La infanta Elena coincide con el rey Felipe en un acto oficial: de la reverencia a su hermano al original broche de gingko
El rey Felipe ha asistido al 50º aniversario de la fundación Mapfre y allí ha coincidido con su hermana Elena, quien lo ha saludado con una protocolaria reverencia
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El rey Felipe VI y la infanta Elena han coincidido en un acto institucional con motivo del 50º aniversario de la Fundación MAPFRE. La cita, celebrada al mediodía en el emblemático Palacio de Cibeles de Madrid, ha rendido homenaje a medio siglo de labor de la entidad, en la que la hermana mayor del monarca ocupa un puesto destacado como Directora de Proyectos Sociales y Culturales.
El reencuentro entre ambos ha dejado imágenes significativas, marcadas por la complicidad y el respeto. Fiel al protocolo, la infanta Elena ha saludado a su hermano con una reverencia. A pesar del vínculo familiar que los une, la duquesa de Lugo no ha dudado en hacerle un pliegue de respeto, consciente de que estaba frente a Su Majestad el Rey.
Tanto Elena como Cristina mantienen esta tradición aprendida en su infancia: saludar a sus padres y a su hermano con una inclinación de cabeza y rodilla. En la generación actual, el protocolo se ha flexibilizado. Solo en una ocasión hemos visto a la princesa Leonor hacer una reverencia a don Felipe, concretamente cuando recibió el Toisón de Oro. Desde entonces, el gesto no se ha repetido.
A las 12:00 en punto, don Felipe ha hecho su entrada para presidir el acto central del aniversario, en el que se ha realizado un recorrido por los proyectos más emblemáticos y de mayor impacto de la Fundación. Entre los ejes abordados han destacado la Inclusión y el Desarrollo Social y Laboral, el área de Investigación, y el bloque de Solidaridad.
Conviene recordar que la infanta Elena se incorporó a la Fundación MAPFRE a mediados de 2008, poco después de anunciarse su separación de Jaime de Marichalar. Desde entonces, ha estado vinculada a la institución en un rol activo, centrado en la integración, la discapacidad y la cooperación cultural, con presencia tanto en España como en América Latina. Su participación en esta conmemoración, por tanto, estaba más que justificada.
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Para la ocasión, la infanta ha elegido un sastre en tono beis que ha combinado con una blusa naranja, accesorios marrones y un llamativo broche en forma de hoja de ginkgo. Esta planta medicinal asiática, utilizada desde hace más de 2.000 años por sus propiedades beneficiosas para la circulación y el cerebro, ha añadido un guiño simbólico y elegante a su estilismo.
En definitiva, el acto por el 50º aniversario de la Fundación MAPFRE no solo ha servido para poner en valor el compromiso social de la entidad, sino también para dejar una imagen cargada de simbolismo: la reverencia de la infanta Elena a su hermano, el rey Felipe VI. Un gesto que, aúna tradición, respeto institucional y sentido del deber. A pesar de los lazos familiares, la duquesa de Lugo no duda en marcar las formas cuando se trata de su papel público.
El rey Felipe VI y la infanta Elena han coincidido en un acto institucional con motivo del 50º aniversario de la Fundación MAPFRE. La cita, celebrada al mediodía en el emblemático Palacio de Cibeles de Madrid, ha rendido homenaje a medio siglo de labor de la entidad, en la que la hermana mayor del monarca ocupa un puesto destacado como Directora de Proyectos Sociales y Culturales.