La vida en la sombra de Luisa de Saboya, hija pequeña de Manuel Filiberto de Saboya: amante del fútbol y estudios en Oxford
La hija pequeña del jefe de la Casa Real de Saboya y la actriz francesa Clotilde Courau celebró su mayoría de edad el pasado verano y son pocos los detalles que se conocen sobre su vida privada
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A raíz de su inesperado romance con la modelo mexicana Adriana Abascal, a la par que su lucha continua por la jefatura de la Casa Real italiana con sus primos los Aosta, Manuel Filiberto de Saboya se ha convertido en uno de los personajes más perseguidos de la actualidad ‘couché’. No obstante, una de sus dos hijas, nacidas de su matrimonio con la actriz francesa Clotilde Courau, ha logrado mantener su figura -y vida- en la más estricta intimidad.
Hablamos de Luisa, la pequeña de la familia. Luisa de Saboya, princesa real de Saboya, princesa de Chien y condesa de Salemi, celebró su mayoría de edad el pasado verano. Sin embargo, pocos medios de comunicación se hicieron eco de la noticia de su 18 cumpleaños. Algo lógico si tenemos en cuenta que la joven, al contrario que su hermana mayor, Victoria, ha decidido vivir al margen de los focos; a pesar de su innata condición mediática.
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Es más, su única aparición en un evento público la ha realizado por motivos estrictamente familiares. Se producía el pasado 10 de febrero de 2024 en el entierro de su abuelo, Víctor Amadeo II de Saboya, celebrado en la basílica de Superga de Turín, un templo que él mismo mandó edificar en el siglo XVIII en honor a la Virgen de Gracia y en el que descansan otros miembros de la saga.
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De esta manera, resulta lógico que sean pocos los datos que se conocen sobre su vida; lejos de los compartidos por sus propios padres. La hija pequeña de Manuel Filiberto nació en Ginebra el 16 de agosto de 2006 y fue bautizada como Luisa Giovanna Agata Gavina Bianca Maria. En contra de sus múltiples nombres de procedencia italiana, nunca ha podido residir en la nación de origen de su padre debido a la condición de exilio impuesta por la Constitución republicana de la nación para los descendientes varones de los antiguos reyes del país.
Por ello, tras una infancia e inicio de la adolescencia en Suiza, se trasladó a París con su madre y su hermana estudiando en el centro religioso privado, Institut de l’Alma. Posteriormente, realizó su bachillerato en Londres. Así, se mudó al Reino Unido en el 2021, donde permaneció hasta el pasado 2024 en St Clare's, Oxford, uno de los centros educacionales más prestigiosos de Inglaterra.
Actualmente, se desconoce si ha optado por ir a la universidad o tomarse un año sabático, al igual que han hecho otros jóvenes aristócratas europeos como Irene Urdangarín. Sí podemos asegurar mantiene una estrechisima relación con su padre y su hermana, quienes se encargan de desvelar algunos pequeños detalles de la vida de la pequeña de la familia a través de sus respectivos Instagram.
De esta manera hemos podido descubrir que Luisa de Saboya es una gran aficionada a los deportes. Especialmente, al esquí y al fútbol. Es más, la princesa es la principal admiradora del equipo de su padre, el AC Savoia, club de fútbol que tiene su sede en Torre Annunziata (Nápoles). Además, pasa sus veranos surcando las exclusivas aguas de Cerdeña con su grupo de amigos.
Al contrario que su hermana, Victoria, quien disfruta trabajando puntualmente como modelo y está feliz de asumir el futuro título de heredera de la Casa de Saboya; la hija pequeña de Manuel Filiberto no quiere desarrollarse dentro de la vida pública. De esta manera, es más Arietta Morales que Olympia de Grecia.
A raíz de su inesperado romance con la modelo mexicana Adriana Abascal, a la par que su lucha continua por la jefatura de la Casa Real italiana con sus primos los Aosta, Manuel Filiberto de Saboya se ha convertido en uno de los personajes más perseguidos de la actualidad ‘couché’. No obstante, una de sus dos hijas, nacidas de su matrimonio con la actriz francesa Clotilde Courau, ha logrado mantener su figura -y vida- en la más estricta intimidad.