El segundo vestido de novia de Amy Jackson para su boda con Ed Westwick es 'made in Spain': de seda y bordado con cristales

A principios de 2024 y durante unas vacaciones de invierno por Suiza, Ed Westwick, el mítico Chuck Bass de la serie 'Gossip Girl', le pidió matrimonio a su novia, la actriz británica Amy Jackson. Con esta petición de amor, la pareja, que comenzó su noviazgo en 2022, daba un paso más en su relación y acto seguido, comenzaron los preparativos para el gran día.

Este fin de semana, Ed Westwick y Amy Jackson, han cambiado de estado civil, de solteros a casados, en un idílico enlace celebrado en la Costa de Amalfi, Italia. Un destino que ha servido para celebrar su amor durante varios días, con una fiesta de bienvenida, el día 'B' y como colofón, una fiesta postboda.

La última vez que la flamante pareja de ahora recién casados visitó nuestro país de manera oficial y pública fue durante el mes de abril para acudir al desfile de Pronovias celebrado en el marco de la Barcelona Bridal Fashion Week. Una ocasión que a la actriz británica le sirvió para fichar las nuevas tendencias nupciales que iban a mandar en la industria y de paso, encargar a la firma española su segundo vestido de novia para entonar el 'sí, quiero'.

Dicho y hecho, una vez convertida en mujer de Ed Westwick, Amy colgó su primer vestido de novia para enfundarse en un diseño exclusivo creado en el taller que la marca posee en la Ciudad Condal. "Después de ver el desfile, Amy se enamoró al instante de la marca española de novias, lo que la llevó a elegir un precioso vestido de seda blanco de la colección para su día especial", cuentan desde Pronovias.

Fusionando dos de los valores que hoy mueven los pasos de la enseña, estos son, la artesanía española y la nueva estética de modernidad contemporánea para novias, la modelo deslumbró con un diseño joya fabricado en un tejido de seda de color blanco bordado con cristales.

El equipo creativo de Pronovias nos lo describe en profundidad. "Es un vestido confeccionado en satén de pura seda para ceñirse al cuerpo y darle la forma perfecta para crear una silueta glamurosa y sinuosa. Los detalles fluidos, como sus delicadas mangas y la cola de exuberante vuelo, están fabricados en gasa de seda. El corsé y los guantes están totalmente bordados a mano y presentan pequeños cristales bicolores con un diseño de chevron para añadir un toque de luz y magia al diseño".

Tal y como señalan desde la casa de moda nupcial, el modelo "requirió un total de 32 horas de patronaje, 28 horas de bordado y 45 horas de construcción". Un total de 105 horas de trabajo repartidas entre los diversos artesanos que forman parte de Pronovias, perfectamente coordinados para dar vida a un traje de novia que ayudó a brillar a la actriz británica en su gran día.

Este vestido de novia sirvió a la esposa de Ed Westwick como segundo atuendo nupcial para el enlace. Una vez concluida la ceremonia y para dar paso a los festejos, Amy optó por un diseño más cómodo de patrón más relajado que no le robó ni un ápice de elegancia ni sofisticación.