Muere Antonio Pardal, el abuelo empresario de la actriz Adriana Ugarte

Adriana Ugarte está viviendo un difícil momento con el fallecimiento de su abuelo materno, el empresario andaluz y famoso constructor Antonio Pardal. El abuelo de la intérprete falleció el 19 de agosto a los 85 años en Alcalá de Guadaíra y el domingo fue incinerado en el tanatorio de El Recuerdo, en Dos Hermanas. Una pérdida que, aunque con diferente parentesco pero igual dolor, Miguel Ángel Muñoz también tenía que hacer frente al confirmarse el fallecimiento de su querida 'tata'.

Nacido en Écija en 1938, se convirtió en uno de los empresarios y constructores más importantes de Andalucía, creando un próspero negocio desde cero. Según afirmó el propio Pardal en algunas entrevistas, y como aparece recogido en el medio 'Diario de Sevilla', "sus comienzos fueron en la frutería de un tío en Madrid, después vendió sanitarios y al final creó un holding con 500 trabajadores que llegó a facturar 700 millones de euros". "También presumía de haber levantado 4.000 naves industriales", tal y como señalan desde el medio anteriormente citado.

Sin embargo, la polémica marcó en buena medida la vida laboral de Pardal. Testigo clave en el caso Mercasevilla, terminó declarando en el juicio relativo a la venta de suelos de este caso. Según informa el medio de la capital hispalense, "allí contó que los exdirectivos del Mercado, Fernando Mellet y Daniel Ponce, así como el entonces gerente de Urbanismo, Manuel Marchena, le ofrecieron diversas concesiones y adjudicaciones a cambio de que cediera los derechos sobre varias parcelas".

Asimismo, el abuelo materno de Adriana Ugarte aseguró que todas esas personas le informaron de que estaban “respaldadas” por Alfredo Sánchez Monteseirín y, según recogieron diversos medios en aquel momento, Pardal contó que el alcalde llegó a decirle en una ocasión que no saldría “perjudicado” por su salida del Mercado Central. Aquel juicio terminó con la absolución de todos los acusados.

No obstante, fue con su implicación en la trama Púnica, relacionada con Francisco Granados, con lo que el nombre del empresario volvió a saltar a la palestra. Según un artículo publicado en Vanitatis en 2016, el abuelo de la chica Almodóvar habría agasajado a Francisco Granados y sus socios con diversos regalos de valor y, según apuntó Francisco Javier de Frías García (un exguardia civil que trabajó para Pardal), el empresario andaluz habría proporcionado el servicio de varias prostitutas al alcalde imputado en la Púnica.

Con su fallecimiento, según manifiestan desde el diario andaluz anteriormente mencionado, Pardal deja viuda, hijos, hermana, nietos y bisnietos. Una de estas familiares es Yolanda Pardal. La hija del empoderado empresario y madre de Adriana Ugarte es letrada, además de escritora propietaria de una tienda de antigüedades en la madrileña calle Belén.

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Patricia Martin

Tanto ella como su marido, vecinos del barrio de Salamanca (Madrid), respetaron la decisión de su hija de dedicarse a la interpretación, aunque motivados por el deseo de que su hija tuviera estudios superiores, le pidieron a Adriana que no dejara su labor académica. Así, la exitosa y galardonada actriz compaginó la interpretación con el estudio de dos carreras universitarias: Filosofía y Filología Inglesa.