El día en que Isabel II se escondió detrás de un arbusto: ¿de quién huía?

Mantener la compostura y lidiar ante cualquier situación con la educación más exquisita y el protocolo más medido es algo que la reina Isabel II sabe hacer como nadie. Pero hasta la mismísima reina de Inglaterra tiene días en los que su paciencia llega a su límite.

Ocurrió en 1978, cuando el dictador rumano Nicolae Ceaușescu, un personaje muy impopular en Reino Unido, realizó una visita de estado de cuatro días a Londres con su esposa Elena.

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"La prensa comenzó a cuestionar al secretario de Asuntos Exteriores", reveló Robert Hardman en un nuevo documental de ITV titulado 'Our Queen: Inside the Crown', que se emitió en el Reino Unido este pasado jueves y que 'People' ha querido resaltar. En él, Hardman asegura que los medios incluso se preguntaron: "¿por qué estamos invitando a este monstruo a venir a Gran Bretaña?".

El gobierno británico organizo una cena para Ceaușescu en el Palacio de Buckingham. A pesar de la polémica que la visita provocaba, Isabel II hizo de tripas corazón y fue a la estación de tren a recibir al incómodo invitado. Ella, el duque de Edimburgo, Nicolae Ceaușescu y su esposa Elena viajaron en carruaje descapotable hasta el Palacio de Buckingham.

Las ganas de Isabel II por interactuar con el matrimonio eran nulas, lo que provocó el momento menos protocolario de todo el reinado de la madre de Carlos de Inglaterra. "Cuando se quedaron solos en Palacio, Isabel II sacó los corgis a dar un paseo por los jardines y pudo ver cómo los Ceaușescu se acercaban por el otro lado", cuenta Hardman.

"Ella pensó: 'realmente no puedo enfrentarme a hablar con ellos', así que por primera y única vez en su vida, se escondió detrás de un arbusto en los jardines del palacio para evitar a sus invitados", agrega.

"La Reina soporta a muchas personas diferentes, pero Ceaușescu fue demasiado para ella", comenta en el documental el ex Secretario de Relaciones Exteriores británico, Lord David Owen. "¡Dejó en claro que no le gustaba esa visita!".