Diego Anido, el actor de prolífica y vanguardista carrera que nunca dejó de actuar

Hoy en día decir que uno lleva 20 años viviendo de su profesión es complicado, pero lo es más si encima te dedicas al mundo de la interpretación. Pues así es como se presenta en el circuito Diego Anido, un hasta ahora -y decimos 'hasta ahora' porque con su trabajo en 'As bestas' se ha dado a conocer en todo el panorama- actor semidesconocido para algunos, aunque con una larga, variadísima y muy prolífica carrera a sus espaldas.

El actor de origen gallego, nominado a Mejor Actor de Reparto en los Goya, nació en Santiago de Compostela en 1976. Un origen que comparte con algunos compañeros de rodaje en 'As bestas', como su hermano en la ficción, Luis Zahera. Debe ser que por eso los compostelanos han tenido esa complicidad en pantalla y, a juzgar por el Instagram de Anido, fuera de ella.

Cuenta Anido que tras unos años de fracaso escolar, decidió empezar con la interpretación en Espazo Aberto, una escuela donde se nutre de una formación multidisciplinar. Fue mientras estudiaba cuando comenzó a hacer sus primeros pinitos sobre el escenario.

Recuerda el actor que su primera actuación fue a los 23 años en un teatro abarrotado. Guarda también alguna anécdota de cuando realizó actuaciones de circo en la sala Nasa. "Fueron momentos de llenarte de seguridad, que te hacen confiar en tu lenguaje", decía en una entrevista de 'La Voz de Galicia'.

Sin duda lo que define a Diego en su profesión es la determinación y valentía a la hora de atreverse con lo diferente, con lo personal... Cuenta el de Santiago que en sus inicios en la interpretación estaba trabajando en el balneario de la familia de su pareja, Raquel, como masajista cuando entre masajes se sentaba entre las camillas y con papel y boli se ponía a crear e inventar.

"Empecé a trabajar solo, a crear mi propio material, algo no tan común. En el 2004, en un impasse durante el que fui masajista en el balneario de Pambre, presenté allí, en un pub cercano, mi primera obra, ya experimental. Luego me fui a Barcelona", detallaba el actor en la citada entrevista.

Es precisamente en Barcelona donde el actor termina de entremezclar todas sus facetas y vertientes vanguardistas, separándose de los terrenos más clásicos y dogmáticos del teatro. En la ciudad condal, Anido empieza a experimentar con la performance y la danza y llega la inspiración para crear una de sus obras más relevantes: 'El alemán'.

A partir de la fecha de caducidad de un yogur, el actor comenzó a teorizar sobre algunas cuestiones relacionadas con la muerte, creando esta obra que, después de más de una década, ha vuelto a ser recuperada.

"Lo que más me escandalizaba era cómo nos remitimos a una fecha puesta por una empresa que fomenta el consumo, mientras eliminamos nuestras capacidades olfativas y gustativas que nos permiten comprobar si un alimento está en buen estado. La fecha de caducidad del yogur parece una broma, pero estamos hablando de algo muy serio: estamos delegando decisiones importantísimas a terceros, que a día de hoy son algoritmos, aunque cuando escribí el texto en 2004 todavía no se hablaba de ello", puntualiza para 'Público'.

Unas creaciones conocidas dentro del circuito de teatro vanguardista y que al actor le permiten mostrarse lleno de orgullo a la hora de narrar cómo ha sido capaz, incluso en época de grandes crisis para el arte y la cultura, de vivir de aquello que siempre le ha gustado: exponerse y entregarse al público a partes iguales.

"Desde que empecé, hace 20 años, no recuerdo un período mayor a mes y medio sin actuar. En 18 años hice cinco espectáculos unipersonales, de buena factura. Aun así, me asombra que, una década después, las piezas tengan resonancia, que sean recordadas".

No obstante, el destino tenía preparado para Diego Anido un regalo en forma de sustitución 'de última hora'. En un principio Anido no iba a realizar el papel en 'As bestas', la película que le ha valido su nominación a los Premios Feroz y a los Goya, pero en menos de 48 horas el actor se metió en la piel de su nuevo personaje.

"Lo mejor fue ver que encajaba, como si trabajase con ellos desde el inicio. Me sentí acogido. Conmigo hubo una sensación global de sorpresa, extraña para mí, pero halagadora", recordaba el protagonista.

Ante las críticas sufridas por parte de un sector de la sociedad sobre que el filme que le ha valido estas nominaciones mostrara una Galicia demasiado oscura o primitiva, Diego lo tiene claro y en unas declaraciones al diario 'Público' afirmaba: "La gente no deja de ir a Texas porque hayan hecho un remake de 'La matanza de Texas', pese a que lo que suceda en ese filme sea terrible. Vale, es ficción, pero ¿crees que la peña de esos pueblos estará contenta? '¡Macho, otra vez el Leatherface con la motosierra!'. Claro que 'As bestas' puede afectar a algunas personas, aunque es un mal menor en comparación con un proyecto de tal envergadura. Nadie va a dejar de venir a Galicia por una película así, ni a tener otra visión de mi tierra".

Sea como fuere, el equipo de 'As bestas', con Sorogoyen a la cabeza, espera con impaciencia que poco a poco se vayan resolviendo sus nominaciones de los Premios Feroz y también de los Goya, que este año se celebrará el 11 de febrero de Sevilla.

Solo quedan unos minutos para saber si Diego Anido se alzará con el galardón de los Feroz esta noche.