Lalla Salma y el misterio de su vida 5 años después de su divorcio de Mohamed VI

La princesa Lalla Salma rompió moldes cuando entró a formar parte de la familia real marroquí. Aquella joven pelirroja, de larga melena y que no usaba velo, acaparó toda la atención desde que en 1999 el rey Mohamed VI anunciara que ella era su prometida.

Se casaron en marzo de 2002 y Salma se convirtió en la primera princesa real de Marruecos. Así, fue la primera esposa de un soberano alauí a la que se le otorgaba un título real. También, la primera en ser presentada al público y a los medios de comunicación.

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Sin embargo, la burbuja de Lalla explotó y se desvaneció en 2017. Sus apariciones públicas dejaron de producirse sin explicación ninguna. Su ausencia cuando Mohamed VI sufrió una arritmia cardiaca en febrero de 2018 fue demasiado evidente como para que no se preguntara por los motivos. Finalmente, un mes después, saltó la noticia de su divorcio, del que este martes 21 de marzo se cumplen 5 años.

Ya había una explicación para la desaparición de la princesa; sin embargo, aquella comenzó a ser inquietante. Desde octubre de 2017 no hubo noticias de su estado ni de su paradero. Ni el 15º cumpleaños de su hijo, el príncipe Moulay Hassan, el 8 de mayo, ni su propio 40º cumpleaños, dos días después, fueron motivos suficientes para que saliera del ostracismo.

Durante sus años de esplendor, Lalla Salma no se perdía ningún acto oficial del que fuera su marido, pero cuando en febrero de 2019 no estuvo presente en la visita de los reyes Felipe y Letizia a Marruecos ni tampoco en la del príncipe Enrique y Meghan Markle poco después, quedó más que claro que el divorcio (no confirmado de manera oficial por los protagonistas) era un hecho y que este iba a ser el modus operandi de Lalla impuesto por Palacio.

En abril de 2019, Lalla Salma y su hija fueron fotografiadas juntas en la plaza Jemaa el Fna de Marrakech. Esas imágenes de madre e hija disfrutando de un plan familia fueron las primeras que tuvimos de Lalla Salma tras su divorcio. En julio se supo que había viajado a Grecia. Se dijo que acompañada de sus dos hijos, pero no existían fotografías claras y llamó la atención que la princesa nunca hubiera aparecido de manera pública junto a sus dos hijos en tantísimos meses.

Comenzó a generarse la duda de si las restricciones públicas impuestas a la princesa también se estaban produciendo en su vida privada. ¿Se estaba negando a Salma ver como, donde y cuando quisiera a sus dos hijos después del divorcio? Eso es lo que informaba el medio francés ‘Gala’ en julio de 2019. Decía, haciéndose eco de la información de un portal web llamado Afrik.com, que Mohamed VI le habría prohibido salir a su exesposa del país con sus dos hijos al mismo tiempo para evitarle la tentación de huir con ellos. Lalla era presentada como una rehén de su marido.

El revuelo tomó tal dimensión que el abogado del rey Mohamed VI, Eric Dupond-Moretti, se vio obligado a emitir un comunicado en el que desmentía dicha información. Firmado por Mohamed VI y por Lalla Salma, en el mismo ambos aseguraban estar horrorizados por aquellas insinuaciones.

Pero la realidad seguía siendo una. Lo cierto es que durante casi dos años había resultado misión imposible fotografiar a Lalla Salma en compañía de sus dos hijos. Esas imágenes llegaron, por fin, en octubre de 2019, cuando el diario digital marroquí ‘Goud’ publicó unas fotos en las que se veía a la exmujer del rey de Marruecos junto a sus dos hijos en Nueva York y acompañados por un equipo de seguridad.

Pocos días después, Lalla Salma reaparecía en Rabat, con motivo de la exposición ‘Tesoros del Islam en África: de Tombuctú a Zanzíbar’, que organizó el Instituto del Mundo Árabe en el museo Mohamed VI de arte moderno y contemporáneo. Era su primer acto público en muchos meses.

Varios medios locales aseguraron que la madre del futuro rey de Marruecos retomaría de manera paulatina sus actividades públicas, algo que, sin embargo, nunca llegó a ocurrir.

Llegó la pandemia y con ella el confinamiento generalizado. Si Lalla ya era un fantasma público cuando el coronavirus irrumpió en las vidas de todos, su desaparición durante la crisis sanitaria fue total.

Poco o nada ha cambiado la situación de Lalla desde que la vacuna llegó a nuestras vidas y con ella la normalidad social. Cinco años después de su divorcio, Lalla continúa desparecida del ojo público y ya nadie pregunta por ella.

La última información que se tuvo sobre la princesa fue la que proporcionó el semanario marroquí 'Assahifa' con motivo de la celebración del 44º cumpleaños de Lalla Salma el pasado mes de mayo. Dicho medio aseguraba que la exmujer de Mohamed VI había disfrutado de una fiesta en una finca propiedad de la familia real ubicada en Rabat. Se afirmaba también que allí es donde reside de forma habitual junto a su hija, la princesa Khadija. Por supuesto, fotos de la reunión, no hubo.