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Estas son cinco formas de evitar o reducir la apnea del sueño
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Estas son cinco formas de evitar o reducir la apnea del sueño

La apnea del sueño no solo afecta la calidad del descanso, sino que también puede tener consecuencias graves para la salud

Foto: Dormir de lado es una de las maneras que pueden mejorar una apnea del sueño. (iStock)
Dormir de lado es una de las maneras que pueden mejorar una apnea del sueño. (iStock)

La apnea del sueño es un trastorno común pero potencialmente grave que afecta la respiración durante el sueño. Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), este problema, que puede causar interrupciones repetidas en la respiración, afecta a alrededor del 20% de la población adulta en España. Afortunadamente, existen métodos respaldados por la ciencia que pueden ayudar a prevenir o reducir los síntomas de este trastorno.

El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo importantes para la apnea del sueño, especialmente para la apnea obstructiva del sueño (AOS), la forma más común del trastorno. Un estudio publicado en 'American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine' encontró que una pérdida de peso moderada puede reducir significativamente los episodios de apnea. Esto se debe a que el exceso de grasa en el cuello y la zona abdominal puede obstruir las vías respiratorias, dificultando el paso del aire durante el sueño. Adoptar una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables, combinada con actividad física regular, es fundamental para mantener un peso adecuado y mejorar la calidad del sueño.

placeholder Una paciente con apnea del sueño obstructiva. (iStock)
Una paciente con apnea del sueño obstructiva. (iStock)

La posición al dormir puede influir significativamente en la gravedad de la apnea del sueño. Según un estudio publicado en la revista 'Chest', dormir boca arriba aumenta la probabilidad de que las vías respiratorias se colapsen debido a la gravedad, lo que exacerba los episodios de apnea. En cambio, dormir de lado ayuda a mantener las vías respiratorias abiertas y reduce las interrupciones en la respiración. Para quienes tienen dificultades para mantener esta posición durante la noche, los expertos sugieren usar almohadas corporales o dispositivos que eviten girar hacia la espalda.

El alcohol y ciertos medicamentos sedantes, como las benzodiacepinas, pueden relajar excesivamente los músculos de la garganta y aumentar la probabilidad de obstrucciones en las vías respiratorias. Un artículo en 'Sleep Medicine Reviews' destacó que evitar estas sustancias al menos tres horas antes de acostarse puede reducir significativamente la frecuencia e intensidad de los episodios de apnea. Además, limitar el consumo de cafeína por la tarde y mantener una rutina de sueño regular también puede mejorar la calidad del descanso.

placeholder Una persona con apnea del sueño, durmiendo. (iStock)
Una persona con apnea del sueño, durmiendo. (iStock)

Para los casos más graves de apnea del sueño, el uso de un dispositivo CPAP es el tratamiento estándar. Este dispositivo, que consiste en una mascarilla conectada a una máquina que proporciona un flujo constante de aire, ayuda a mantener las vías respiratorias abiertas durante el sueño. Un estudio de la 'American Academy of Sleep Medicine' demostró que el uso regular de CPAP mejora significativamente los niveles de oxígeno en la sangre, reduce los ronquidos y mejora la calidad de vida de los pacientes con apnea del sueño. Aunque puede requerir un período de adaptación, este tratamiento es altamente efectivo para quienes padecen apnea moderada o severa.

El fortalecimiento de los músculos de la garganta y la lengua puede ayudar a reducir la apnea del sueño, especialmente en casos leves o moderados. Una investigación publicada en 'The Lancet Respiratory Medicine' mostró que los ejercicios orofaríngeos, como pronunciar ciertas vocales o realizar movimientos repetitivos con la lengua, pueden disminuir significativamente los episodios de apnea al mejorar el tono muscular en las vías respiratorias. Además, algunas técnicas de fisioterapia respiratoria, como los ejercicios de respiración profunda, pueden complementar este enfoque.

La apnea del sueño es un trastorno común pero potencialmente grave que afecta la respiración durante el sueño. Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), este problema, que puede causar interrupciones repetidas en la respiración, afecta a alrededor del 20% de la población adulta en España. Afortunadamente, existen métodos respaldados por la ciencia que pueden ayudar a prevenir o reducir los síntomas de este trastorno.

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