De su proceso de divorcio a su relación con el alcohol: las confesiones de Adele a Oprah

La ganadora de 15 premios Grammy es feliz y no teme demostrárselo al mundo. A sus 33 años, Adele tiene un disco a punto de ver la luz y también un nuevo amor del que habló con sinceridad en una entrevista con Oprah Winfrey con motivo de un concierto especial televisado en la cadena CBS. "Es divertidísimo y muy inteligente. Ya sabes, es muy muy inteligente. Es increíble verle hacer lo que hace", le decía la cantante a la presentadora sobre Rich Paul.

También compartió que esta relación, en la que según ella todo "ha sido muy fácil", con el prestigioso agente deportivo se oficializaba el pasado mes de septiembre, cuando ambos acudieron juntos a una boda. Es la primera vez que "me he amado a mí misma y he estado abierta a amar y ser amada por otra persona", aseguraba.

"Sería interesante observar cómo es mi reacción en general a cualquier cosa que me haga daño ahora que me siento tan segura de mí misma, y estoy hablando también fuera de esta relación", confesaba Adele, que también se sinceró con Winfrey sobre la separación de su exmarido Simon Konecki, revelando que dejó de beber mientras pasaba por su divorcio. "Una vez que me di cuenta de que tenía mucho trabajo que hacer conmigo misma, dejé de beber y empecé a hacer mucho ejercicio y cosas así para mantenerme centrada", dijo.

La artista tuvo palabras de cariño para el padre de su único hijo, agradeciéndole su influencia positiva durante su matrimonio, manifestando incluso que "creo que Simon probablemente me salvó la vida", mientras aseguraba que nadie habría sido capaz de ofrecerle la estabilidad que él le brindó en su día. "Es la persona más estable que había tenido en mi vida hasta ese momento, incluso ahora le confío mi vida", afirmó.

Eso sí, asegura que el proceso de divorcio no fue nada sencillo debido en parte, a la necesidad de adaptarse a su nueva vida. "El divorcio es un proceso: el proceso de divorcio, el proceso de ser madre soltera... No ver a mi hijo todos los días no era realmente el plan que tenía cuando me convertí en madre [...] Se trata del proceso de llegar por ti misma todos los días, de aparecer por ti misma todos los días. Y más aún administrando una casa o administrando un negocio", aseguraba.

"Mucha gente sabe de lo que estoy hablando y yo también siento que hice malabares con esas cosas. Y tenía ganas de no hacerlo más [... ] Me dolían los pies de caminar a través de todo ese cemento", decía una Adele más sincera que nunca. Sobre su peso, asegura que fue esa intensidad con la que practicó deporte lo que le hizo llevar a cabo tan importante pérdida, pero que no fue buscada y que, en un futuro, podría volver a engordar; algo que reconoce no importarle (mientras esté bien).

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Marita Alonso

Durante el concierto especial, Adele actuó en el Observatorio Griffith de Los Ángeles para un público repleto de estrellas que incluían a nombres tan conocidos como Leonardo DiCaprio o Kris Jenner. Pero el invitado más especial de todos fue su hijo, que, según reveló, la veía en directo por primera vez.

Adele arrancó el repertorio de temas con la canción 'Hello', que, según dijo a Winfrey, suele ser la primera que interpreta en cada concierto, añadiendo que esta pieza es "el comienzo de mí tratando de encontrarme a mí misma y todavía no había descubierto qué era lo que tenía que hacer para eso". La cantante interpretó las nuevas canciones de su próximo álbum '30', así como algunos de los grandes éxitos de sus álbumes anteriores, como 'Someone like you' y 'Rolling in the deep'. En un momento dado, la inglesa tuvo un bonito detalle cuando ayudó a un hombre llamado Quentin a pedirle matrimonio a su novia Ashley.

Poco antes de que se emitiera el especial, Adele compartió imágenes de la actuación en su cuenta de Instagram y declaró en Twitter que "nunca había estado tan nerviosa en mi vida". También calificó el Observatorio Griffith como "el lugar más bonito en el que he tocado".

"Gracias a todos los que lo han hecho posible. A Oprah por permitirme decir mi verdad con cariño en un espacio seguro", escribió la cantante. "Todo fue bastante abrumador, lo he visto dos veces y he llorado a mares las dos ocasiones. Habiendo estado en una montaña rusa los últimos años y luego con la pandemia, era difícil imaginar estar en el escenario cantando de nuevo alguna vez. Así que el hecho de poder hacerlo y de interpretar mis nuevas canciones me hace sentir un millón de cosas a la vez".