Kiko Rivera pide más de 400.000 euros por la exclusiva con las fotos de su hijo

Acuerdos y desacuerdos con la clínica, una abuela que llora desde los tribunales y un niño oculto, presumiblemente, con el propósito de ‘hacer caja’. El nacimiento del hijo de Kiko Rivera y Jessica Bueno ha dado de sí lo suficiente como para llenar páginas y páginas. Sin embargo, quedaban por conocerse los términos de la exclusiva en la que se podrá poner cara, por fin, al nieto de Isabel Pantoja, llamado Francisco. Según ha podido saber Vanitatis, Kiko Rivera y Jessica Bueno no han llegado, por el momento, a un acuerdo con la publicación encargada de realizar la exclusiva a pesar de que la cifra que les ofrecen es bastante considerable.

Al parecer, la revista ¡Hola! le habría ofrecido al hijo de Isabel Pantoja 400.000 euros por la exclusiva de las fotos de su primer hijo y al joven no le ha parecido bien la propuesta. El viernes por la tarde la pareja se dirigía a Cantora, donde se encontrarían con Isabel Pantoja y los padres de Jessica Bueno. Tamaña reunión solo podía obedecer al propósito de realizar las fotografías para la exclusiva que debería publicarse este próximo miércoles. Sin embargo, el mismo viernes Kiko Rivera rompió de manera unilateral el trato con la revista ¡Hola! porque no estaría de acuerdo con la cifra de 400.000 euros que le ofrecían. A pesar de todo, en estos momentos se puede estar negociando un reportaje que no se da por zanjado y cuyo precio final hará que la balanza se incline a favor de la publicación o de Kiko Rivera.

Si la exclusiva se paga tan cara parece ser que es más por la presencia de Isabel Pantoja que de la pareja en las fotografías. De hecho, y como informaron en su momento diversas fuentes, fue la tonadillera la encargada de ofrecer un 'paquete' con las fotografías de la boda de su hijo y el primer hijo que tuviese por un precio de 700.000 euros. El acuerdo nunca se llevó a cabo porque Jessica Bueno sufrió un aborto. Pantoja podría estar también detrás de esta exclusiva que, además, ofrecería una imagen amable de la cantante, alejada de la mujer doliente que hemos visto en los tribunales durante las últimas semanas.

Este no es el primer desacuerdo económico al que se enfrenta Kiko Rivera desde que naciese su pequeño Francisco. Tras salir el viernes de la clínica Sagrado Corazón de Sevilla tapando el rostro del bebé para no ‘reventar’ una posible exclusiva, la póliza de seguros del joven le dio un disgusto. Según pudo saber Vanitatis, a Kiko Rivera le comunicaron en el hospital que debía pagar la factura y este montó en cólera. La razón residía en que la compañía privada no quería correr con los gastos de quirófano, anestesia y habitación porque una cláusula del contrato de la pareja exigía estar dado de alta en la compañía seis meses antes del comienzo del embarazo, algo que Kiko Rivera y Jessica Bueno incumplieron.

Finalmente, todo se acabó resolviendo para evitar escándalos gracias a los 3.000 euros que Kiko pagó al seguro médico para arreglarlo todo. La suite en la que se había alojado Jessica Bueno durante tres noches tenía salón y terraza y era la más amplia de todo el hospital. Se dice que por ella deberían haber pagado unos 6.000 euros.

La estancia de la joven en la clínica para dar a luz tampoco se libra de provocar un rico anecdotario para el personal que trabaja allí. Las  enfermeras que atendieron a la mamá primeriza tuvieron que firmar un documento para no filtrar ninguna información a la prensa bajo amenaza de despido.

El próximo miércoles se desvelará si hay exclusiva o no para conocer de forma oficial al nieto de Isabel Pantoja. Lo único claro, por el momento, es que Kiko Rivera y la publicación no han llegado a un acuerdo a pesar de los 400.000 euros ofrecidos.