Novias años 20: vestidos de boda de aire retro

La industria de la moda vive anclada en el pasado. Si en las pasarelas, la inspiración está en la década de los 70, y en el street style, la fiebre dosmilera sigue expandiéndose entre las expertas, en el sector nupcial, son los locos años 20 y sus vestidos sofisticados y centelleantes, los grandes triunfadores en clave retro de la nueva temporada. En esa exhaustiva búsqueda por encontrar un look de novia diferente al resto, son ya muchas las 'bride to be' que apuestan por esta gloriosa época y muchos más aún los diseños de estilo 'flapper' ocultos en las actuales colecciones de las firmas especializadas.

Las series y películas ambientadas en esa década, ejemplos recientes como 'Downton Abbey' o 'El gran Gatsby', han contribuido a mitificar aquel periodo histórico, y en la práctica, servir como fuente de inspiración. Plumas, flecos, detalles joya y formas ligeras, los años 20 llegan a la moda nupcial con vestidos extravagantes concebidos para deslumbrar. Para muestra, seis.

No es casualidad que Rosa Clará haya bautizado a su última línea de trajes de novia con el nombre de 'Gatsby' aludiendo, precisamente, a la opulenta, brillante y sensual apariencia que caracterizó a esa época. ¿Qué vamos a encontrar? Un total de doce vestidos de novia de talle estrecho, corte sencillo y patrón con caída, que apuestan todo por la singularidad de las aplicaciones más exquisitas. Nuestro preferido es Obara: largo, recto, muy cómodo y confeccionado con un tejido en blanco puro. Destacan, además de los bordados de pedrería, el escote velado, el efecto ablusonado hasta la cintura y la abertura en la espalda.

De fama mundial y gran reconocimiento son los modelos de Temperley London, los más buscados por las novias (más allá de nuestras fronteras) que desean vestirse de época para el día de su boda. Parte de la nueva colección para esta primavera-verano, Eleanor, que así se llama, es delicadeza y feminidad en estado puro. Fabricado con un volátil y etéreo tejido de crepé en un tono blanco roto, es un vestido que presenta el cuello subido, mangas abullonadas rematadas en puños ajustados, silueta de línea princesa que contornea el cuerpo y una falda larga con caída y cola.

De vuelta en la moda nupcial de nuestro país, la catalana Inmaculada García siempre incluye varios modelos de inspiración años 20 en sus desfiles y después, en sus colecciones de venta al público. Sin perder esa esencia 'flapper' y recurriendo a bordados florales, plumas o incrustaciones de cristales, sus vestidos resultan la perfecta combinación entre romanticismo y vintage. Confeccionado en tul y de forma sirena, su traje Lagos es perfecto para novias atrevidas y poco convencionales.

La británica Jenny Packham no se queda atrás. Especialista en detalles joya, es habitual que cada temporada la diseñadora fetiche de Kate Middleton se inspire en los años 20 para dar vida a uno o varios de sus vestidos. Coira es la prueba de lo que te decimos: estructura recta, corte depurado, fit ajustado y mucha, pero que mucha, pedrería dorada a contraste y dibujando geometrías que salpican el traje de arriba a abajo.

La propuesta de Pronovias cambia las líneas perpendiculares de los anteriores diseños, por un vestido voluminoso que, sin embargo, no deja de prestar atención a ese periodo histórico. ¿Sus avales? Tejido base de tul con plumeti, retales de encaje, blondas florales, semitransparencias, mangas abullonadas con puños engomados, escote fantasía y una falda escalonada con cuerpo.

Llegamos al final haciendo un recorrido por el taller de L’Arca Barcelona. Tienen de todo: vestidos prêt-à-porter, trajes antiguos perfectamente restaurados, joyas, velos, tocados, zapatos y cualquier complemento vintage que se te pase por la cabeza para rematar tu atuendo nupcial estilo años 20.

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