La estrategia con la que Alejandra Alonso Rojas revoluciona la moda de NY

Son dos las claves necesarias para triunfar en la moda en la actualidad. La primera, saber adaptarse a las cambiantes necesidades y a las sorpresas. La segunda, no ser esclavo de las tendencias para lograr así trazar un camino y un calendario propios. Alejandra Alonso Rojas cumple ambos requisitos. Tras asentarse en Nueva York, la madrileña decidió volver a España para preguntarse si realmente quería verse envuelta en el frenético ritmo de la industria. Fue entonces cuando decidió seguir formando parte de ella, pero imponiendo sus propias normas y huyendo de las tendencias efímeras.

La diseñadora, una de las finalistas el año pasado de CFDA/Vogue Fashion Fund, ya había presentado sus propuestas para el otoño 2020 en París, y a comienzos de año mostraba sus novedades sobre la pasarela neoyorquina, donde ni Pauline Ducruet, ni Mafalda de Bulgaria se perdieron la presentación. Kim Kardashian y Beyoncé son algunas de las seguidoras de esta madrileña, que cuando el coronavirus puso el mundo en pausa, decidió cancelar sus pedidos para el invierno, organizar unas ventas especiales con las que lograr fondos para su equipo y eliminar las precolecciones. De esta forma, centraría sus esfuerzos en presentar sus diseños principales a los compradores en diciembre y en junio, y a la prensa, en febrero y septiembre.

Alejandra es otra de las diseñadoras que ha querido adaptar el calendario de la moda a las necesidades reales y hará que sus creaciones lleguen a tienda entre mayo y julio y entre septiembre y noviembre, para que así la gente tenga disponibles sus novedades cuando realmente pueda llevarlas. Pero ese no ha sido el único cambio, sino que la diseñadora ha propuesto a las tiendas en las que vende sus diseños, como Saks Fifth Avenue, una estrategia que ha gustado.

Cuando lleguen las rebajas, Alejandra comprará sus diseños para evitar que formen parte del proceso. De esta forma, será ella quien elija qué descuentos imponer a sus prendas y quiénes disfrutarán de ellos, pues pretende que sean sus clientes especiales los que disfruten de las rebajas. Con su estrategia quiere que los consumidores compren menos y valoren más la calidad que las tendencias.

Como explica 'WWD', gracias a su nueva estrategia logrará bajar los precios de sus diseños entre un 30 y un 40% sin perder al hacerlo la calidad de sus diseños ni tener que cambiar su sistema de producción.