José Manuel Felices, doctor: "¿Sabías que el alcohol hace esto a tu cerebro? No bebas alcohol y si consumes hazlo con precaución"
El cerebro también sufre las consecuencias del alcohol, aunque no siempre seamos conscientes. Un estudio médico revela lo que ocurre tras un consumo continuado
El doctor José Manuel Felices, en una imagen de redes sociales. (Linkedin)
El consumo de alcohol está profundamente integrado en numerosos contextos sociales, desde celebraciones hasta encuentros informales. Sin embargo, sus efectos sobre la salud cerebral son menos conocidos y a menudo subestimados. Aunque suele insistirse en los daños hepáticos o cardiovasculares, cada vez más expertos llaman la atención sobre el impacto neurológico del alcohol.
Uno de ellos es el doctor José Manuel Felices, quien ha publicado en su cuenta de Instagram un vídeo en el que muestra dos pruebas de diagnóstico por imagen: una de un cerebro sano y otra correspondiente a una persona con consumo prolongado de alcohol. “Fíjate lo turgente y llenito que está el cerebro normal”, explica. “Toda esa masa gris que ves son tus neuronas”, añade.
En la comparación, el cerebro dañado por el alcohol presenta zonas oscuras visibles. “Ha perdido esa sustancia gris porque ha matado a sus neuronas”, indica Felices. “Todo ese negro es líquido que está rellenando el espacio que antes tenías para pensar, para recordar, para conectar con tus seres queridos”, explica.
Su advertencia es clara: “Si quieres conservar tus recuerdos, si quieres conservar tu vida, consume alcohol con moderación”. En la publicación, insiste en un mensaje directo: “No bebas alcohol y, si consumes, hazlo con precaución”.
El experto explica los efectos del alcohol en nuestro cerebro.(Pexels / Polina)
Esta reflexión se suma a otras voces del ámbito médico que alertan sobre el impacto real del consumo diario, incluso cuando parece leve. La médico de familia Ana Pérez Ballesta recuerda que una sola cerveza al día equivale a más de 240 litros al año, una cifra que invita a replantear ciertos hábitos. “El alcohol y los aditivos de estas bebidas, cuando los tomas todos los días, dañan tu salud directamente”, advierte, especialmente en personas con patologías como hipertensión o diabetes tipo 2.
Según la doctora, sustituir estas bebidas por agua o reducir su frecuencia podría tener un efecto notable en la salud a medio y largo plazo. No se trata de eliminar completamente el disfrute ocasional, sino de tomar conciencia del impacto acumulado que pueden tener pequeñas decisiones repetidas en el tiempo.
Los expertos hablar de la importancia de beber con moderación. (Pexels / Marcos Flores)
Más allá de lo visual o numérico, ambos especialistas coinciden en un mismo punto: la importancia de revisar los hábitos cotidianos desde una mirada preventiva. Reducir el consumo de alcohol no es solo una cuestión de moderación, sino una inversión directa en salud neurológica y bienestar general.
Y si no sabes por dónde empezar o necesitas apoyo para hacer cambios sostenibles, contar con la ayuda de un profesional de la salud puede ser clave para orientar el proceso y mejorar la calidad de vida a largo plazo.
El consumo de alcohol está profundamente integrado en numerosos contextos sociales, desde celebraciones hasta encuentros informales. Sin embargo, sus efectos sobre la salud cerebral son menos conocidos y a menudo subestimados. Aunque suele insistirse en los daños hepáticos o cardiovasculares, cada vez más expertos llaman la atención sobre el impacto neurológico del alcohol.