El despiadado robo de la tiara de coronación de la duquesa de Portland

De nuevo las joyas de la Corona inglesa son noticia por culpa de un robo. Si hace unas semanas desaparecían de varios camiones doscientas gemas y valiosas antigüedades por valor de 180.000 euros destinadas al plató de 'The Crown', ahora es una tiara la protagonista de un mediático robo. Como "extremadamente serios, de alto perfil, cuidadosamente planificados y a veces despiadadamente ejecutados y violentos" se han calificado en un tribunal londinense los atracos de la banda de ladrones responsables de robar y posteriormente dañar una irremplazable parte de la historia real británica.

En 2018, los acusados robaron la tiara de Portland de la galería Harley. La joya confeccionada por Cartier, que estaba expuesta junto a un broche a juego, fue vestida por la duquesa de Portland en la coronación del rey Eduardo VII en 1902. Aunque la diadema ha sido reclamada desde entonces, se rompió, y el fiscal explicó que nunca se volverá a ver en su "estado original".

El valor combinado de ambas joyas se ha calculado en aproximadamente 4,5 millones de euros. "Es difícil exagerar la importancia y el valor cultural de estas joyas. Estaban expuestas para el disfrute del público. Su robo es un acontecimiento espeluznante y significa que nunca más podrán verse en su estado original", confirmaba el fiscal, Michael Brady.

Winifred, la duquesa de Portland, encargó a Cartier la realización de la valiosa tiara, un diseño en oro y plata con diamantes en talla cojín y briolette, específicamente para la coronación de Eduardo VII, durante la cual ella fue portadora del palio de la reina Alexandra. De hecho, la duquesa llegó a ser íntima confidente de la reina, actuando como su 'maestra de vestiduras' hasta su muerte en 1925.

En la actualidad no hay ninguna duquesa de Portland: la última, la era nuera de Winifred, murió en 1982, y cuando su marido el duque falleció en 1990 no tuvo ningún heredero varón, por lo que el título revirtió a la Corona británica.

Durante el juicio a los atracadores han salido a la luz otros de sus objetivos tras este robo, entre ellos el violento asalto al que fuera futbolista de la selección inglesa, Ashley Cole, que denunció que uno de los ladrones le amenazó con cortarle los dedos.

Los miembros del jurado escucharon el truculento relato del aterrador robo a punta de cuchillo a Cole y su familia. El que fuera defensa del Chelsea sufrió el asalto en su mansión londinense, mientras su pareja, la modelo Sharon Canu, y sus dos hijos pequeños se vieron obligados a ver cómo le obligaban a arrodillarse con las manos atadas a la espalda.

El grupo de seis hombres con pasamontañas huyó con objetos de valor, dinero en efectivo y un bolso Gucci antes de que llegara la policía. Uno de los presuntos miembros de la banda, Kurtis Dilks, de 34 años, ha negado todas las acusaciones.

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