Estilo countryside: las claves para decorar un hogar real en el que apetece vivir

Los gustos son libres y por eso cada persona encuentra la belleza a su manera. Esto podría explicar el motivo por el que tantos estilos diferentes de decoración puedan convivir en la actualidad en armonía, encontrando diseños muy diferentes en las firmas de decoración que nos ayuden a reflejar nuestra forma de ser también en casa. Los amantes de los estilos más acogedores y rurales, seguro que encuentran un especial atractivo en el estilo countryside.

Existen personas que prefieren sumarse a la tendencia del menos es más, las decoraciones minimalistas son ejemplo de ello y base de otro tipo de estilos, como los escandinavos, que beben de parte de esta esencia para evolucionar hacia otros lares. Los resultados suelen ser estancias mucho más cálidas, con una personalidad menos fría y más cercana que ha encontrado en el hygge el estilo ideal para disfrutar de las lluviosas tardes de invierno. Se podría decir que el countryside tiene parte de esta esencia, pues busca espacios cozy -es decir, agradables-, pero lo hace con una tendencia maximalista.

Este estilo, típico de las campiñas inglesas, es todo lo contrario a espacios diáfanos, paredes en blanco y hogares vacíos. Mezcla sin pudor texturas, estilos y diseños y lo hace llenando la casa de libros, recuerdos y muebles. Los colores no están definidos por ninguna norma que no sea la de los gustos personales y no es raro encontrarnos un confortable sofá de un estilo determinado, rodeado por sillones de otro completamente opuesto. El estilo countryside no le teme a los excesos, lo que no quiere decir que todo sea bienvenido, pues solo lo será si el resultado nos invita a disfrutar de un ambiente acogedor.

Las claves del estilo countryside

Gran parte de la esencia de este estilo decorativo es que construye casas para vivirlas, alejándose de los resultados de revista donde todo luce perfecto, pero no refleja la personalidad de quienes la habitan, pues podría ser igual para un gran número de personas. Esto queda reflejado en los detalles que conforman estancias como el dormitorio o el salón, pero también lo vemos en las cocinas, en las que los elementos se ordenan pensando en el día a día. Utensilios colocados en lugares de fácil acceso, pero también electrodomésticos de aire antiguo que mantienen la esencia de esas construcciones rurales inglesas en las que este estilo encuentra su inspiración.

Respetar la esencia de la construcción es también importante, sobre todo en los casos en los que encontramos detalles destacables, como las molduras cargadas de personalidad, las paredes de piedra o las vigas de madera del techo que dan forma y personalidad a la propiedad. También es importante encontrar el equilibrio entre los detalles que aportan valor a nuestra casa y aquellos que han quedado obsoletos, pues este estilo mira hacia el pasado, pero no se queda anclado en él, sino que avanza para que la comodidad sea la máxima.

Los detalles también son importantes en los hogares de estilo countryside y sobre todo los encontramos en los pequeños y especiales rincones por los que este estilo apuesta. Por ejemplo, es habitual encontrar en los salones típicos de esta decoración un espacio dedicado a la lectura o a otro tipo de entretenimientos como la costura. Una zona de relax en la que poder desconectar, con elementos clave como un sillón confortable o una pequeña mesita auxiliar con una lámpara que nos permita disfrutar la tarea incluso cuando se hace un poco más tarde.

Los complementos son esenciales a la hora de conseguir los resultados esperados, cojines, cortinas, mantas o alfombras adquieren un lugar destacado, pues nos ayudan a conseguir esa sensación deseada que es la esencia del countryside construyendo diferentes capas sobre las que ir decorando. No importa tanto que todo esté perfectamente coordinado o que los estampados y colores resulten armónicos como que el resultado nos invite a acurrucarnos, a descansar y disfrutar de nuestro hogar.

A esto también contribuyen los espacios de almacenamiento, porque si bien apuesta por el ‘más es más’, lo hace desde el orden. No es raro contar con grandes estanterías en las que colocar los libros y colecciones o muebles con gran capacidad en los que tenerlo todo colocado. El caos no es la base, lo es la mezcla.

Muebles vintage, de aire rústico y esencia provenzal que podemos encontrar en tiendas de antigüedades o segunda mano, encuentran en los hogares countryside su lugar, con espacios exteriores sencillos, una simplicidad que contrasta con los interiores más cargados, en busca de esa paz que proporciona la naturaleza y los espacios al aire libre. Rincones llenos de detalles, de motivos y texturas, que reflejan un hogar que está diseñado para adaptarse a quien lo habita, con un imprescindible toque rústico que respeta la esencia de la propiedad.