siente cierto miedo a las motos y que incluso recurrió a una psicóloga para superarlo. Pero al menos, como contó en 'El hormiguero', la situación también tuvo su lado cómico.
"Allí [en el hospital] hice muchos amigos. El asunto se fue un poco de las manos, el personal del centro vio que me agobiaban tanto que me cambiaron a una habitación solo, parecía aquello un bolo de Paquirrín. Toda la planta pasó por allí".
Tras estrenarse como presentador en 'El paisano', programa emitido por La 1, debutó por fin como protagonista en la gran pantalla con 'Viva la vida' donde interpretaba a un hombre que, tras perder su casa, persigue negocios quiméricos que le llevarán a una crisis matrimonial. La película narra, de manera cómica, la trágica historia de una familia que pasa por grandes dificultades económicas durante la crisis inmobiliaria.
No es, sin embargo, el único proyecto que ha llevado a cabo en cine donde, como el mismo ha asegurado, ha tenido el placer de coincidir con grandes profesionales y algunos, incluso, de su círculo de amigos. Ahora estrena 'Llenos de gracia', su nueva comedia basada en la historia real del exjugador de fútbol Valdo y la hermana Marina.
Pablo Chiapella sigue confirmando que es uno de los referentes del humor en nuestro país con cada uno de sus proyectos. No en vano, es 'La que se avecina' la serie que le encumbró a la fama y donde demostró que talento no le falta para hacer absolutamente de todo. Y es que su personaje, el icónico Amador Rivas, pasó de trabajar en una sucursal bancaria a reinventarse como masajista tántrico -entre los miles de oficios en los que probó suerte- para terminar siendo el archiconocido 'capitán Salami'.