"Hoy los novios quieren bodas como las de Instagram", hablamos con las wedding planner de la élite

Analizando todo lo visto y vivido esta temporada en el sector nupcial, 2022 será recordado como uno de los mejores años. Las bodas volvieron a lo grande, sin restricciones, con ganas de celebrar, de festejar el amor y rodearnos de mucha gente. De pequeñas celebraciones íntimas, ni rastro, cuantos más invitados aglutinen los novios, más épico será el enlace. Ahora sí, la labor del wedding planner es indispensable. "Por fin, nuestro trabajo está siendo reconocido y nos hemos convertido en un 'must-have' del sector nupcial", sentencia Patricia Gómez, una de las fundadoras de Weddings With Love.

Su otra mitad (empresarial) es su hermana Lidia. Ellas dos, y cuatro mujeres más, planifican, diseñan, crean y dan vida a las bodas de la élite en España. "Organizamos bodas de lujo experiencial. Nuestros clientes tienen un nivel adquisitivo medio-alto y están dispuestos a hacer una buena inversión para crear esa experiencia que buscan. La gran mayoría consume lujo y conoce cuál es nuestro valor añadido", cuenta Patricia a Vanitatis. De la mano de esta experta, analizamos en qué (buen) estado se encuentra el sector.

"Tras la pandemia hemos aprendido a valorar mucho más las relaciones sociales y las vivencias con las personas más importantes de nuestra vida. Así, las parejas buscan planificar un gran evento y saben disfrutarlo muchísimo. ¿El primer paso? Encontrar a su wedding planner perfecto". Consecuencia directa de ello, a Patricia, Lidia y su equipo de Weddings With Love, no les ha sobrado tiempo en 2022. "Hemos estado desbordadas de trabajo", confiesa.

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Dos arquitectas, una experta en marketing y las hermanas, Lidia, una crack de las finanzas y la planificación, y Patricia, comunicadora y productora de eventos, son las artífices de los enlaces más exclusivos del país. "Nuestras bodas están muy cuidadas y somos muy exigentes para lograr la excelencia. Creamos momentos tan memorables que los invitados se llevan a casa una experiencia 360º: un menú elaborado por un chef con Estrella Michelín, conciertos y shows en directo con artistas internacionales y hasta la creación de un aroma propio".

¿Una celebración así es posible? Sí, se puede, siempre que los novios no tengan límites de presupuesto. ¿Lo bueno? Cero estrés y tranquilidad total. En estos casos, delegar merece la pena. "Estamos al lado de la pareja de principio a fin y para absolutamente todo: pruebas del vestido de novia, degustaciones de menú, cualquier tipo de cita… El día de la boda, es el culmen", detalla Patricia Gómez.

Celebrar el amor entre dos personas y disfrutar de una reducida fiesta con los más íntimos, ya no es suficiente. "Las parejas que nos contratan buscan, la mayoría de las veces, un evento que dure dos o tres días en el que se cuide muchísimo a los invitados y que, constantemente, se les sorprenda". En este punto, la diferenciación, la exclusividad, la personalización y la sostenibilidad son clave para conseguir recrear el enlace de sus sueños. "Intentamos, por encima de todo, dejar un legado positivo en todas nuestras bodas".

La espontaneidad ya no está de moda, ni siquiera es una opción a valorar, por novios o por wedding planners. Ahora las bodas exigen una planificación milimétrica. Antes de desatar esa maquinaria, "Siempre tenemos una entrevista personal para ver si conectamos y, a partir de ahí, distribuimos todo el trabajo en plazos de tiempo hasta que llega la fecha marcada en el calendario. El día de la boda es una conexión en directo, como en un telediario. No podemos equivocarnos. Está pasando y una excelente coordinación es parte del éxito", detalla la experta.

Las redes sociales, y en especial, el escaparate Instagram, han generado nuevos deseos y nuevas aspiraciones. "Los clientes quieren bodas como las que ven en Instagram", esto es una realidad que cada día cobra más fuerza. Vestidos de novia virales, montajes de mesas espectaculares, decoraciones temáticas, enclaves insólitos y todo aquello a lo que el universo digital abre la puerta a los novios. "Son muy visuales e inmediatas. Esto ha permitido ampliar mucho el abanico decorativo y toda la parte estética en eventos", puntualiza Patricia Gómez.

Por todo ello, y el incesante goteo de bodas a lo largo y ancho de 2022, el futuro del sector nupcial en España está garantizado.

El futuro está en la digitalización. "Las invitaciones en papel siempre existirán, pero las parejas quieren tener su invitación digital e incluso una página web para tener una comunicación más eficiente con los invitados en cuanto a los detalles de la boda. En nuestro caso, la máxima es la sostenibilidad: creamos invitaciones con papel plantable, o con materiales provenientes de bosques sostenibles".

En cuanto a las tendencias en el ámbito de la decoración, el minimalismo se impondrá para 2023. "Creemos que se centrará en lo realmente importante. Se decorará menos, pero mejor. Se abogará más por la experiencia y por lo sensorial. Vaticinamos que la aromatización se va a convertir en un servicio indispensable".