Julio Iglesias, ausente en el bautizo de su nieta

La familia Iglesias-Preysler ha vuelto a reunirse. Hecho que cada vez es más difícil de ver y que se consigue, de nuevo, gracias a la inestimable ayuda de su revista de cabecera, ¡Hola!, que vuelve a estar presente en sus celebraciones más íntimas. En esta ocasión, Sofía, segunda hija de Chábeli Iglesias y Cristian Altaba, era la protagonista del día al celebrar su Bautismo un año y medio después de nacer. Pese a que fuese su día, la atención se desvía inevitablemente a las grandes ausencias que se aprecian en el amplio reportaje realizado para la ocasión en la iglesia de Santa Marta de Miami.

Ni el patriarca del clan, Julio Iglesias, ni su hijo Enrique –padrino de la recién bautizada– estuvieron presentes en este importante acontecimiento familiar. Como excusa, ambos han aducido a sus compromisos profesionales como motivo principal para perderse el bautizo de la pequeña Sofía. “Mi hermano Enrique estaba fuera de Miami trabajando. Le hubiera encantado, pero su novia, Anna, acudió en representación. Me ha dado pena que no estuviera, pero viene continuamente a casa a verla”, reconoce Chábeli. Por su parte, asegura que su padre “estaba en España. Me hubiera encantado que viniera, pero le tocaban los conciertos”, concretamente en el Starlite Festival de Marbella.

Eso sí, no se hace mención a los problemas que Julio Iglesias tuvo a principios del año pasado con su primogénita, los cuales podrían hoy continuar coleando y ser uno de los motivos por los que ha decidido no acudir a la cita. Como ya publicó Vanitatis en su momento, el distanciamiento entre padre e hija surgió por diferencias económicas. El cantante quiso poner punto y final a la asignación que le ofrecía mensualmente a Chábeli y esta no encajó bien que le quitara la paga.

Esta situación no mejoró con el paso del tiempo y poco a poco ambos comenzaron a hacer sus vidas sin reparar en la otra parte. Tanto, que el artista no tuvo constancia del nacimiento de su nieta hasta un mes y medio después de producirse, cuando la pequeña apareció en la revista ¡Hola! junto a su sonriente mamá. Más tarde, el patriarca devolvió el golpe utilizando la misma vía elegida por su hija, la exclusiva, para presentar la nueva mansión que había adquirido en Miami y, de paso, confesar su enfado y descontento con la actitud de su primogénita.

No obstante, Chábeli emula a su madre en sus periódicas apariciones en el kiosco rosa evitando hablar de las penas familiares y centrándose en las alegrías que le rodean. “Sí, ha sido un día inolvidable. Me ha hecho mucha ilusión que pudiera estar mi madre, que vino desde España con mis hermanas. De hecho, lo retrasamos para que pudiera estar, por eso al final bautizamos a Sofía con un año y medio”, reconoce. Pese a ello, muchos se preguntan que si se ha esperado tanto a que Isabel Preysler estuviese presente¿por qué no se ha hecho lo propio con su padre y su hermano? Casualmente, esto mismo ocurrió en la boda de Julio José Iglesias con la modelo Charisse Verhaert el pasado mes de noviembre y, de nuevo, se volvió a utilizar la incompatibilidad de sus agendas profesionales como motivo de sus comentadas ausencias. El tiempo arrojará luz a su rumoreado distanciamiento familiar.