Mesoterapia: claves y características de este tratamiento

Dentro de la medicina estética uno de los tratamientos que se utilizan para la eliminación de celulitis es la mesoterapia. A este objetivo se le añaden otros como la reducción de peso mediante la eliminación de la grasa localizada, el rejuvenecimiento facial o el tratamiento de la alopecia.

En este sentido, no hay que confundirla con la masoterapia, que consiste en un tratamiento con masajes. La mesoterapia es un tratamiento en donde se aplican microinyecciones en diferentes zonas de la piel con diferentes tipos de medicamentos, según lo que se quiera conseguir. Estas microagujas pueden contener sustancias homeopáticas, vitaminas, aminoácidos o minerales. Se trata de una técnica muy utilizada y totalmente indolora para el paciente.

Celulitis y eliminación de grasa localizada

Tanto en la celulitis como en la eliminación de grasa localizada, se utilizan microinyecciones con medicamentos homeopáticos que tienen tres niveles diferentes de aplicación. La mesoterapia, por lo tanto, es perfecta para tratar aquellas zonas con depósitos de grasa. Además, también ayuda a reducir la flacidez corporal o lo que es lo mismo, a fortalecer y moldear esas áreas que hasta ahora estaban flácidas.

La mesoterapia corporal es un tratamiento poco invasivo ya que las sustancias se inyectan justo debajo de la dermis y no es necesaria la anestesia. Las dosis son muy pequeñas y las sesiones tienen una duración de 15 minutos. Al finalizar cada sesión, se da un pequeño masaje manual en la zona que se ha tratado para facilitar la penetración de las sustancias inyectadas y que estas se expandan de forma uniforme y se mezcle bien con esa grasa que se quiere reducir.

Los primeros resultados se hacen visibles a partir de la cuarta o quinta sesión. El tratamiento completo tiene una duración aproximada de tres meses, ya que suelen ser necesarias entre 10 y 12 sesiones. Estas tienen carácter semanal. Después se pueden llevar a cabo otras sesiones de mantenimiento de manera quincenal o mensual. En cualquier caso, la frecuencia será determinada por el especialista. En este sentido, existen tres niveles de actuación:

• Linfático, para facilitar el drenaje de las toxinas que el cuerpo ha ido acumulando.
• Vascular, que beneficia la microcirculación local y sistémica.
• Celular, que incita a los adipocitos a liberar la grasa acumulada en ellos.

También se puede aplicar al rostro

Además de la eliminación o reducción de grasas, también podemos lograr que nuestro cutis parezca más joven. Para ello, una vez a la semana se ha de realizar una sesión de mesoterapia, aunque con posterioridad solo haría falta una vez al mes. Hay que señalar que, en ocasiones, con aplicar tres veces el tratamiento se consigue el resultado deseado. Durante el proceso, en el rostro pueden aparecer varias pápulas, es decir, unas pequeñas lesiones en la piel parecidas a la picadura de un mosquito. Pero transcurrido un tiempo, desaparecen totalmente. Esto es algo normal debido a las pequeñas inyecciones de sustancias que se emplean.

En el caso de la mesoterapia facial, se emplean sustancias como: ácido hialurónico (presente ya de por sí en la piel y que se usa para rellenar labios y surcos), partículas de ADN (mejoran la turgencia cutánea), dietilaminoetanol (actúa como antioxidante y reafirmante de la piel), argirilina (suaviza las líneas expresión) y metilsilanetriol (incrementa el grosor, así como la retención de agua de la piel).

La mesoterapia aplicada al cabello

Por otro lado, la mesoterapia capilar es otra de las técnicas para frenar la caída del cabello. Es muy eficaz ya que reactiva el ciclo de funcionamiento de los folículos pilosos. Para ello se liberan una serie de sustancias a través de una inyección intradérmica con micronutrientes. Eso sí, la eficacia del tratamiento dependerá de la patología de cada paciente.