Descubrimos el nuevo piso de Christian Casas que ha reformado su padre

Pensábamos que lo sabíamos todo sobre los Casas y estábamos convencidos de que era en la interpretación donde destacaban, pero ahora nos toca replanteárnoslo todo. Christian, el tercero de los cinco hermanos, ha mostrado cómo de estupendo ha quedado su piso nuevo y todo gracias a la habilidad de su padre, que ha sido el encargado de hacer la reforma, con la ayuda de su madre a la hora de escoger los detalles y diseñar la mejor forma de lograrlo.

Esto no es una sorpresa, pues hace tiempo Ramón -ebanista de profesión, pero con gran experiencia en el mundo de las reformas- hacía lo propio por su hija. Cuando Sheila se decidía a dar el paso y adquirir su propia vivienda, su padre se ponía manos a la obra y daba lo mejor de sí mismo para cumplir los deseos de su hija. Siempre han sido una familia muy unida, prueba de ello es que este verano se han ido todos juntos de viaje al paraíso, una experiencia que no es excepcional para la familia, que siempre que pueden pasan tiempo juntos. De hecho, juntos estaban cuando Mario recibió el primer Goya de su carrera.

Christian parecía tener muy claro lo que quería para su casa nueva y ponerse en las manos de su padre era apostar sobre seguro. El resultado parece ser de su agrado por completo y lo cierto es que ha cambiado el aspecto del piso para adaptarlo a sus necesidades y darle un aire moderno y chic. Un piso pequeño pero coqueto en el que puede disfrutar de todos los lujos que necesita, así como de su propio espacio personal.

Muchos son los cambios que han hecho en este espacio, pues el joven no ha dudado en tirar tabiques para conseguir tener un espacio más amplio, algo que podemos saber porque ha tenido el detalle de mostrar el antes y el después, algo que siempre es plato de buen gusto para los amantes de la decoración, pues ayuda a ser más consciente de las mejoras y los detalles personales que pueden ayudar a conocer mejor al propietario.

Un dormitorio principal y otro para invitados, un salón y una cocina abiertos, ayudando a crear una mayor sensación de amplitud, el baño, completamente reformado y con detalles modernos… Todo está perfectamente pensado para aprovechar el espacio de este pequeño piso al milímetro sin tener que renunciar a nada y aprovechando al máximo la gran cantidad de luz natural que entra a través de las ventanas.

Toda la familia ha hecho un gran trabajo a la hora de exprimir al máximo el espacio disponible. Por ejemplo, se han despedido de las puertas tradicionales, que necesitan un hueco concreto para poder abrirse y cerrarse, y las han cambiado por puertas correderas tipo granero de cristal esmerilado, que dejan pasar la luz que se filtra del otro lado de la puerta, sumando luminosidad al espacio y consiguiendo intimidad sin tener que renunciar a nada.

En el pequeño ‘house tour’ que Christian nos invita a hacer por su casa, vemos cómo se entra directamente al salón, que tiene el ancho suficiente para colocar un cómodo sofá, este comunica directamente con la cocina, aunque ambos quedan separados por una zona de barra con dos taburetes, ideal para desayunos o para interactuar con tus invitados mientras terminas de preparar la comida o la cena.

En la parte derecha de la casa, la que tiene vistas al exterior, están los dormitorios. El primero de ellos es el de invitados, con la cama en alto, a la que se accede gracias a una más que cómoda escalera, evitando tener que hacer equilibrios para llegar hasta ella. Bajo la cama se sitúa un gran armario, por lo que no sería raro que empleara esta habitación como vestidor o incluso como despacho, pues al organizarla de este modo consigue que quede un poco de espacio libre. El dormitorio principal es la siguiente estancia, con espacio suficiente para una cama doble.

El baño es el último de los rincones de la casa, donde han eliminado la media bañera que había y han instalado una cómoda ducha, con mampara de cristal que, una vez más, añade luz al conjunto. Acabados en madera y sanitarios en color negro que dan al baño un aspecto industrial y urbano muy en la línea del resto de la casa, donde han instalado la mayor cantidad de armarios y espacio de almacenamiento posible. Destaca el original lavabo, de piedra, que reposa sobre un tablero de madera. Un aire muy similar al de la cocina, donde el acero inoxidable de los electrodomésticos se convierte en el gran protagonista, aunque no hemos podido ver la lavadora.

Christian no podría estar más feliz con el resultado de su piso nuevo, que compró hace cuatro meses y donde ha intentado aprovechar al máximo el espacio disponible. Queda por saber si su plan es vivir en su nueva casa o planea alquilarlo como inversión, algo que no sería raro pues en una entrevista para ‘Vanity Fair’ su hermano Mario le definió como “un empresario increíble, un tío de números, el más listo”.

Estudió Empresariales y, aunque es el más desconocido de los hermanos Casas, con permiso del pequeño, también ha hecho sus pinitos en el mundo de la interpretación. En el plano sentimental tampoco le va nada mal, pues comparte su vida con la bailarina Mónica Peña, integrante de Lola Índigo.