Brindis y bulerías por la memoria de María Jiménez en La Rioja

Una convocatoria diferente a los eventos habituales. Esta vez los invitados de Cristina Forner, presidenta de las bodegas Marqués de Cáceres, pudieron disfrutar y participar en todo el proceso que supone la elaboración del vino. Y se hizo como antiguamente, con la recogida de la uva directamente de la cepa, el traslado en cajones y el pisado para obtener el mosto. Se mantuvo también la puesta en escena con un almuerzo a base de productos del campo asados en parrilla y con lumbre de sarmiento, todo supervisado por David Losantos y Raúl Gil, directivos de la firma.

De acompañamiento, las bulerías, soleás, fandangos y hasta sevillanas de Nano de Jerez, con las que se animaron a bailar Raquel Revuelta y Lucía Hoyos, que agotaron los aplausos del resto de 'vendimiadores' ocasionales.

El fin de semana campero sirvió para homenajear a dos mujeres que lo habían dado todo en su profesiones respectivas y en la vida. Teresa Campos como comunicadora y María Jimenez como una artista que llegó a lo más alto a pesar de lo dura que fue una infancia y juventud de superviviente.

Raquel Revuelta y el periodista Mario Niebla recordaban con mucho cariño y anécdotas a la María íntima y cañera. Igual que el cantaor Nano de Jerez, que contaba sus vivencias cuando acompañaba a Lola Flores o compartía Feria de Sevilla con María.

Unos brindis dedicados a ellas y con los viñedos como paisaje imponente de fondo. Y lo curioso es que la historia de los inicios de la bodega tenía también ese trasfondo de lucha y tesón que tuvieron las dos grandes que fallecieron en la misma semana, como contaba Cristina Forner a Vanitatis. Un duro exilio al finalizar la Guerra Civil dejando todo en España. Un vuelta a empezar con un pequeño negocio y viñedos en el sur de Francia y una idea recurrente de poder volver: "El sueño de mi padre era regresar a su país y fue lo que hizo. Era un hombre con una personalidad muy fuerte y de pocas palabras. Y aquí estamos. Mis abuelos nunca volvieron. Murieron muy jóvenes".

Y así lo explicaba la presidenta de Marqués de Cáceres mostrando orgullosa su tierra de Ceniceros a orillas del Ebro. Nació en el Valle del Loira, creció entre viñas y estudió Dirección de Empresa y Marketing en París. Montó su propia inmobiliaria que, con el tiempo, se convirtió en una de las mejores.

Tuvo a su hija y cuando todo estaba en orden en Francia, su padre le dijo: “Vente a la bodega”. Y fue lo que hizo. Dejó su negocio y se instaló en Logroño para aprender los secretos del vino de los que más sabían como fue Émile Peynaud, considerado el gurú de la enología. Su padre siempre estuvo agradecido al sacrificio que por amor hizo su hija. Sabía de sus conocimientos y estrategias en marketing y pidió a Cristina que se encargara del mercado exterior y la exportación. Desarrolló un proyecto de negocio que fue un éxito. Reconoce que la bodega se montó en 1974 por amor, convicción y esfuerzo. Heredó esas cualidades que ahora forman parte del éxito de la empresa por la que han pasado personajes como su amigo Paco Rabanne, Antonio Banderas y muchos otros nacionales e internacionales.

El fin de semana de la vendimia sirvió también para conocer los proyectos de varios de los invitados. El modisto Alberto Fábregas cambió su línea femenina por la sastrería a través de Abundantes Company. Una firma de trajes a medida que han llevado Pedro Sánchez y actores con premios Goya. Raquel Revuelta prepara su próxima convocatoria de moda flamenca (SIMOF), que tendrá también una vertiente en Madrid con una presentación a lo grande.

La sevillana recuerda con cariño a Teresa Campos: "Cuando salí elegida Miss España no sabía muy bien lo que iba a hacer con mi vida. Estaba en casa y llaman por teléfono. Me dicen: 'Que te llama Teresa Campos', y no me lo podía creer. Pensaba que era una broma. Era la secretaria, Sonsoles, que a continuación me la pasó. Yo estaba temblando de los nervios. Primero me felicitó y después me dijo que le gustaría hacerme una prueba para su programa. A partir de ahí se creó una relación muy bonita. Aprendí mucho de ella y la recordaré siempre. El brindis de hoy va por ella".

Fiona Ferrer también tiene un proyecto personal importante a través de su marca FFL, con una apuesta novedosa en el mundo de la moda y los complementos.