Curiosidades de la polémica chaquetilla y el chaleco de Enrique Ponce

Desde el 2 de mayo, Enrique Ponce es trending topic y no es por su relación, separación o divorcio, es por su última faena en los ruedos, no amorosa. El torero es noticia porque el domingo en Madrid, en un festival de Las Ventas lució una chaquetilla y un chaleco que llevaban unos botones polémicos.

Enrique Ponce es un preciosista en lo que a su atuendo en las plazas se refiere. Como en la mayoría de los toreros, la estética y las supersticiones se unen en la elección de las prendas que le van a ayudar a enfrentarse al toro. Los botones que suele elegir el diestro son monedas de todo tipo; tanto es así que ha reconocido en declaraciones a varios medios que ha lucido desde el rostro de Felipe VI hasta el de Alfonso XII. En esta ocasión, las monedas elegidas fueron imitaciones de las antiguas pesetas ilustradas con la efigie de Franco y que, según aseguraba el diestro, tiene hace más de quince años.

Ante el revuelo creado, hemos querido analizar desde el punto de vista técnico los secretos y las virtudes que se esconden tras estas prendas, para ello hemos hablado con Justo Algaba, sastre taurino desde hace más de 54 años. Este experto hace trajes a nivel internacional. Las plazas de Colombia, México, Perú, Francia, Portugal y demás países donde se disfruta de la fiesta han visto sus diseños haciendo el paseíllo. Las figuras del toreo recurren a él, pero reconoce orgulloso que “visto a toreros de todos lo niveles”.

El que lucía Enrique, que Justo nos matiza que no ha realizado él, es un traje corto que se suele utilizar en este tipo de eventos. “El vestuario taurino tiene cuatro columnas entre las que se encuentran los festivales y las corridas de toros. Este tipo de traje se utiliza en tentaderos, festivales o en faenas de campo bravo. Aunque en los festivales se torean el mismo número de toros que en una corrida, son géneros diferentes, de ahí que precisen de una vestimenta especial”.

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La preparación de un look de este tipo conlleva unos veinte días de aguja e hilo. Su precio no siempre es el mismo y, según el experto, “suelen costar una media de unos 1.500 euros, pero siempre teniendo en cuenta la elección de los géneros elegidos pueden variar”. La personalización es la clave de estas prendas y es lo que ha llevado a Ponce a los titulares, pero, tal y como nos cuenta el señor Algaba, “es muy normal personalizar la botonadura, algunos toreros se las hacen de plata en joyería o encuentran botones especiales y piden que se los cosas. Cada uno aporta su personalidad de alguna manera, y suelen ser elecciones muy clásicas. Desde sus escudos a imágenes que les han gustado”.

Los colores que suelen protagonizar estos looks son oscuros para resistir las embestidas de la arena y el polvo. Además del chaleco y la chaquetilla, este vestuario se completa con camisa blanca, botos, una calzona de rayas y un sombrero cordobés, propios de este tipo de faenas. Este tipo de prendas tienen un sello español muy marcado; “de hecho, las fabricamos todas en España, aquí en Las Rozas, en Madrid”. Olé.