Máxima tensión: las escenitas de Laurent de Bélgica en la Fiesta Nacional
El hermano del rey Felipe demostró su poca profesionalidad durante el desfile de la Fiesta Nacional. No saludó a los políticos y se puso a hablar por el móvil
La Fiesta Nacional de Bélgica, que se celebró este domingo, nos dejó con un sinfín de anécdotas, como ver a la princesa Elisabeth ya convertida en toda una mujer caminando sobre unos taconazos de Gianvito Rossi o al príncipe Gabriel de nuevo con el pie escayolado. Sin embargo, y aunque nadie lo esperara, el que se llevó la atención mediática fue el príncipe Laurent, el polémico hermano del rey Felipe.
Tras el 'Te Deum' en la catedral de Santa Gúdula de Bruselas, la familia real casi al completo -solo faltaban Alberto II y Paola- presenció el tradicional desfile militar. Aparte de los reyes y sus hijos, también estuvieron presentes los hermanos del monarca con sus respectivas parejas: la princesa Astrid acompañada por Lorenzo de Austria Este y el príncipe Laurent junto a la princesa Claire.
Últimamente, Claire tiene un perfil muy secundario y casi no acude a ningún acto, algo que ha despertado los rumores sobre una posible crisis matrimonial, que han aumentado tras las escenitas que protagonizó Laurent. Y es que se le ocurrió ponerse a hablar por teléfono móvil durante el desfile. En las imágenes puede verse como su esposa trata de llamarle la atención en numerosas ocasiones.
🇧🇪 Onvoorstelbaar! Prins Laurent belt tijdens het defilé op de nationale feestdag. Op een gegeven moment lijken koning Filip en koningin Mathilde dat door te hebben - ze kijken in zijn richting. Echtgenote prinses Claire lijkt hem ook duidelijk te maken dat dit niet kan. pic.twitter.com/MQ0Vzpfgkp
— [Wim Dehandschutter] (@WDehandschutter) 21 de julio de 2019
En el palco central, el rey y Matilde no dejaban de mirarlo en señal de reprimenda, atónitos por la escena; tampoco su hermana Astrid podía creer lo que estaba sucediendo, pero a pesar de los avisos de su mujer, él hizo caso omiso y siguió hablando por teléfono cerca de dos minutos. La cara de Claire, al igual que la de los reyes, era un auténtico poema, demostrando su disgusto con la actitud de Laurent.
Pero aquí no queda la cosa. El 'enfant terrible' se comportó de manera poco profesional en varias ocasiones. En un momento dado, la que fuera durante años doctora de la familia real, Cathérine le Clément de Saint-Marcq Haar, se acercó para saludarlos y Laurent apenas le hizo caso. Fue Claire quien tuvo que avisarle para que se levantara, pero al final fue la doctora la que tuvo que saludar al príncipe, que permaneció sentado y con cara de pocos amigos.
🇧🇪 “Sta ook eens op, Laurent”, gebaart prinses Claire voor de start van het defilé, als huisarts Cathérine le Clément de Saint-Marcq haar, prinses Astrid en prins Lorenz komt groeten. Laurent blijft (ostentatief?) zitten. De vrouw werd bekend als lijfarts van koning Albert. pic.twitter.com/tSmcryl5TZ
— [Wim Dehandschutter] (@WDehandschutter) 21 de julio de 2019
Hay más. Una vez terminado el desfile, los políticos se pusieron en fila para despedir a los miembros de la familia real. Laurent ocupó su lugar, pero tras saludar a uno de los gobernantes, se giró y se marchó sin decir nada. Suponemos que los políticos, ya acostumbrados a su comportamiento, ni se extrañaron de su gesto. Pero los medios de comunicación belgas están que arden con el tema.
🇧🇪 “Neen, ik ga geen afscheid nemen van die politici”, lijkt prins Laurent te gebaren tegen prinses Claire (let in het begin op de wijsvinger van zijn rechterhand). Hij schudt nog één hand en vertrekt dan, terwijl de rest van de koninklijke familie het rijtje wel beleefd afgaat. pic.twitter.com/WA4KblbzF4
— [Wim Dehandschutter] (@WDehandschutter) 21 de julio de 2019
La Fiesta Nacional de Bélgica, que se celebró este domingo, nos dejó con un sinfín de anécdotas, como ver a la princesa Elisabeth ya convertida en toda una mujer caminando sobre unos taconazos de Gianvito Rossi o al príncipe Gabriel de nuevo con el pie escayolado. Sin embargo, y aunque nadie lo esperara, el que se llevó la atención mediática fue el príncipe Laurent, el polémico hermano del rey Felipe.