Etxeberria, el gran ausente de la pasarela MBFW

Roberto Etxeberria es uno de los grandes nombres de la moda masculina española; los premios acumulados y las buenas críticas recibidas estos últimos años, así lo certifican. Aún así, parece que los organizadores de la Mercedes Benz Fashion Week no quieren que desfile -de momento- junto al resto de compañeros de profesión. Por ello, en esta edición, el creador vasco tendrá que presentar su última colección “Piel del sur” en el OFF de la pasarela madrileña, es decir, dentro del calendario, pero fuera del recinto de IFEMA; lejos de los críticos, los famosos y sobre todo, la prensa.

Su aspecto no deja lugar a dudas: Roberto Etxeberria vive por y para la moda. Nos recibe vestido con unas bermudas a cuadros, botas altas, una chaqueta blanca a rayas rojas y unas gafas a la última; un look arriesgado donde los haya, que solo él sabe llevar.

Tras ganar dos premios L´Oreal a la mejor colección del EGO gracias a “La piel que habito” y “Jour de Fête”, el creador de Éibar debería subir por fin a la pasarela de los diseñadores más importantes de España, la MBFW, un escaparate al que solo unos pocos privilegiados tienen acceso, tras ser elegidos por un jurado, del que todavía, a día de hoy, poco se sabe: ni su composición, ni sus criterios de selección.

“Este año, yo me lo guiso y yo me lo como. Al hacer un OFF, a mi Cibeles no me ayuda para nada. Estas en el calendario, pero luego no te hacen ni caso. Yo hice mi solicitud para desfilar en ella y parece ser que todavía no es el momento. Hacer un OFF es de puta madre. Es volverte loco y montarte tu desfile. En IFEMA está todo hecho: tienes backstage, el casting de modelos, peluquería, maquillaje, etc. Yo me lo tengo que montar todo, pero eso también te da más libertad para hacer lo que me de la gana. En Cibeles te tienes que adaptar. Ahora, si quiero hacer una pasarela diferente, lo hago, porque lo decido yo”, explica el creador. 

Por su parte y respaldando la postura de Roberto, el sociólogo y experto en moda Pedro Mansilla califica de sorprendente este caso. "El hecho de desfilar en Cibeles es un chollo. Por eso, el criterio de selección debería ser impecable para que no haya la más mínima sospecha. Al ser dinero público debería ser un ejercicio de transparencia y rigor. Nadie tiene que dudar de que es así, pero de vez en cuando saltan casos que te hacen pensar que sí lo es”, explica este.

Pese a la negativa de los organizadores, Roberto lo tiene claro: “Donde me quieran ahí voy a estar. La moda no solo pasa por España, la moda pasa  por todo el mundo. No me cierro a nada”. Y es que, resulta extraño que este joven creador, que destaca por ser uno de los pocos españoles en hacer solo hombre y que ha conseguidos grandes críticas, tanto aquí como en el extranjero, no pueda compartir escenario con nombres como los de David Delfín o Carlos Díez.

Como bien explica Pedro Mansilla: "Cuando alguien que ha sido el mejor en dos ediciones del EGO, la respuesta de Cibeles es búsquese la vida. Me parece algo escandaloso. Afortunadamente, tiene un socio que le respalda financieramente. El OFF es en cierto modo un fuera de y contiene una sanción implícita. Es como: no tenemos hueco para usted aquí dentro”. 

Una vida a contracorriente

Pero si por una cosa se caracteriza Roberto, es por su espíritu luchador, que le ha llevado a convertirse en el gran diseñador que es hoy. Tras dejar los estudios a los 17 años y trabajar de fontanero y en una fundición, a los 28 años decidió reconducir su vida, sacarse la selectividad e ir a estudiar moda a Barcelona. Su apuesta fue arriesgada, pero al final, resultó ganadora. 

Y es que, Roberto parece haber acertado en las decisiones importantes que ha tomado desde entonces. Tras montar su firma, creyó que lo mejor que podía hacer era dedicarse a la moda masculina, una elección que le ha catapultado a la fama. “Fue circunstancial .Trabajé varios años con Sergei Povaguin, donde hacíamos mujer. Al irme, no quería que la gente comparara mi trabajo con el suyo. No quería tener que medirme. Decidí hacer hombre, para desmarcarme un poco de todo. Y bueno, creo que ha sido la mejor elección que he tomado. En hombre hay un campo por explotar, en mujer ya está todo visto e inventado”.

Un homenaje del Norte al Sur 

Cuando se le pregunta sobre su última colección, “La piel del sur” Roberto muestra su cara más segura, convencido de haber hecho bien los deberes. 

Los diseños de Etxeberria han mantenido siempre una línea que juega con las prendas. “Si la parte de arriba es muy femenina, la parte de abajo tiene que ser más masculina. Es buscar el equilibrio para que no termine siendo una nenaza”, explica el creador. 

En esta ocasión, inspirado por un libro del fotógrafo vasco José Ortiz Echague donde retrataba las vestimentas típicas españolas en los años 30, Roberto ha querido representar los diferentes tipos de hombre andaluz: desde el campesino, el hombre que utiliza al caballo para trabajar, los pescadores de la Almadraba, hasta el señorito andaluz. “Ha sido un trabajo bastante bonito; no voy a dar más pistas”, termina Roberto.