Los grandes apoyos en vida de Aless Lequio: de su prima Celia Vega-Penichet a su gran amigo Justin

Aless Lequio, hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio, falleció el 13 de mayo de 2020 tras dos años luchando contra el cáncer. La noticia fue devastadora y desde entonces su madre ha trabajado para que su hijo no dejara de ser recordado. Desde ese día, la bióloga ha luchado por cumplir sus sueños y lo ha recordado en cada paso que ha dado.

Ana no es la única que le tiene presente, pues Aless contaba con un gran círculo de amigos que estuvieron con él desde el inicio de la enfermedad. Estos fueron algunos de los apoyos con los que contó el joven a lo largo de su vida.

Uno de los apoyos fundamentales que tuvo Aless fue su prima Celia Vega-Pechichet, que era practicamente su hermana. Se criaron juntos, pues tan solo se llevaban 5 meses, y fueron grandes compañeros de juegos y de bailes durante toda la vida. Según ha comentado, el dia del fallecimiento de Aless fue el peor día de su vida.

La joven, que tan solo tenía 28 años cuando perdió a su primo, se quiso despedir de él en las redes sociales. “Siempre bailamos a nuestro ritmo, fuera del sistema y lo seguiremos haciendo, porque tu energía me da fuerza y estés donde estés, sé que me acompañarás para hacer todo lo que habíamos planeado”, fueron las dulces palabras que le dedicó.

Para ella también fue dedicada la última publicación que realizó Aless Lequio en su Instagram, demostrando, una vez más, el cariño que se tenían.
'Una y otra vez, a través de la eternidad, brillaremos juntos ', fue la frase que utilizó Aless para titular una imagen de los dos de niños. Unas palabras que sonaron a despedida, pero que también desprendían amor.

Carolina Monje siempre se mantuvo en un segundo plano y llevó su relación en la intimidad. Fue su novia y compañera hasta el último momento. "Mi niño bonito, mi bebé de bebé, mi amor, mi luz, mi Puchum, mi todo" son algunas de las palabras con las que la empresaria hablaba de su pareja en las redes sociales. Sin embargo, tras el fallecimiento del joven, borró todo el contenido de ellos. Fue un pilar fundamental para sobrellevar la enfermedad. Vivían juntos y habían creado un plan de futuro que no pudieron desarrollar. Tras su muerte se volcó en la empresa, de la que destinaba parte de las ganancias a asociaciones benéficas.

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Nacho Ansorena, su socio. Su compañero de negocios y amigo. Estuvo a su lado en todo momento y continúa trabajando en su memoria. Juntos realizaron viajes y planes.

Hicieron de un hobby un negocio rentable que sigue funcionando. Aless le agradecía la constancia y dedicación, igual que lo hizo su madre años después, ya que Nacho ha colaborado en la creación de la Fundación Aless Lequio.

Por último, toca de hablar de Justin, el amigo americano al que Aless mandó una carta de despedida. Ambos fueron compañeros de universidad en Estados Unidos. Mantenían una fuerte relación y se apoyaron mutuamente hasta el último momento. Su gran amigo de estudios y de fiestas.

Todos ellos fueron apoyos de Aless en vida y queda la duda de qué contará de ellos en su libro.