Tres días y presencia 'royal': la gran boda marroquí de los Borbón este fin de semana

Este fin de semana, dos familiares lejanos de la familia real española se casarán en puntos distintos de la geografía internacional. Mientras que Francisco de Borbón, hermano de Olivia de Borbón e hijo de Francisco de Paula de Borbón y Escasany, primo cuarto de don Juan Carlos, contraerá matrimonio en Marbella el sábado; en Marruecos, otro sobrino del conde de Barcelona entonará bien alto el ‘sí, quiero’ en una celebración que se alargará durante todo el puente de la Hispanidad.

Dos bodas de perfil diferente de las que, sin ninguna duda, hablaremos largo y tendido durante los próximos días. Sobre todo de Alfonso Galobart y Patricia Fabré y sus tres intensas jornadas de boda que incluirán diferentes fastos, muchos looks y, sobre todo, glamour a raudales, que para algo la novia es una experta en la industria de la organización de eventos de alto nivel.

Pero vamos al detalle. Alfonso Galobart y Marone Cinzano es hijo de Jaime Galobart y Satrústegui y Giovanna Marone Cinzano de Borbón, nieta de Alfonso XIII y sobrina del conde de Barcelona. Giovanna Marone, la conocida aristócrata, es prima hermana del rey Juan Carlos y de las infantas Margarita y Pilar, por lo que la presencia de miembros de la familia real en la boda está más que asegurada.

Entre los posibles asistentes, según nos relatan personas cercanas al matrimonio en conversación con Vanitatis, se encuentra el matrimonio formado por Beltrán Gómez-Acebo, hijo de la duquesa de Badajoz, y Andrea Pascual, todo un referente de estilo.

Tres planes llenos de glamour

Un matrimonio de lo más discreto que se unirá a los casi 300 invitados que este sábado desembarcarán en Marrakech para disfrutar de la apretada agenda de planes prevista por los novios en esta ciudad que “les encanta”. Según nos explican las fuentes consultadas, Alfonso y Patricia han elegido esta ciudad por lo mucho que les gusta. Y aunque no tienen ningún vínculo especial con ella, finalmente fue la elegida para hacer de escenario de los tres planes organizados.

El sábado, nada más llegar, los invitados se arreglarán para asistir a una exclusiva preboda de la que aún no ha trascendido la ubicación. Una toma de contacto con todos sus amigos y familiares que reunirá a grandes nombres de todo el mundo. Eso sí, todos ellos jóvenes y divertidos. “Se trata de una fiesta para disfrutar, no habrá compromisos, ni laborales ni familiares”, aseguran las personas consultadas a Vanitatis.

El segundo plan del puente tendrá lugar en la Medina, donde los novios ofrecerán una alegre comida el domingo al aire libre donde se espera que las invitadas presuman de caftanes, linos y telas bordadas de mil y un colores haciendo honor al país que les acoge. Un almuerzo que, por supuesto, se alargará hasta bien entrada la noche y que contará con entretenimientos para todos los gustos.

La boda no será hasta el lunes. Una ceremonia que, dicho sea de paso, no será su enlace oficial. Aunque en un primer momento, todo apuntaba a que se trataría de una ceremonia civil al uso, lo cierto es que la pareja se casó antes del verano en Madrid. “Lo de este fin de semana es la celebración que no pudieron tener por la pandemia. Una auténtica fiesta para reunirnos todos y pasarlo bien”, continúan. “Será una boda más emotiva y personal, pero les casará”.

No obstante, Patricia Fabré se vestirá de novia. Tal y como confirman personas de su entorno, ha sido Laura Ponte la encargada de dar forma a su original vestido nupcial, un diseño único que sin duda la convertirá en una de las novias más singulares de la temporada.

Una boda de tres días que no dejará a nadie indiferente y que revolucionará la ciudad este puente en el que los Borbón serán, sin ninguna duda, los grandes protagonistas.