Isabel Sartorius y su 60 cumpleaños en la más absoluta intimidad
La que fuese novia del príncipe Felipe ha pasado por baches y actualmente ha optado por un perfil muy discreto
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Isabel Sartorius ha cumplido sesenta años. A pesar de ser una fecha redonda, no ha querido una celebración a lo grande sino una reunión de amigas íntimas y familia directa, como son sus hermanos Luis y Teresa. La anfitriona de la merienda es Nora de Liechtenstein, viuda del marqués de Mariño y quien ha ejercido desde hace tiempo de protectora afectiva.
Y más aún en estos últimos años, cuando la situación personal y económica no ha sido la mejor a pesar de su excelente currículum académico. Es licenciada en Relaciones Internacionales, con varios masters y bilingüe en francés e inglés. No tuvo suerte en el amor. Tampoco fueron muy bien sus iniciativas empresariales. La muerte de su íntima y casi hermana Marta Oyarzabal, en enero de 2023, le afectó profundamente y a partir de esa fecha se apartó aún más de la vida mediática.
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Ya había desaparecido de dicha escena mediática hace tiempo. Lo último que se supo de ella era su relación con César Alierta. Una noviazgo que nunca se hizo público y que se convirtió, con el paso del tiempo, en una gran amistad. Nunca llegaron a vivir juntos, pero disfrutaban de una vida de ocio con viajes fuera de España. Ninguno de los dos quiso publicidad. Como dicen sus amigas, en el caso de Isabel el tener vertiente pública no solo no la favoreció sino que también la perjudicó.
Siempre se quedó con el latiguillo de ser la primera novia del príncipe Felipe y no tuvo suerte con sus amores. Con Alierta, ambos se cuidaron mutuamente. Después de esta historia sentimental ya no ha habido más. Actualmente, mantiene una buena relación con Javier Fitz-James Stuart Soto, padre de su hija Mencía.
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A sus 27 años, la joven se ha convertido en un gran apoyo para la madre en los momentos de más debilidad. Isabel dejó su casa alquilada. No era bueno que estuviera sola y, tras pasar unos meses recuperándose de sus estados de ánimo, alterna su vida entre el domicilio en Madrid y la finca en Valdepajares del Tajo situada en Perelada de la Mata, propiedad de la princesa Nora. Este campo de Extremadura es un referente importante en su vida. Aquel fue el refugio donde pasaban fines de semana mientras duró el noviazgo principesco. Y allí también celebró la boda Cecilia Sartorius en julio de 1990, en la que Isabel reconocía a los periodistas que cubrían la información que su historia de amor había terminado.
La vida de Isabel Sartorius no ha sido un camino de rosas. Ha tenido subidas y bajadas emocionales que la hicieron más retraída y le dieron pocas ganas de relacionarse salvo con su círculo íntimo y fiel.
Isabel Sartorius ha cumplido sesenta años. A pesar de ser una fecha redonda, no ha querido una celebración a lo grande sino una reunión de amigas íntimas y familia directa, como son sus hermanos Luis y Teresa. La anfitriona de la merienda es Nora de Liechtenstein, viuda del marqués de Mariño y quien ha ejercido desde hace tiempo de protectora afectiva.