Tita y Borja, vecinos sin derecho a roce

Ya lo pronosticaba José Luis Moreno en su serie ‘La Que se avecina’ con sus inquilinos anónimos. Ahora las disputas han subido de nivel, Tita y Borja habitan en La Moraleja, pero su careo está a nivel de barrio. El primogénito de Carmen Cervera, tras anunciar vía exclusiva que tiene derecho, tanto como su madre, a la fortuna de Heini Thyssen, se ha trasladado a Madrid.

La capital se mide por su centro histórico, sus alrededores y sus numerosas urbanizaciones de lujo. Casualidades de la vida Borja y Blanca se han ubicado en una casa de alquiler muy cerca de la mansión en propiedad de la ex Miss España en La Moraleja. La pregunta está en la calle ¿esta coincidencia es cuestión del azar o es una provocación?.

El pulso entre las dos familias, Thyssen versus Cuesta está echado. No sería de extrañar que uno día de estos las mujeres de la familia, la Baronesa y Blanca, coincidieran en uno de los centros de estética más afamados, frecuentado por Ana Obregón o Norma Duval. ¿Será para limarse las uñas? quién sabe.

Lo cierto es que son tiempos de reflexión para las dos partes en conflicto. Hace pocos días la joven pareja fue vista paseando por la pasarela que une las dos Moralejas. Con semblante pensativo, el matrimonio estaba acompañado su hijo, Sacha, subido en su sillita y tirada por su nanny.

Muy cerca de ellos, de forma discreta, un joven mucho más bajo que Borja, no era un amigo, simplemente su guardaespaldas y la sombra de Tita planea en sus vidas. Blanca llevaba un vaquero ajustado, con blusa muy ibicenca, mientras que su marido lucia un pantalón oscuro.

En el círculo íntimo de Borja se comenta que el joven estaba cansado de la actitud de su madre respecto a la herencia. Ahora el millonario va “a por todas” y no le importa, según se dice, que el proceso judicial vaya a durar unos cuantos años. Por cierto que las fotos de la semana pasadas en las que el hijo de Tita anunciaba la guerra fueron hechas en el despacho de sus abogados.

Mientras la cabeza de los B&B sigue barruntado acerca del proceso legal contra la matriarca de la casa, Carmen Cervera hace lo propio. Lo que está viviendo la ex actriz es de culebrón venezolano, con puntas de crónica negra. Su círculo más íntimo, cada día más estrecho por las deserciones de los últimos meses, cuenta como está sufriendo Tita.

Por un lado está triste por el contencioso legal, pero, por otro lado, dicen que la Baronesa no ha perdido fuelle. Hay un comentario bastante sustancioso que puede dar un vuelco a la historia. Los íntimos de Carmen afirman que la aristócrata lo tiene todo muy bien atado y las reivindicaciones de Borja no tienen base. Con todos los ingredientes sobre la mesa veremos en las próximas semanas como se cocina este desaguisado.