Caritina Goyanes será velada en Madrid: últimos datos sobre su despedida
La familia y los amigos de la querida chef viajan en estos momentos hacia la capital, donde los restos de Caritina permanecerán en el tanatorio de Tres Cantos
Han pasado 24 horas desde que se produjera el triste fallecimiento de Caritina Goyanes y la familia y los amigos de la empresaria siguen intentando sacudirse esa sensación de incredulidad que marca la primera fase del duelo. Nadie estaba preparado para despedirse prematuramente de una mujer a la que todos sus allegados definen como llena de energía y generosidad. Mucho menos una madre que, como Cary Lapique, apenas ha tenido veinte días para tomar aire desde que falleciera también su marido, Carlos Goyanes.
Según ha podido saber Vanitatis, tras el funeral que ha tenido lugar en la mañana de este martes en Marbella, la familia ha tomado la decisión de trasladar los restos mortales de Caritina a Madrid. Será en la capital, el lugar donde la familia reside y tiene la mayor parte de sus amigos, donde se llevará a cabo la última despedida. En estos momentos todos ellos están viajando en coche o en AVE en dirección al tanatorio de La Paz-Tres Cantos, donde sus allegados podrán velar a Caritina hasta el momento del entierro. Habrá una misa a las dos de la tarde del miércoles 28 en el tanatorio madrileño para que sus amigos y familiares puedan despedirse de ella.
Tras el velatorio, los restos mortales de la hija mayor de Cary Lapique (que no será incinerada) recibirán sepultura en el cementerio de San Isidro en la más estricta intimidad. Es allí donde la familia Lapique tiene un espacio, y donde descansarán también las cenizas de Carlos Goyanes, que permanecían en la casa de Marbella. Los amigos de Cary Lapique temen ese regreso de la viuda de Goyanes a la capital. "Cary y Carlos vivían en el mismo edificio que Caritina en Puerta de Hierro. Va a ser terrible esa vuelta", auguran con preocupación.
El estado de ánimo de Cary preocupa por estos dos terribles golpes que ha sufrido en tan poco tiempo. Lapique se marchó a Palma unos días con su hermana Miriam "porque no podía ni abrir los armarios donde estaban las cosas de Carlos". Durante el funeral en Marbella se ha visto la imagen de una mujer destruida a la que solo la fe y el tiempo podrán ayudar.
Han pasado 24 horas desde que se produjera el triste fallecimiento de Caritina Goyanes y la familia y los amigos de la empresaria siguen intentando sacudirse esa sensación de incredulidad que marca la primera fase del duelo. Nadie estaba preparado para despedirse prematuramente de una mujer a la que todos sus allegados definen como llena de energía y generosidad. Mucho menos una madre que, como Cary Lapique, apenas ha tenido veinte días para tomar aire desde que falleciera también su marido, Carlos Goyanes.