Viñas del Cénit, la bodega que hizo grandes los tintos de Zamora

Fue la búsqueda de viñedos singulares e inéditos el origen del proyecto de Viñas del Cénit, allá por 2001. Lo recuerda Eulogio Calleja, el director técnico del grupo de bodegas AvanteSelecta, al que a día de hoy pertenece este proyecto de tintos de calidad en tierra zamorana. Lo que les enamoró fueron los viñedos de vetustas cepas de tempranillo. Un tesoro, un diamante en bruto.

Lo que en muchos lugares de nuestra geografía ya se identifica como viñedo vetusto (cepas de 40-50 años) aquí lo ven como joven, ya que la edad de las cepas parte de los 40 años hasta los más de 120, con edades prefiloxéricas. Una materia prima única y de primera.

Esta bodega se nutre de viñedos localizados únicamente en los términos de Villanueva de Campeán y Cabañas de Sayago, municipios ubicados en la Tierra del Vino.

La bodega está situada en el corazón de la histórica Tierra del Vino de Zamora. Gracias al clima de la zona y a la filosofía de la bodega se lleva a cabo una viticultura en la que solo se utilizan productos orgánicos respetuosos con el medio ambiente y se realizan los trabajos de forma sostenible. Los suelos además permiten dar juego: superficie variada, arenas, cantos rodados y arcilla. Cada parcela, un mundo.

Sin querer entrar excesivamente en detalles técnicos, destacar que los depósitos de fermentación que utiliza esta bodega no son los clásicos cilíndricos y de gran altura. Para que el vino tenga más contacto, la bodega cuenta con 32 depósitos abiertos de acero inoxidable con temperatura controlada, tipo bañera, de una capacidad máxima de 4.000 Kg.

Algo novedoso y muy inusual. Además cuenta con dos tinas de madera para fermentación y crianza de algunos lotes más especiales. Los tamaños de los depósitos van desde 1.000 a 25.000 litros. La crianza se realiza en su totalidad en barricas de roble francés procedente de distintas tonelerías.

Del polifacético viñedo se elaboran dos líneas de vinos: la línea top que está presidida por Cénit, el primer vino que elaboraron, “el vino que vinimos a elaborar aquí”, recuerda Eulogio; por encima está el exclusivo y de escasa producción Cénit VDC; y Vía Cénit, que se elabora con el mismo ADN que Cénit, pero tiene menos paso por barrica.

La línea de mayor producción de la bodega la encabeza Venta Mazarrón, uno de los vinos más conocidos de este proyecto, y de la zona, gama que incorporó hace poco al joven Villano.

Estas cinco marcas son un abanico que muestra, cada una a su forma, lo vivo y rico del vetusto viñedo de Viñas del Cénit. Vía Cénit 2013, que acaba de estrenar añada, se elabora a partir de uva obtenida de viñas de entre 80 y cien años. Algo único. Un vino carnoso, goloso, con muy buena estructura, y además con rasgos elegantes. Un vino que es fino, pero que refleja la tipicidad de la zona. Un vino de guarda en toda regla.

Venta Mazarrón 2013, que también estrena añada en estos momentos, completa la Seleccion del Club Todovino de octubre junto a Vía Cénit 2013. Se trata de uno de los vinos más conocidos de este proyecto, y de los de la zona en general, y en esta añada nos ha sorprendido especialmente: muy aromático, jugoso y sabroso. Elaborado a partir de viñas con una edad media de cuarenta años, podemos afirmar que se trata de una de las mejores compras (excelente relación calidad-precio) del año.

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