El papel fundamental de la familia de Mario Casas en la gestión de sus negocios

La última vez que hemos visto a Mario Casas en público ha sido para salir a votar el pasado 23 de julio. En los últimos años, el actor no se ha prodigado mucho por fiestas, premiers y photocalls, lo que no quiere decir que no haya trabajado o que no tenga proyectos que presentar, sino todo lo contrario. De hecho, en estos días, se ha convertido en número uno en Netflix la película ‘El fotógrafo de Mauthausen’, que rodó en 2018 y en la que tiene un papel protagonista. Pero en lo que de verdad ha estado inmerso en este último curso ha sido en ‘Mi soledad tiene alas’, que supone su primer trabajo como director y guionista y que podremos ver en cines a finales de este verano.

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Jorge C. Parcero

Este no es más que un paso más en una carrera ya muy prolífera para la que Casas se ha rodeado de los mejores, su familia. Su hermana Sheila, que durante algún tiempo hizo algunos pequeños papeles como actriz, terminó por convertirse en la mano derecha de su hermano y finalmente su mánager. Para poder acceder a él hay que pasar por su filtro, y goza de la confianza plena del actor, pues está formada como abogada y ya lleva más de siete años a su lado demostrando que conoce a la perfección cuales son sus funciones.

Sin embargo, no es solo ella la que ha puesto sus conocimientos en pro de la carrera de su hermano, también Christian, el más desconocido de los Casas. Él también hizo sus pinitos frente a las cámaras en ‘Hospital Central’ o ‘Cuéntame cómo pasó’, pero terminó estudiando Ciencias Económicas y se ha convertido en una figura clave para ayudar en los asuntos laborales a su familia. De hecho, desde enero de este mismo año, es el único administrador de las empresas familiares que se han ido creando en torno a Mario.

La primera de ellas, Casas 3 Casas Promociones SL, antes denominada Promociones Artísticas y Producciones Rama SL, fue dada de alta en 2009. Aunque, en principio, se dedicó a la promoción inmobiliaria, la actividad que ahora consta es “la creación, producción, representación, presentación, grabación, emisión e intermediación de películas cinematográficas”. Ramón, el padre del actor, fue quien, en un principio, constaba como administrador único de la sociedad, y tras compartir el cargo durante algunos años con Christian, se ha desvinculado por completo. Por ello, desde febrero de este 2023 es solo el joven el que se hace cargo de la gestión.

Las últimas cuentas que pueden consultarse de la sociedad pertenecen al año 2021, el posterior a la pandemia, que tanto daño hizo a las profesiones artísticas, quizá la razón de que cerrasen el ejercicio con breves pérdidas de 3.000 euros, aunque con un valor de casi medio millón.

La segunda empresa que consta a nombre de joven es Home Films SL, antes Reixaño Hosteleria SL, y se dedica a la “prestación de servicios de filmación, producción y postproducción audiovisual, producción de largometrajes y cortometrajes para cine, televisión, plataformas de distribución audiovisual por cualquier medio”. Se trata de una sociedad que se constituyó en 2011 y dejó de tener actividad. No obstante, su hoja registral ha vuelto a abrirse en marzo de este 2023. A todas luces para gestionar todo lo relacionado con ‘Mi soledad tiene alas’, el proyecto más importante y personal de Mario.

Óscar, que es el segundo más pequeño de la familia, no se queda al margen de este entramado familiar, pero lejos de haberse convertido en una ayuda para su hermano, se ha vuelto su gran competencia. Su nombre cada vez tiene más fuerza en el mundo del cine. Eso sí, una rivalidad sana, pues se llevan mejor que bien, tanto es así que el pequeño es el protagonista de la citada película del mayor. Es más, durante su rodaje, además de trabajar con los suyos, algo que como él mismo explicó le ha resultado fácil y muy divertido, ha conocido el amor. La actriz Candela González, con la que ha iniciado un noviazgo que le tiene encantado.

Lo que es innegable es que en esta familia hay talento y que gracias a su férrea unión han logrado formar un gran equipo. Mario y Óscar frente a las cámaras, el primero ahora también detrás de ellas, Sheila en la parte organizativa y Christian en la administrativa. Lo tienen todo controlado y, atendiendo a cómo les van las cosas, parece que la idea funciona.