Esperanza Fernández-Modenes, la cuidadora de la belleza de los famosos

Isabel Preysler, Ana Belén, Carmen Posadas, Alicia y Esther Koplowit, Aitana Sánchez Gijón, Vicki Martín Berrocal, Cayetana Guillen Cuervo, Maria Teresa Fernández de la Vega, Elsa Pataki, Marta Sánchez, la Reina Letizia, doña Sofía, don Juan Carlos y las infantas, Miguel Blesa, Ramoncín y Coronado… Ellos son algunos de los personajes públicos que saben lo importante que resulta mantener buen aspecto físico y saludable. De ahí que se sometan a tratamientos de rejuvenecimiento y terapias de belleza y estética, como explica la especialista Esperanza Fernández-Modenes, que tuvo una idea que ya funcionaba en Nueva York desde hace tiempo. Esa fue la de convertir su centro de belleza y medicina estética de la calle Orfila de Madrid en un lugar diferente, donde además de cuidar el físico, hubiera también una alternativa cultural.

Eligió una galería de arte que remodeló por completo y en la cual las últimas novedades estéticas en tratamientos y aparataje conviven con exposiciones itinerantes de importantes aristas españoles e internacionales en este lugar. Una mezcla muy inteligente donde un inicial comprador de arte acaba siendo un cliente fijo de Orfila. “Era un proyecto que siempre tuve en mente y por fin lo llevé a cabo. Y la verdad, con mucho éxito y además creo que es muy gratificante porque me siento un poco mecenas”, explica Esperanza, una profesional dedicada al mundo de la estética y el cuidado físico desde hace años, un mundo en el que las ofertas en esta materia abarcan un amplio abanico. Desde los masajes faciales a mano con una técnicas milenarias chinas, japonesas, balinesas y suecas hasta los tratamientos de plasma ricos en plaquetas y vitaminas, que realiza el doctor Eduardo Moreno, pasando por terapias fotobiológicas (LEDS), peelings alternativos de cuerpo, envolturas con sal del Himalaya, liftings sin cirugía, oxigenación, tratamientos revitalizadores con las últimas novedades que hay en el mercado y que se presentan en los congresos nacionales e internacionales.

“Es muy importante estar al día. Yo me informo constantemente porque el área de la belleza y la medicina estética es uno de los campos profesionales donde se producen más novedades”. Uno de los tratamientos especiales es el magistral kobido, un masaje japonés reactivo en el que se toca toda la musculatura para reposicionarla. Un masaje intenso digitopresión, drenaje linfático… el resultado es fantástico y duradero. “Este es uno de los preferidos de muchas mujeres”.

"No cambiar radicalmente la fisonomía"

Para Esperanza Fernández-Modenes es muy importante la normalidad: “no concibo tratamientos estéticos exagerados que cambian radicalmente la fisonomía y esas obsesiones que hacen que un día quiereas un poco de bótox, a la semana siguiente un relleno, al otro vuelta al bótox... creando verdaderas adiciones. Me niego. Creo que lo fundamental es tener un buen aspecto e incluso, si me apuras, que la gente que te ve diga “pero qué bien estas, qué feliz se te ve”. Para mi es el verdadero éxito. Y puedo asegurar que aquí en Orfila lo conseguimos.” La clientela sigue siendo mayoritariamente femenina “aunque cada vez hay más hombres. Al principio vienen con sus mujeres y remolones y después ya solos. Y tenemos una clientela de gente de treinta y tantos absolutamente conscientes de lo importante que es la prevención”.

Cuenta que se ha puesto de moda regalar belleza. “Amigos que en vez de comprar algo que nunca sabes si va a gustar, eligen uno de nuestros tratamientos estrella y lo regalan. Es un gusto ver lo contentos que se quedan al salir. Y lo bueno es que después repiten”. Quizá uno de los éxitos de Esperanza sea precisamente ese equilibrio de una oferta profesional ajustada realizada por especialistas y doctores diplomados en medicina estética: “Hubo un tiempo en el que se abusó y cualquiera ponía vitaminas o inyectaba botox. Se hicieron muchos desastres. La crisis sirvió para limpiar el sector. La gente tienen que saber que todos los productos que se inyectan tienen que reabsorberse ”.

El primer paso siempre es el mismo: “Preparamos la piel,ya sea para tratamientos faciales o de cuerpo. En el caso del rostro,después ya viene la segunda parte con el doctor Moreno que aconseja y es quien se encarga de los procedimientos de medicina estética. Uno de los que mejor resultados dan son los tratamientos ricos en plasma. Es espectacular porque además no introduce ningún elemento extraño. Muy beneficioso para jóvenes con acné y sobre la piel envejecida porque restaura la vitalidad cutánea, aumenta su grosor y recupera la consistencia elástica”, explica Esperanza, que insiste en lo importante del criterio y en lo fundamental de preparar la piel para el verano. “Recomendamos unos peeling corporales con aceite de germen de arroz y sales del Himalaya, que hidratan la piel de una manera espectacular y duradera”.