Jeanne Toussaint: la dura historia de la joyera adorada por los duques de Windsor

Muchos no lo saben, pero Cartier nació como firma de relojes. Modelos célebres como el Santos, lanzado como primer modelo con correa para hombre en 1904, o el Tank, introducido en 1919 y cuyo diseño se inspira en los tanques militares, han pasado a la historia de la relojería universales.

Pero Cartier es más que relojes. Mucho más. El origen de la histórica firma está en el París de 1847, en el pequeño taller de joyería de Alfred Cartier. Peor es a partir de 1899, y gracias a la implicación de los tres hijos de Alfred –Louis, Jacques y Pierre–, cuando la firma experimenta un impulso enorme, inaugurando su mítica boutique del número 13 de la Rue de la Paix de la capital francesa y convirtiéndose así en una de las firmas favoritas de intelectuales, aristócratas y realeza de la época. Poco más tarde, a principios ya del siglo XX, la casa abrió filiales en Londres y Nueva York, lo que supuso la confirmación de la fama internacional de la joyería francesa.

Cartier es hoy una de las maisons más exclusivas e influyentes del mundo de la joyería. Piezas como la pulsera Trinity, el brazalete Love o, cómo no, cualquiera de sus joyas Panthère, el animal que convirtió en icono del lujo, la sofisticación y la audacia.

Jeanne Toussaint: una pantera ingeniada por la Pantera

Convertida ya en uno de los símbolos de la maison, la pantera ha servido de inspiración a numerosas firmas de joyería a lo largo de los años, con Roberto Cavalli como claro ejemplo. Pero si tenemos que hablar de la pantera original, de la primera y única que se convirtió en icono de distinción y exclusividad, esa es pantera de Cartier. ¿Y quién la ideó? Otra 'pantera'. La creación de ese animal salvaje como decoración clave en sus joyas fue de la visionaria e indómita, además de sofisticada y seductora, Jeanne Toussaint. Esta mujer, nacida en Charleroi (Bélgica) en 1887 en el seno de una familia de fabricantes de encaje, provocó en Louis Cartier un 'flechazo' inmediato que hizo que el joyero la quisiera en su empresa para siempre. Y fue él también, Louis Cartier, quien la apodó la Pantera.

De una infancia tormentosa a una vida de éxito y lujo

Toussaint, de carácter fuerte, audaz y exquisito, además de poseer una prodigiosa mente creativa, se trasladó a París muy joven para huir de las duras condiciones familiares, especialmente de los abusos que sufría por parte de su padrastro. En la capital francesa, y de la mano del aristócrata francés Pierre de Quinsonas, entró en contacto con personalidades de la época como Coco Chanel o Louis Cartier, este último fascinado por completo con el misterioso atractivo y fabuloso poder de seducción de Toussaint. En 1913 la contrata en Cartier.

Durante sus primeros años en la maison, la Pantera empezó diseñando bolsos y pequeños accesorios hasta que Cartier la nombra, por fin, directora creativa de alta joyería de la casa en 1933, cargo que ocuparía casi hasta su fallecimiento en 1976. Años después de este 'fichaje' de lujo, y con la primera pantera incorporada a la firma ya desde 1914, Jeanne Toussaint y la maison comienzan una fructífera relación con Eduardo VIII y Wallis Simpson, los díscolos y famosos duques de Windsor y unos de sus mejores clientes. De hecho, uno de los primeros encargos que recibe la diseñadora por parte del duque, en 1948, es un broche con una cabeza de pantera tridimensional con los ojos realizados de diamantes amarillos.

A partir de ahí, la Panthère se convierte en el motivo más celebrado y exclusivo de la firma de lujo, atravesando diversos procesos creativos y estéticos que han ido desde el estilo más abstracto a piezas con la imagen de una pantera más figurativa y, poco a poco, más depurada.

El animal más bello del mundo: la pantera de Toussaint

Hoy, Panthère sigue siendo una de las principales colecciones de Cartier, entre la que se encuentran anillos, brazaletes y colgantes en los que o bien la figura del felino o bien sus características manchas son protagonistas absolutos de sus diseños creados en oro blanco y amarillo, con ónix, diamantes o esmeraldas. La propia maison define así al animal protagonista de esta histórica colección: “Indomable y salvaje, la pantera fascina. Su poder de atracción es todavía más fuerte por su componente paradójico: a la vez depredadora y protectora, es la guardiana de un territorio secreto donde coexisten la vitalidad y la belleza del mundo”.

Cartier, que ha trabajado con celebridades como Charlotte Gainsbourg, hija de Jane Birkin, o Elle Fanning, presenta ahora a la actriz y filántropa británica Vanessa Kirby ('The Crown', 'Misión Imposible') como embajadora de sus nuevas colecciones de Panthère. Decidida, valiente y poderosa, la actriz, que es una de las favoritas en la categoría de mejor actriz de reparto por 'Napoléon' de los próximos Oscar, parece ser la elección perfecta para encarnar el poder, el misterio y la sofisticación de la célebre pantera.