La Moncloa, al descubierto: nueve baños, ocho habitaciones... así es por dentro

Fue la reina Isabel II la que cedió el palacio de la Moncloa al Estado y Adolfo Suárez el que decidió convertirla, por su estratégica ubicación, en residencia presidencial en el contexto de una España convulsa marcada por el inicio de una democracia bastante inestable. A partir de ahí, el resto de la historia la conocemos y desde entonces hasta seis presidentes han ocupado las misteriosas dependencias de este palacio. ¿Cuántos metros cuadrados tiene la Moncloa? ¿Y habitaciones? ¿Qué mandatario ha impregnado su sello personal en ella para hacer de esta residencia su verdadero hogar? La inmobiliaria Nuroa da respuesta a estas preguntas con un exhaustivo informe y se atreve incluso a ponerle precio al palacio que actualmente todos quieren ocupar. Pedro Sánchez perdió este martes la oportunidad de convertirse en su nuevo inquilino y, de momento, es el presidente en funciones, Mariano Rajoy, el que sigue habitando tan fastuosa casa.

Fastuosa porque el palacio en sí mismo y sus jardines tienen casi seis hectáreas, en concreto 58.000 metros cuadrados que con el precio de mercado actual (en el distrito de Moncloa Aravaca el metro cuadrado está en 2.700 euros) valdría la friolera de 156 millones de euros. Y todo ello sin contar el valor añadido que le da a la vivienda tratarse de un conjunto declarado Bien de Interés Cultural y que al margen del palacio y sus jardines existen otros 12 edificios (conectados entre sí por un sistema de túneles subterráneos) que componen un recinto de 20 hectáreas. En definitiva, que poner precio a la Moncloa resulta muy complicado.

Pero¿cómo es el hogar de los presidentes del Gobierno? ¿Cómo está repartida esa estancia de la que los medios de comunicación solo han grabado algún que otro despacho y alguna sala de reuniones? La zona en la que actualmente Mariano Rajoy y su familia desarrollan su día a día mide 200 metros cuadrados que se reparten en ocho habitaciones, nueve baños y tres vestidores. Sin duda, un hogar más que espacioso para una familia como la de Rajoy compuesta por cuatro miembros.

El toque personal de los presidentes

Aunque ha habido más de un presidente que ha declarado que hubiese preferido residir en su hogar una vez ganadas las elecciones, lo cierto es que esa parece no ser una opción por motivos de seguridad. El cambio de residencia es obligatorio y a los jefes del ejecutivo no les ha quedado más remedio que adaptarse a la Moncloa. El palacio poco a poco ha ido sufriendo cada una de esas 'adaptaciones' y es posible ver los cambios tanto de funcionalidad como decorativos que ha experimentado este hogar con el paso de sus seis presidentes. Por ejemplo, Adolfo Suárez cubrióun patio exterior y colocó una pista de tenis, Leopoldo Calvo- Sotelo instaló un piano y Felipe González, cuya afición a los bonsáis es sobradamente conocida, cultivó un pequeño huerto. Por su parte, José María Aznarinstaló una sala de juegos para sus hijos y construyó una pista de pádel en los jardines para practicar el que es desde entonces su deporte favorito.

Sin embargo, la reforma de mayor envergadura vino de la mano del presidente José Luis Rodríguez Zapatero y su esposa, Sonsoles Espinosa, quien reformó el palacio y lo redecoró en tonos blancos y grises con mobiliario moderno y obras de arte para adaptarlo a los nuevos tiempos. Mariano Rajoy, en cambio, ha realizado pocos cambios en sus años de estancia.

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