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David Bisbal y David Bustamante: hombre rico, pobre hombre
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Los triunfitos, tan cerca, tan lejos

David Bisbal y David Bustamante: hombre rico, pobre hombre

Los caminos de los dos han ido parejos, pero desiguales: uno atraviesa momentos muy dulces tras su boda, el otro pasa por un infierno. Pero no es lo único que les diferencia

Foto: David Bustamante y David Bisbal. (Gtres)
David Bustamante y David Bisbal. (Gtres)
Foto: Bustamante y Bisbal en una imagen de archivo. (Gtres)

Ahora que Bustamante atraviesa por un momento complicado en la vida, David Bisbal, en el polo opuesto del universo emocional, triunfando y recién casado, ha querido tenderle la mano para recordarle aquello que se cantaban Buzz Lightyear y el vaquero Woody: 'Hay un amigo en mí'. Aunque la rumorología siempre ha insinuado que entre ellos ha existido más rivalidad que amistad profunda, lo cierto es que el rizos almeriense se ha puesto en contacto con su compañero de academia para recordarle que siempre puede contar con él: “He mandado mi apoyo a David, porque está clarísimo que estamos para, por lo menos, mandar nuestro apoyo. Si está en una situación difícil, espero que se mejore cuanto antes”, aseguraba el cantante al ser nombrado embajador de Unicef España esta semana. “Estamos, para, por lo menos...”, bonito trabalenguas para no decir nada.

Este gesto de 'acercamiento' nos ha abierto el gusanillo de repasar la vida de ambos para cerciorarnos de algo que ya nos barruntábamos: que siempre han estado más separados que unidos, parecidos pero diferentes, iguales pero distintos, mellizos pero no gemelos.

Del campo a la ciudad

La primera de las diferencias la marca la cuna: David Bisbal es andaluz de capital, de Almería para ser exactos, y es la seña de identidad que enarbola como bandera. También Busta ha ejercido de estandarte de su propia causa y ha colocado en el mapa a su pueblo, San Vicente de la Barquera, bonita localidad cántabra. Busta, como todo el mundo sabe, fue albañil antes que fraile, mientras que Bisbi ya hacía sus pinitos como cantante en la Orquesta Expresiones.


Yo segun, tu tercer

Corría el año 2001 y parecía que en España no existía otra cosa que 'Operación Triunfo', un talent show de los que proliferan ahora, que convirtió en semidioses a todos los que participaron en él (incluido su presentador, Carlos Lozano). Era entrar en la casa y automáticamente convertirse en una estrella. Todos los triunfitos que pasaron por aquel 'encierro' artístico han explicado a posteriori el trauma que supuso entrar como completos desconocidos y salir convertidos en una Rosa de España. El boom fue brutal y todo aquel grupo inició, con mayor o menor recorrido, toda una carrera artística. Sin embargo, en el pódium figuran Rosa, medalla de oro; Bisbal, de plata, y Busta, de bronce. La distancia entre peldaños ya marcaba que los caminos de los tres irían por distintas direcciones.

Ricitos de oro vs. pelorrecio

David Bisbal ha sido el máximo exponente del rizo perfecto (no es de extrañar que fuera imagen del gel fijador Giorgio) y ha puesto el caracolillo en el lugar que le corresponde. Una tarea que ya compartiera con su profesora de academia, la cantante Nina. El de David ha sido un look capilar marca de la casa, que ha ido evolucionando y tomando conciencia de sí mismo: empezó como matojo de pelo, fue creciendo y creciendo y creciendo hasta convertirse en melena, en plan 'Mujercitas'. Por suerte Bisbi ha conseguido domar su cabellera, cortarse el pelo y lucir un diseño pilífero más maduro y relajado. Por su parte, Bustamante ha sido más de pelo liso, domable y abundante. Su imagen de chaval de barrio también se ha traducido en su look capilar, pero con una ventaja respecto a su colega: Busta ha sido imagen del calendario Salerm Cosmetics; la multinacional de cosmética le eligió como cuerpazo de los carteles que alegraron los salones de peluquería de media península en 2013.

El estilo que les une

El estilo hortera, para ser exactos. Aquellos estilismos que lucían en sus primeros pasos en 'OT' han dejado huella: las camisas abiertas, los pantalones excesivamente acampanados, 'esas' chaquetas de cuero (¿por qué?). En eso los dos David han estado muy unidos, cada uno a su manera y en su tallaje. Mientras el de Almería se ha mantenido en su tipín talla 38 (le calculamos), Busta ha oscilado talla arriba, talla abajo según su momento vital. A raíz de su relación con Paula Echevarría pasó por un taller de chapa y pintura del que resultó un abdomen tableta de chocolate y el look un poco más actual, pero a medida que la pareja ha ido haciendo aguas, también la figura y la imagen de Busta ha ido perdiendo poderío. Bisbal, por su parte, sigue dándonos algún que otro susto.


Su carrera profesional

Los estilos de ambos artistas quedaron marcados, desde su salida de la academia, de forma muy diferente: a Bustamante se le señaló el camino de las canciones pop de medio tiempo, temas bailones como 'Abrázame muy fuerte', y baladones, en los que el cántabro lo ha dado todo, del tipo de 'Dos hombres y un destino'. Bisbal, por su parte, se ha coronado como el rey del pop latino con especial querencia por esas florituras vocales que a unos les apasiona y a otros les saca de quicio. Gallitos Bisbi, la marca de la casa.

Amores y amoríos

Foto: Begoña Alonso y Bustamante en un foto montaje realizado en Vanitatis.

Ahora que Bisbal se ha casado por lo extranjis con la que es ya su mujer, Rosanna Zanetti, es momento de refrescar la memoria de un pasado sentimental abultado y accidentado: con Raquel Segovia rompió por teléfono cuando conoció a Chenoa, a la que dejó plantada y enchandalada cuando conoció a Elena Tablada, presidenta del club de fans del cantante, con la que estuvo casado 7 años y tuvo una hija. Después llegaron otros amores, como los de Raquel Jiménez y la China Suárez, hasta que David ha vuelto a sentar cabeza junto a la venezolana. Por su parte, Busta quemó unas cuantas naves antes de que Paula le dijera 'ven' y él lo dejara todo. A Busta se le conoce una exnovia, Begoña Alonso, con la que vivió un accidentado romance que acabó en los tribunales y que, por aquellas cosas del destino, de vez en cuando vuelve a resurgir. Después de mucho tiempo por México, la vasca ha vuelto a España, aún no se sabe por qué ni para qué.

Tú a Boston y yo a La Coruña

No podemos decir que la carrera de Busta haya sido la de un perdedor, pero sí es verdad que Bisbal dio el sorpasso casi desde el arranque de sus carreras, por más que lo ha intentado el cántabro, el de Almería siempre ha ido por delante. La trayectoria internacional de Bisbal está solo a la altura de otros intérpretes como Alejandro Sanz y Enrique Iglesias. Bisbal ha conquistado América desde Miami y ha compartido micro con Luis Fonsi, Miley Cirus y Rihanna. Busta con Shaila Dúrcal y Pastora Soler... No es lo mismo.

En la intimidad

Foto: David Bisbal en un fotomontaje elaborado por Vanitatis.

La de Busta ha sido una vida escaparate. Desde que conoció a Paula ambos se convirtieron en la pareja de moda. Lo han contado todo, lo han vendido todo, lo han enseñado todo y han rentabilizado su imagen inmaculada para hacer caja. De hecho, la pareja podría haber acordado seguir juntos, a pesar de sus diferencias y de llevar vidas separadas, por una cuestión económica (además de por dar a su hija una vida familiar estable). La pareja ha comercializado su felicidad compartida y han hecho negocio con ella. No obstante, cuando han llegado los momentos críticos, la decisión de mantener un cerrado silencio les ha pasado factura con la prensa y se han situado ellos solitos en el ojo del huracán. Mientras todas las portadas se llenaban con noticias sobre la separación de los Bustavarría, Bisbal se casaba con la venezolana Rosana Zanetti, en una boda tan discreta que nos hemos enterado cuando los contrayentes ya lucen anillo en el dedo índice, por algo habrían hecho firmar a todo el personal municipal del día de autos la preceptiva cláusula de confidencialidad.

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Foto: Bustamante y Bisbal en una imagen de archivo. (Gtres)

Ahora que Bustamante atraviesa por un momento complicado en la vida, David Bisbal, en el polo opuesto del universo emocional, triunfando y recién casado, ha querido tenderle la mano para recordarle aquello que se cantaban Buzz Lightyear y el vaquero Woody: 'Hay un amigo en mí'. Aunque la rumorología siempre ha insinuado que entre ellos ha existido más rivalidad que amistad profunda, lo cierto es que el rizos almeriense se ha puesto en contacto con su compañero de academia para recordarle que siempre puede contar con él: “He mandado mi apoyo a David, porque está clarísimo que estamos para, por lo menos, mandar nuestro apoyo. Si está en una situación difícil, espero que se mejore cuanto antes”, aseguraba el cantante al ser nombrado embajador de Unicef España esta semana. “Estamos, para, por lo menos...”, bonito trabalenguas para no decir nada.

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