Gonzalo Sierra, marido de Elena Furiase, ve truncado su sueño de tener una tienda de motos
El local que tenía en alquiler, situado en la zona norte de Madrid, ya está completamente vacío. Ahora el músico se ofrece para dar clases particulares
Elena Furiase y su marido están de enhorabuena, eso es indiscutible. Cuando se cumplen seis meses del momento en el que después de una larga espera provocada por la pandemia del covid se dieron el ‘sí, quiero’ en una bonita celebración ante toda su familia y amigos, ella se encuentra embarazada de su segundo hijo, motivo más que suficiente para sonreír. Pero no todo son buenas noticias, y es que Gonzalo, que hizo realidad su sueño de tener su propio negocio dedicado a las motos a finales de 2020, ha tenido que cerrar la tienda que un día montó con toda su ilusión.
Vanitatis ha podido comprobar que el local que tenía en alquiler, situado en la zona norte de Madrid, concretamente en Alcobendas, ya está completamente vacío. Ni el propio Gonzalo ni Elena han querido pronunciarse sobre esta situación y desconocemos la razón por la que la tienda ha echado el cierre. Bien podría ser porque ya estén pensando en otro negocio o porque sencillamente es complicado levantar una tienda desde cero, y más con una pandemia mundial por medio. No es el primero ni será el último al que durante estos años se le han truncado los planes.
La tienda se llamaba Moto.Ark y, según su propia descripción, estaba especializada en “venta de ropa de moto y accesorios, así como motos de ocasión y personalizadas, para todos los gustos y de todos los estilos. Moda para mujer y hombre al mejor precio con gran variedad de productos a tu alcance”. Estas palabras podían leerse hasta hace unas semanas en la página web, que ahora mismo ya se encuentra inactiva. Las redes sociales que se dieron de alta para dar a conocer la marca continúan abiertas y el propio Gonzalo sigue teniéndolas enlazadas al perfil de la biografía de su cuenta personal. Pero ninguna de ellas está actualizada.
Tanto en Facebook como en Instagram la última publicación tuvo lugar el 22 de diciembre de 2021 y aunque no anunciaban abiertamente el cierre de la tienda, el mensaje que lanzaban dejaba entrever el final, pues se “adelantaron a las rebajas” probablemente con el fin de dar salida al stock que todavía quedaba en tienda una vez tomada la decisión de cerrar. Han pasado tres meses desde entonces y ahora, incluso en Google, se puede leer ‘cerrado permanentemente’ al lado del nombre del local.
¿Cuál será el nuevo paso de Gonzalo?
De momento lo desconocemos, aunque lo que sí podemos confirmar es que sigue muy ligado a la música. Y es que precisamente conoció a la que ahora es su mujer, Elena Furiase, porque era el bajista de Albha, el grupo que formaba junto a Guillermo Furiase y otros amigos. Ahora Gonzalo, que cuenta con algunos estudios musicales además de su experiencia, ofrece sus servicios como profesor particular de guitarra y lo hace bajo la siguiente descripción: “Soy un joven músico que necesita una fuente de ingresos secundaria, soy paciente y amable, bueno con niños y adultos. Tengo poca formación musical, ya que tan solo he cursado tres años de guitarra clásica y uno de guitarra eléctrica, aun así me siento totalmente capacitado para enseñar a aquellas personas que deseen comenzar su formación en este instrumento y aquellas que deseen avanzar a los siguientes niveles sin llegar a un nivel alto”.
A Elena, sin embargo, no parece faltarle trabajo de momento. Hace no mucho anunciaba el estreno de la película ‘Venus’, que ya tiene rodada; y a juzgar por lo que comparte de su día a día en redes, tiene varios proyectos en el horizonte, además de que no deja de hace deporte y cuidarse. Porque lo ha hecho siempre y porque ahora se está cuidando especialmente por su embarazo. Sin embargo, muy en contra de su voluntad, estos días se ha llevado algún disgusto, pues no le gusta cuando se insinúa que podría tener discrepancias con su prima, Alba Flores, también actriz e hija del fallecido Antonio Flores, por el legado de su abuela. Dice estar ‘harta’ de que se comenten cosas de ese estilo. Y es que la relación de ambas es inmejorable.
Igual que la que tiene con su marido, Gonzalo Sierra, con el que no para de compartir muestras de cariño. En su caso, está claro que el terreno personal queda al margen del profesional y que Elena ha apoyado a su chico en el cierre de la tienda, de la misma manera que casi con toda seguridad lo hará en el siguiente paso laboral que decida dar. Porque si algo es evidente es que están enamorados y pasando por un momento muy dulce como familia.
Elena Furiase y su marido están de enhorabuena, eso es indiscutible. Cuando se cumplen seis meses del momento en el que después de una larga espera provocada por la pandemia del covid se dieron el ‘sí, quiero’ en una bonita celebración ante toda su familia y amigos, ella se encuentra embarazada de su segundo hijo, motivo más que suficiente para sonreír. Pero no todo son buenas noticias, y es que Gonzalo, que hizo realidad su sueño de tener su propio negocio dedicado a las motos a finales de 2020, ha tenido que cerrar la tienda que un día montó con toda su ilusión.