La mansión inglesa que Trump quiere que Isabel II le alquile por 999 años más
Winfield House, en Regent's Park, fue el hogar de la socialite norteamericana Barbara Hutton mientras estaba casada con Cary Grant
Según ha publicado 'The Times', Donald Trump solicitará a Isabel II una prórroga por nada menos que 999 años más en el alquiler de la mansión que actualmente sirve como residencia al embajador de Estados Unidos en Inglaterra, una impresionante propiedad de 35 habitaciones en el centro de Londres.
Winfield House, propiedad de la Corona, cuenta con los segundos jardines privados más grandes del país y es una pieza clave en el arsenal diplomático estadounidense en el Reino Unido, utilizado para acoger a dignatarios y hasta a la propia reina. La difunta Diana de Gales trajo una vez hasta esta residencia a los príncipes Guillermo y Harry para que vieran el helicóptero Marine One del presidente de los EEUU aparcado en el césped.
Se cree que Trump pedirá la prórroga como parte de un acuerdo comercial entre el Reino Unido y los Estados Unidos. Un portavoz de la embajada le dijo al periódico inglés: "Esperamos continuar con la larga tradición de Winfield House como residencia oficial del embajador. Pero como cualquier contrato de arrendamiento, es confidencial y por lo tanto no hacemos comentarios sobre esta especulación".
Construida en los años 30 por la socialite norteamericana Barbara Hutton, vivió allí con su marido Cary Grant durante su estancia en el Reino Unido. Fue bautizada en honor a su abuelo, Frank Winfield Woolworth, el hombre detrás de las famosas tiendas del mismo nombre. En 1955 se convirtió en la residencia del embajador de los Estados Unidos, y desde entonces todos los presidentes se han alojado allí.
La mansión guarda también una interesante historia real. El terreno sobre el que se encuentra edificada la casa fue utilizado por el rey Enrique VIII para sus jornadas de caza, mientras que la reina Isabel I lo utilizó para acoger a dignatarios extranjeros.
En 1825, se construyó allí la Villa Hertford para Francis Seymour-Conway, el tercer marqués de Hertford. Posteriormente vivieron en ella el financiero americano Otto Kahn y el barón de la prensa británica Lord Rothermere, antes de ser derribada por Hutton y reconstruida como la residencia actual.
Según ha publicado 'The Times', Donald Trump solicitará a Isabel II una prórroga por nada menos que 999 años más en el alquiler de la mansión que actualmente sirve como residencia al embajador de Estados Unidos en Inglaterra, una impresionante propiedad de 35 habitaciones en el centro de Londres.