Dior y Valentino sellan la paz: la relación entre Maria Grazia y Pierpaolo

La maison Valentino se encuentra viviendo uno de sus momentos más dulces. Desde que sembrara una fiebre generalizada por el ‘pink peacock’ dentro del mundo de la moda, la firma liderada por Pierpaolo Piccioli ocupa diariamente decenas de titulares. Por ello, el pasado 8 de julio decidía ocupar la mítica plaza de España de Roma para realizar su último desfile de alta costura; un homenaje a la historia de la marca llamado ‘The Beginning’.

Sin embargo, el italiano nunca pudo llegar a imaginar las consecuencias mediáticas que tendría este acto. Días después del show, Dior anunciaba públicamente que tomaría medidas legales contra ellos por haber generado molestias en el desarrollo cotidiano del trabajo en una de sus tiendas. Como aseguraba el medio estadounidense especializado en moda 'WWD', el director de retail de Christian Dior Italia envió una carta en la que exigía una indemnización de 100.000 euros por las supuestas molestias.

Una acción qué menos que sorprendente, teniendo en cuenta que Valentino para celebrar el desfile en la famosa ubicación se había encargado de avisar uno por uno a todos los comercios de la zona afectada solicitando el permiso y garantizándoles las molestias mínimas y el tráfico habitual de personas en sus tiendas.

A pesar de ello, Dior expresaba en su comunicado que estas afirmaciones no se cumplieron durante el día del evento y que a algunos de sus clientes "se les negó el acceso y se les bloqueó en las barreras de paso". Un hecho que hizo que la tienda de la marca de lujo francesa permaneciera vacía y no pudiera funcionar desde primera hora de la tarde del viernes. Por ello, la firma liderada por Maria Grazia Chiuri exigía una compensación de 100.000 euros a pagar en un plazo de 15 días.

Cuando la situación parecía no tener remedio y la polémica estaba siendo comentada por todos los medios internacionales, Christian Dior rectificaba y decidía dar marcha atrás asegurando que las firmas mantienen "relaciones cordiales" y "respeto mutuo". Quizás debido a que los directores creativos de ambas, Maria Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli, trabajaron juntos durante más de 25 años.

Un tándem histórico

Los caminos de dos jóvenes italianos ilusionados por triunfar dentro del mundo de la moda se cruzaban en el año 1989. Maria Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli arrancaban su andadura en las firmas de alta costura de la mano de Fendi. Fueron diez los años que pasaron a las órdenes de Karl Lagerfeld para posteriormente ponerse de nuevo en manos de otros de los grandes de la industria: Valentino Garavani.

Como inseparables, ambos llegaron a la maison italiana para asumir la labor del diseño de accesorios. Su ascenso también fue conjunto y en el 2008 se alzaban con el puesto de directores creativos de la firma, sustituyendo al gran peso pesado de la alta costura en su retirada. De esta manera, se convirtieron en uno de los tándems más reconocidos de la historia de la moda.

Ambos renovaron la esencia de Valentino y la actualizaron a las necesidades del siglo XXI, recuperando la posición que la marca ocupaba cuando vestía a estrellas internacionales como Jacqueline Kennedy, Elizabeth Taylor, Grace Kelly o Sophia Loren; consiguiendo revitalizar un negocio que agonizaba tras la partida de su creador para catapultarlo al éxito de la rentabilidad con 1.000 millones de beneficio en 2015.

Más allá de lo profesional, todos comentaban cómo sus personalidades se complementaban de una manera perfecta. Maria Grazia, más energética, intuitiva, práctica, vivaracha, parlanchina, y el opuesto Pierpaolo con su actitud tranquila, pensativa y emotiva.

En el año 2016, tras 16 años en Valentino, la actual directora creativa de Dior decidió abandonar la firma para iniciar su carrera en solitario. Tan solo seis años después, las marcas del tan famoso tándem se enfrentan y dejan en el aire dudas sobre cuál es la verdadera relación de ambos creativos.