El agradecimiento de un paciente a Sofía de Suecia por su trabajo como enfermera
La princesa ha sido una de las royals más implicadas en la pandemia, ya que no dudó en hacerse un curso de enfermería para trabajar como apoyo en un hospital durante los meses más críticos
Les contábamos hace unos meses en Vanitatis cómo la princesa Sofía de Suecia había tomado una decisión sin precedentes en la Casa Real y que resultaba ser muy aplaudida. La esposa del príncipe Carlos Felipe decidía echar una mano en los meses más difíciles de la pandemia y hacer un curso de enfermería para formar parte del personal de apoyo en el Hospital Universitario de Estocolmo. Un rumbo laboral que retomaba tras sus vacaciones, cuando el pasado septiembre se incorporaba de nuevo a su trabajo en el centro médico, anunciando que compaginaría esta labor con sus funciones institucionales, que no ha abandonado. Un punto más a su favor tras alzarse -después de unos primeros años más difíciles- como uno de los miembros más valorados de la familia real sueca.
Aunque se anunciaba en su momento como un trabajo temporal por la necesidad del sector sanitario en plena pandemia, no solo parece haberse convertido en algo más definitivo, sino que también se ha extendido a otros pacientes y casos que no están relacionados con el coronavirus. Así lo hemos sabido gracias a una de las personas que han pasado por sus manos en los últimos días en el hospital, un hombre que se sometió a una operación de rodilla y que recibió los impagables cuidados de la mismísima nuera de los reyes Carlos Gustavo y Silvia, para sorpresa del propio paciente.
"El jueves por la mañana me desperté con el desayuno servido por la princesa Sofía. Me dijo: 'Hoy soy yo quien cuidará de ti'. Entonces, por razones obvias, me empecé a sentir mucho mejor. Tuve una buena charla con ella después del almuerzo, ya que también me ayudó a bajar al taxi. Ella era muy agradable y abierta", han sido las palabras del afortunado paciente, Henrik Bartoldsson, quien encontraba cierto consuelo a su dolorosa convalecencia gracias a los cuidados de la princesa, ahora convertida en enfermera. Acompañaba el texto con una fotografía de ambos, para la que Sofía posaba sin problemas, con su uniforme de trabajo y sonriente en la puerta del hospital, con la satisfacción del trabajo bien hecho, al menos con ese paciente, quien ha demostrado estar encantado con la experiencia.
Como decíamos, a pesar de su trabajo en el sector sanitario, Sofía no ha dejado a un lado sus labores institucionales, todo lo contrario. De hecho, el rey Carlos Gustavo ha confiado en ella y Carlos Felipe para uno de los proyectos más esperados de los últimos meses. La familia real ha decidido visitar todos los condados del país para interesarse por cómo ha afectado la pandemia a los ciudadanos. Serán citas que tendrán lugar una vez a la semana hasta diciembre y en las que los príncipes han sido incluidos, algo que les ha hecho especial ilusión, principalmente porque uno de los lugares que serán parada de su tour es Dalarna, de donde es originaria Sofía y donde todavía vive su familia.
Les contábamos hace unos meses en Vanitatis cómo la princesa Sofía de Suecia había tomado una decisión sin precedentes en la Casa Real y que resultaba ser muy aplaudida. La esposa del príncipe Carlos Felipe decidía echar una mano en los meses más difíciles de la pandemia y hacer un curso de enfermería para formar parte del personal de apoyo en el Hospital Universitario de Estocolmo. Un rumbo laboral que retomaba tras sus vacaciones, cuando el pasado septiembre se incorporaba de nuevo a su trabajo en el centro médico, anunciando que compaginaría esta labor con sus funciones institucionales, que no ha abandonado. Un punto más a su favor tras alzarse -después de unos primeros años más difíciles- como uno de los miembros más valorados de la familia real sueca.