Así era David Civera hace 25 años: de chico del coro a la novia que le inspiró para componer

Tomó impulso tras su paso por Eurovisión en 2001, y desde entonces se diseñó su propia carrera musical, sin las imposiciones de la industria. David Civera ha sido el verdadero artífice de sus éxitos, unas canciones muy bailables con letras pegadizas, reconocidas por todos, y que siguen siendo el reclamo de sus conciertos y actuaciones televisivas.

En las dos últimas décadas, David Civera ha crecido como artista al margen de las grandes discográficas y de los impactos necesarios en redes sociales. Una libertad que le ha permitido dar rienda suelta a su talento, sin perder su esencia, ya que no ha abandonado su tierra natal, Teruel, donde vive con su mujer y sus dos hijos. Pero sepamos cuándo empezó todo.

De niño, David Civera destacó como compositor en el coro de la iglesia. Recibió clases de piano y canto, y hasta participó en algún concurso local de talentos con canciones propias. Su primera aparición televisiva fue a los 17 años en el programa ‘Lluvia de estrellas’, en su versión infantil, imitando a Enrique Iglesias. Interpretó su canción ‘Experiencia religiosa’.

Más tarde, decidió presentarse a la preselección de RTVE para Eurovisión 2001 y logró superar a la favorita de aquel año, Merche. Ya en Copenhague (Dinamarca), ciudad de acogida del festival, su tema ‘Dile que la quiero’ logró un sexto puesto, el mayor triunfo de España en este siglo hasta que llegó Chanel.

En el escenario llamó también la atención por las cuatro bailarinas ucranianas elegidas, en un gesto entonces de acercarse a otros países europeos. Para David Civera, el éxito tuvo que ver con la tendencia latina en la música de aquel año. Y se preparó en cuerpo y alma para sacar rédito a aquella oportunidad.

“Fue el público, que aún sigue conmigo, quien me alzó a aquel puesto”, reveló después al portal eurovisivo Olevisión. Un año después de digerir este primer éxito, lanzó ‘Que la detengan’ y a continuación ‘Bye bye’, temas que ha repetido una y otra vez en sus actuaciones y que fueron la confirmación del fenómeno que lleva su sello.

“Dile que la quiero, que siempre fui sincero…”. Su inspiración para componer fue entonces y lo sigue siendo Ana María Benedí, su novia del instituto y con quien se casó en 2007. “Ana para mí es el todo, ella es mi refugio, mi música comenzó componiendo canciones para ella. Siempre ha estado a mi lado, antes, durante y después. Nunca me ha fallado”, declaró a ‘EsDiario’. Siguen viviendo en Teruel y son padres de Daniel, de 13 años, y Laura, de 10.

Para estar y disfrutar con ellos, David Civera paró aquel ritmo frenético de sus comienzos, y convirtió la música en su pasión, no en un negocio, espaciando sus trabajos y colaboraciones. “En Teruel me conocen desde que nací. Me siento muy libre porque voy por la calle como cualquier otro vecino, llevo a mis hijos al colegio, hago la compra…”, declaró. En su último sencillo que acaba de publicar, ‘Vida’, resume esta filosofía.