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Antonio Maíllo (IU), primer candidato gay a la Junta de Andalucía: "Quiero ser el primer presidente gay"
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Acaba de romper con su pareja DEspués de 5 años

Antonio Maíllo (IU), primer candidato gay a la Junta de Andalucía: "Quiero ser el primer presidente gay"

El líder de Izquierda Unida en Andalucía nunca ha ocultado su condición sexual, ni siquiera a los padres de sus alumnos, de quienes asegura que siempre se ha sentido muy querido

Foto: Antonio Maíllo (IU), primer candidato gay a la Junta de Andalucía (Vanitatis)
Antonio Maíllo (IU), primer candidato gay a la Junta de Andalucía (Vanitatis)

Educado en la religión católica, es de origen carpintero, procede de una familia dedicada a la artesanía de aparejos para los animales del campo. Cordobés, muy cordobés. Aunque sus padres querían un letrado en casa, el niño les salio rana y se afanó en las artes de la educación para dedicarse a las Lenguas Clásicas. Antonio Maíllo, el candidato a la Junta de Andalucía por IU, es reflexivo, culto y poco divo. Diríase un político atípico, de carácter “mimosón” y comprometido con causas sociales. Su refugio está en Aracena, donde tiene su casa y en la que edifica su quimera: una gigantesca biblioteca en la que no faltarán Los amores de Ovidio. Entre encinas y pinos, el líder de Izquierda Unida en Andalucía medita la que se le viene encima: “Pues sí, como lo oye, voy a ser el primer presidente gay de esta tierra”. Habla con total normalidad de su condición sexual y del desamor, pues recientemente ha roto con su pareja tras cinco años de relación. “El desamor es parte de la vida”, asegura un Maíllo al que se le aprecia un alma triste. En su entrevista con Vanitatis, el que podría ser el nuevo jefe del Ejecutivo andaluz se desnuda y nos enseña el fondo de sus creencias.

Pregunta: Usted, que es profesor desde el año 90, ¿es de los que suspendería a alguna alumna por llevar "perlitas"puestas?

Respuesta: (Risas). Qué guasa tiene usted. No, soy muy respetuoso con la gente. En la enseñanza hay que enseñar a que las personas piensen por sí solas y desde el máximo respeto.

P: ¿Sus alumnos nunca le hicieron ninguna pintada por ser gay cuando les suspendía?

R: ¡Quéva!Al contrario. En Andalucía es un acto de normalidad que yo diga abiertamente que soy gay... El mejor síntoma de normalidad es afrontarlo como algo que forma parte de la vida y no dar más especificidad. No pienso renunciar de ninguna manera a mi condición de ser humano con todas sus variables.

P: Algunos ya le llaman el “Zerolo andalú”...

R: Bueno con connotaciones muy diferentes. A mí me llama la atención si sirve como referente positivo para normalizar la situación. Soy el primer candidato gay a la Junta de Andalucía... Bueno, que se sepa, jajaja...

P: ¿Por qué cree que les cuesta tanto a los políticos de derechas salir del armario?

R: Les cuesta mas decir que son gays a los de derechas por los tabús que tienen. Pero luego sí que se lo pasan bien y buscan su disfrute personal. La derecha está agarrada a una cierta doblez moral de la que debería liberarse.

P: ¿Qué opina de la fotografía que circula por la Red de una chica desnuda señalando que es Teresa Rodríguez (Podemos) sin ser ella?

R: Son actuaciones que bajan el nivel de lo que debe ser el debate político, que es concentrarse en las propuestas de cada formación. Lo que se ha hecho con Teresa está fuera de lugar. En este país distinguimos muy bien lo que es el ámbito de lo público y de lo privado, y es una virtud.

P: Lo del oficio de picapleitos que quería su madre para ustedno le gustó mucho...

R: En el último curso de Derecho me rajé y me enamoré de las lenguas latín y griego, y por ahí me decanté. Esta elección a lo largo de mi vida me ha hecho muy feliz.

P: ¿Epicureísta convencido?

R: No, senequista y aristotélico.

P: Para ser senequista se le ve a usted muy 'disfrutón'de la vida...

R: (Risas)En la vida hay que tener una visión optimista de tirar 'palante'. La ilusión nos debe acompañar siempre, y trabajar en algo que te apasiona es para estar contento, como es mi caso. Yo creo que a mí se me nota mucho cuando me creo algo. Soy muy apasionado y a los retos les dedico mucha pasión.

P: ¿Cuál es su máxima pasión?

R: Soy muy esteta. La belleza es mi gran pasión en toda su extensión.

P: ¿Es de cuidarse?

R: Bueno, me gusta nadar, que es un deporte muy equilibrado, pero, como requiere de algo de tiempo, que no tengo, ahora solo corro.

P- ¿Y es de cuidar lo que se pone de ropa?

R: Bueno, me gusta ir bien, pero no tengo muy en cuenta la moda. Tiro mucho de vaqueros.

P: ¿Le preocupa lo que sus votantes puedan pensar de usted?

R: Como le decía antes, la gente aquí tiene asumido en su inmensa mayoría este asunto de la sexualidad y mi organización no ha entrado para nada en ese debate. Esa es la mejor normalización. Pero esto es una de las suertes de vivir en esta tierra;eso no es así en otros sitios. Tenga en cuenta que en muchos países a mí me hubieran colgado. Como en Irán o Centro África. Si alguien me dice: ¿Su mujer? Yo le digo: “No, mire, mi mujer no;en todo caso mi compañero”.

P: ¿Y qué piensa su compañero de su candidatura a la Junta de Andalucía?

R: Acabamos de romper después de cinco años de relación.

P: Vamos, que le he pillado en un momento sensible…

R: De desamor, más bien

P: ¿Qué es el desamor para usted?

R: Es una frustración. Uno se empeña en dedicarle su mejor energía a un proyecto común y cuando no sale queda el desencanto. Forma parte de la vida y no me arrepiento de haber formado parte de esa vivencia. Saldrán otros amores.

P: ¿Tiene algún sueño?

R: Mi sueño es que en los institutos vayan cogidos de la mano y se besen con frescura niños con niños, niños con niñas y niñas con niñas. Cuando llegue ese momento estaremos hablando de igualdad en lo cotidiano.

P: ¿Sabe si a algún padre de sus alumnos les molestaba que tuvieran un profesor gay?

R: Al contrario, me he sentido muy querido. Para mí,es emocionante que alumnos que tenían otra opción sexual han visto un referente en mí para ayudarles a normalizar la sexualidad. Para mí fue complicado decirlo en su día. Pero ahora lo vivo con gozo. El saberte en minoría te hace desarrollar otros aspectos. Desarrollar más la tolerancia. Ser de minorías nos hace tener otra percepción, que no es ni de ostentación ni de ocultación.

P: ¿De qué se cree capaz?

R: Me siento capacitado para sacar a Andalucía de la crisis como presidente de esta tierra.

P: ¿De verdad que va a ganar estas elecciones?

R: Mucha gente que votó al PSOE nos votará ahora a nosotros y gente que votará a Podemos en las nacionales nos votara aquí a nosotros en Andalucía, por la consistencia que tiene nuestro proyecto. Así que sí. Creo que seré presidente de todos los andaluces.

P: Por tanto, no solo será el primer candidato gay a la Junta de Andalucía, sino el primer presidente de una comunidad autónoma gay.

R: Sí, efectivamente.

Educado en la religión católica, es de origen carpintero, procede de una familia dedicada a la artesanía de aparejos para los animales del campo. Cordobés, muy cordobés. Aunque sus padres querían un letrado en casa, el niño les salio rana y se afanó en las artes de la educación para dedicarse a las Lenguas Clásicas. Antonio Maíllo, el candidato a la Junta de Andalucía por IU, es reflexivo, culto y poco divo. Diríase un político atípico, de carácter “mimosón” y comprometido con causas sociales. Su refugio está en Aracena, donde tiene su casa y en la que edifica su quimera: una gigantesca biblioteca en la que no faltarán Los amores de Ovidio. Entre encinas y pinos, el líder de Izquierda Unida en Andalucía medita la que se le viene encima: “Pues sí, como lo oye, voy a ser el primer presidente gay de esta tierra”. Habla con total normalidad de su condición sexual y del desamor, pues recientemente ha roto con su pareja tras cinco años de relación. “El desamor es parte de la vida”, asegura un Maíllo al que se le aprecia un alma triste. En su entrevista con Vanitatis, el que podría ser el nuevo jefe del Ejecutivo andaluz se desnuda y nos enseña el fondo de sus creencias.

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