Platos de cuchara a lo moderno: como innovar en los guisos y cremas de la abuela ahora que llega el otoño

El otoño es la temporada perfecta para aprovechar ingredientes frescos y de calidad. Calabazas, boniatos, setas y castañas son algunos de los productos que no pueden faltar en tu cocina. Estos alimentos no solo aportan sabor, sino que también añaden un colorido especial a los platos de cuchara.

Una opción es añadir calabaza a la clásica crema de verduras, o incorporar setas silvestres en los tradicionales potajes de garbanzos. Estos ingredientes elevan el sabor de las recetas sin perder el toque hogareño. Además, el uso de especias modernas como el curry o el jengibre puede aportar un contraste interesante y sorprender a los paladares más exigentes.

Los guisos de siempre pueden evolucionar para adaptarse a las dietas más actuales. Sustituir la carne por legumbres o proteínas vegetales como el tofu o la soja texturizada es una excelente opción para quienes buscan opciones más ligeras o vegetarianas. El resultado es igual de sabroso, pero con un aporte nutricional más saludable.

Un buen ejemplo es el potaje de garbanzos con espinacas, un plato muy conocido al que se le puede añadir un toque moderno cambiando el chorizo por tofu marinado o incorporando alga kombu para darle un sabor más profundo

Una de las formas más efectivas de modernizar un plato de cuchara es jugar con las texturas. En lugar de servir los guisos de manera tradicional, se pueden añadir elementos crujientes o cremosos que contrasten con la suavidad del caldo o las verduras cocidas.

Por ejemplo, en una crema de calabaza, se pueden añadir toppings como pipas de calabaza tostadas, semillas de chía o crujientes de garbanzos al horno. Estos pequeños toques añaden una textura interesante y un punto de originalidad que hará que el plato destaque. En el caso de los guisos, acompañarlos con un poco de polvo de jamón ibérico o virutas de queso curado le dará un toque crujiente muy apetecible.

Uno de los grandes secretos para modernizar los platos de cuchara está en la mezcla de sabores. Los ingredientes de temporada como la calabaza, el boniato o la remolacha se pueden combinar con alimentos exóticos como el miso, el tamarindo o el tahini, creando cremas y guisos que fusionan la tradición con la gastronomía internacional.

Una forma sencilla de innovar es darle un toque diferente a la clásica crema de patata añadiendo un poco de miso blanco, que le da un sabor umami sorprendente. O transformar una crema de zanahoria tradicional añadiendo curry en polvo y leche de coco, aportando una riqueza en sabores que transporta el plato a otro nivel.