La reina Camila demuestra en Wimbledon que está revolucionando su armario a los 77 años: las claves del cambio

A falta de Kate Middleton, de la que todos sospechan que hará una aparición especial estos días, buena es la reina Camila. La esposa de Carlos III no ha faltado a su tradicional cita con Wimbledon este miércoles, coincidiendo con sus sobrinos, Zara Tindall y Peter Phillips, acompañado este último de su nueva novia, la enfermera pediátrica Harriet Sterling. Una cita, además, que ha servido para ver cómo Camila está revolucionando su armario.

De un simple vistazo, podría parecer quie Camila sigue fiel a este estilo característico y esas líneas y patrones a los que nos tenía acostumbrados. Pero no. Poco a poco ha ido introduciendo novedades en su armario. Una revolución que coincide que el hecho de que la firma Dior esté prestándole ropa a la reina consorte, siguiendo así la tendencia sostenible que tiene cada vez más adeptas en el Gotha.

Para su aparición en Wimbledon este jueves, ha tirado de un clásico y los colores claros. Este torneo de tenis tiene un dress code muy marcado, ya que jugadores y jugadoras tienen que vestir de blanco. De hecho, en la mayoría de sus visitas, ha sido el color por el que Camila ha apostado.

La elección es un diseño de Anna Valentine, una modista británica con sede en Londres que confecciona ropa para clientes privados, con el objetivo de hacer prendas de alta calidad, elegantes y atemporales y que puedan amarse y usarse durante muchos años.

Se trata de un diseño midi, con falda de línea A. Hasta aquí podrán pensar que nada novedoso en el vestuario, pero sí encontramos detalles muy interesantes que hacen del look algo muy especial. Uno de ellos, la cremallera de la parte superior, aportando un toque de modernidad al estilismo. Otro, el bordado de jirafas en tonos ocres que vemos en la falda.

Ha combinado el vestido con unas joyas de esas eternas, con las mismas características y de la firma Van Cleef & Arpeels, una de sus favoritas. Por un lado, un broche en la solapa de un Jack Russell; por otro, una pulsera de la colección Alhambra, una pieza vintage inspirada en el trébol de cuatro hojas, en color azul y con el contorno con cuentas de oro.

La reina Camila sigue así la estela de sus últimas apariciones, con esas claves que la dirigen a un nuevo estilo. Estamos hablando de diseños más minimalistas, con patrones clásicos, pero con detalles que nos hacen pensar en siluetas modernas.

Como decíamos, este giro ha coincidido con el hecho de haber introducido en su armario una nueva firma, Dior, que curiosamente también era una de las favoritas de Lady Di. La maison ha optado por prestar algunos de sus diseños también a royals, apostando así por la moda sostenible, con la que muchas de ellas están tan concienciadas.

Algunos de los ejemplos más recientes que hemos visto de este giro ha sido en Ascot, donde la reina Camila estuvo varias veces con su marido, el monarca británico. Diferentes detalles de sus estilismos, como el cierre irregular de su diseño azul del día 21 de junio, o el original vestido, también de Dior, que presentaba un corte bastante novedoso para lo que estamos acostumbrados.