Las cinco claves para elegir tus pendientes de novia y no arrepentirte

En lo primero que piensa una novia cuando comienza los preparativos de su enlace es en el vestido. Algo lógico, teniendo en cuenta que es la pieza más importante y sobre la que se posarán todas las miradas cuando la protagonista haga la entrada en la ceremonia. Sin embargo, el look nupcial está compuesto de muchos más elementos y, aunque ya te hemos hablado de varios accesorios con los que darle un toque diferente, las joyas casi siempre están presentes, especialmente, los pendientes.

La elección de estos es fundamental por muchos motivos; no solo pueden robarle más protagonismo del que deben al vestido si son demasiado llamativos, si no que también entra en juego una cuestión de comodidad: si son demasiado pesados, por ejemplo, la novia estará deseando quitárselos. Para elegir aquel modelo que se adapte perfectamente a lo que buscas, te damos una serie de claves y consejos básicos.

1. Priorizar la comodidad

Como comentamos, más allá de que unos pendientes sean más o menos bonitos o lujosos, lo ideal es que sean confortables para quien los lleve puestos. En este sentido, hay que tener en cuenta cosas como el peso, el tipo de cierre, los materiales (si podrían desencadenar alguna reacción alérgica o no) etc. Es posible que unos pendientes de menor precio -incluso de bisutería- sean ideales para ti, la clave es encontrar el equilibro entre el coste y la calidad que te puedan proporcionar.

2. Estilo coherente

Antes de lanzarnos a la búsqueda de unos pendientes, tenemos que acotar el proceso basándonos en el estilo que hayamos elegido para el vestido u otros accesorios como puede ser una tiara o tocado o los zapatos. Si has optado por un diseño clásico opta por unos pendientes de líneas sencillas con piedras preciosas, si eres una novia moderna elige joyas más atrevidas, para las novias boho, nada como los pendientes a todo color.

Además ser coherentes con el estilo, debemos serlo con el patrón del vestido, especialmente, en lo que respecta a la parte superior del mismo. Para vestidos con escotes muy despejados como palabra de honor o corazón, la mejor opción son los pendientes largos y vistosos. Si llevas un escote más cerrado, los pendientes de novia perfectos son cortos o pegados al lóbulo.

3. Más o menos favorecedores

Como otras prendas de ropa, determinados tipos de joyas favorecen más a unas siluetas que otras; en el caso de los pendientes, no va a ser menos. Aquellas novias con rostros redondeados se verán especialmente favorecidas con pendientes de forma alargada, ya que conseguirán afinar los rasgos; si tu cara tiene forma cuadrada o ángulos muy marcados, lo ideal es elegir pendientes con diseños curvos; para rostros más alargados, la opción idónea son los pendientes con volumen.

4. La importancia del peinado

Evidentemente tenemos que pensar en cómo vamos a querer llevar nuestra melena el día de la boda, antes de elegir los pendientes. De nada servirá escoger unos pendientes colgantes si vamos a llevar el pelo suelto y se van a esconder entre los mechones de pelo. Así, si llevarás el cabello suelto, prueba con pendientes de novia más llamativos con pedrería o perlas de tamaño medio-grande.

Si vas a lucir un recogido bajo ya sea en forma de moño o coleta, lo mejor es optar por pendientes pegados pero con volumen. En este grupo se deberían de ubicar aquellas novias que, por alguna razón, quieran dar mayor protagonismo a sus pendientes. Por último, para cabellos cortos o recogidos muy altos, los pendientes largos son los que mejor sientan, sofisticando y subiendo de nivel el peinado.

5. Colores, materiales, tipos

Las posibilidades que existen en el mercado son infinitas y aptas para todos los gustos, así que el mejor consejo es elegir aquellos que más te gusten y reflejen tu personalidad independientemente de cómo sean. No hay nada escrito en lo que combinaciones se refiere, siempre que se siga una misma paleta cromática (ya sea tono o a contraste).

Algunos de los pendientes de novia que podemos encontrar en las diferentes firmas de joyería son: las clásicas perlas, pendientes con diamantes, de oro blanco, amarillo, rosado, piedras semipreciosas...