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La durísima situación de Guillermo Vilas, amor de juventud de Carolina de Mónaco
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SU MOMENTO MÁS DIFÍCIL

La durísima situación de Guillermo Vilas, amor de juventud de Carolina de Mónaco

El legendario tenista padece un enorme deterioro cognitivo y vive apartado de la vida pública desde hace tiempo, según medios argentinos y testimonios de su entorno

Foto:  Guillermo Vilas y Carolina de Mónaco, en una imagen retrospectiva. (Getty)
Guillermo Vilas y Carolina de Mónaco, en una imagen retrospectiva. (Getty)

Decían los cronistas de la época que Maradona tenía fijación con Carolina de Mónaco, pero no logró lo que su compatriota, Guillermo Vilas, vivir una breve e intensa historia de amor con ella. Treinta y ocho años más tarde de un romance que dio la vuelta al mundo, el mítico jugador de fútbol ha hecho público un emotivo mensaje, una vez que ha trascendido la noticia de que su compatriota tiene graves problemas cognitivos, que le mantienen desde hace tiempo apartado de la vida pública.

"Querido Willy, te debemos tantas alegrías y emociones. Espero que SIEMPRE recibas el respeto y la dignidad que todos nos merecemos, en las buenas y sobre todo en las malas. Ojalá que en este momento, todos podamos estar a tu altura. Un abrazo enorme, leyenda", escribía el Pelusa después de que el diario deportivo argentino 'Olé' desvelara sus duras circunstancias actuales.

"Su estado de salud se mantiene bajo llave dentro de la residencia monegasca, y solo sale en forma de posteos en el Instagram de Phian, la esposa de Guillermo. Pero Vilas no es el Vilas de antes, el verborrágico, el poeta, el que dibujaba un arcoíris con vocales y consonantes", leemos en la mencionada publicación, que destaca que la primera vez que salió a la luz esta situación fue hace dos años cuando Tito Vázquez, quien fuera su compañero de dobles, manifestara que “nadie lo dice pero creo que él tiene un principio de alzhéimer. Y, según tengo entendido por gente que me ha hablado, lo han visto bastante mal, pobre”.

placeholder Guillermo Vilas y su mujer, Phiangphathu Khumueang, en el Open USA de 2016. (EFE)
Guillermo Vilas y su mujer, Phiangphathu Khumueang, en el Open USA de 2016. (EFE)

El mejor tenista argentino de todos los tiempos, ganador de 64 títulos de la ATP, cuatro de ellos Grand Slam, y gran rival de Nadal durante años en las estadísticas por ser el jugador con más triunfos en tierra batida, fue protagonista de la crónica social cuando después de ganar el torneo de Montecarlo el 11 de abril de 1982 y de recibirlo de manos de Grace Kelly, se encontró con su primogénita, Carolina de Mónaco, en el Country Club de Montecarlo, divorciada desde octubre de 1980 de su primer marido, Philippe Junot, y saltaron chispas. Su historia no tuvo demasiado recorrido, y unos meses más tarde la mítica musa de Hitchcock perdía la vida en un fatídico accidente de tráfico, el 14 de septiembre de ese mismo año.

placeholder El tenista, en una imagen de 2013. (EFE)
El tenista, en una imagen de 2013. (EFE)

Guillermo Vilas está casado desde 2005 con la tailandesa Phiangphathu Khumueang, tres décadas más joven que él, a quien conoció en un centro comercial de Bangkok y de quien se enamoró perdidamente. Padres de tres hijas, Andanin, nacida en 2003 en París; Lalindao, en enero de 2010, en Miami, e Intila, en diciembre de 2010, en Buenos Aires, fueron protagonistas de su boda religiosa, que tuvo lugar el 16 de mayo de 2016 en la parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes de la capital argentina. Su primer y único hijo varón, Guillermo, nació en Mónaco en abril de 2017 y fue el propio tenista quien lo presentó con orgullo en las redes sociales.

Pese a su delicada situación, desvelada por los medios argentinos, sigue activo en su perfil de Instagram, y hace dos semanas precisamente felicitaba a su hijo por su tercer cumpleaños, y hace tan solo siete días publicaba la imagen de los dos trofeos que ganó en Montecarlo, en 1977 y en 1982, precisamente cuando comenzó su breve relación con Carolina de Mónaco. Según el mencionado periódico argentino, "tiene algunos momentos de lucidez pero no tiene plena conciencia de lo que sucede a su alrededor, incluso ha llegado a desconocer a amigos".

Decían los cronistas de la época que Maradona tenía fijación con Carolina de Mónaco, pero no logró lo que su compatriota, Guillermo Vilas, vivir una breve e intensa historia de amor con ella. Treinta y ocho años más tarde de un romance que dio la vuelta al mundo, el mítico jugador de fútbol ha hecho público un emotivo mensaje, una vez que ha trascendido la noticia de que su compatriota tiene graves problemas cognitivos, que le mantienen desde hace tiempo apartado de la vida pública.

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