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Ana Obregón, la estrella de la exclusiva de Lequio
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Ana Obregón, la estrella de la exclusiva de Lequio

El mundo del corazón se ha transformado en un culebrón televisivo. Por un lado, y como estrella de la parrilla, las miserias de una familia dominada

Foto: Ana Obregón, la estrella de la exclusiva de Lequio
Ana Obregón, la estrella de la exclusiva de Lequio

El mundo del corazón se ha transformado en un culebrón televisivo. Por un lado, y como estrella de la parrilla, las miserias de una familia dominada por el poder. Vamos una versión barata de Dinastía donde María José Campanario arma el Belén y echa a su suegra de casa, según Diez Minutos y Semana. El canal Hola, en cambio, se da a la comedia romántica con la boda exclusiva de un conde. Y ese es el enlace de María Palacios y Alessandro Lequio donde Ana Obregón consiguió brillar más que los demás. Suerte que no era la novia. En Lecturas, podemos ver la muerte de ‘El duque’ foto a foto. Esta revista convierte a un personaje de ficción en el protagonista de la crónica rosa. En OK!, Eva Longoria rentabiliza su matrimonio con Tony Parker, del que cuenta detalles en primera persona.

Lo de Ambiciones parece que tiene mala solución porque María José Campanario considera que “he sufrido ocho años de desaires”. Convertida en víctima del sistema -¿alguien se acuerda de que podría pasar cuatro años entre rejas?-, dice que han sido malos con ella y por ello su suegra está fuera de la casa familiar, en la que ya puede reinar. Y es la tía del torero la que califica a esta madre coraje de bruja. Pero la ‘Campa’, en un alarde de sinceridad, confiesa que entiende a su rival Belén Esteban que, a su vez, no quiere ni ver a los Jesulines. Un lío total. Y en el centro de esta estrambótica historia de poder está Jesús Janeiro. Al final uno se da cuenta que es el más inteligente porque mientras todos se sacan los ojos, él da la callada por respuesta. ¿Será mudo o no ve la televisión?

Pero si queremos un cuento de hadas moderno sólo hay que abrir Hola para ver la exclusiva del Conde Lequio, que se colocó un chaqué de segunda mano, y María Palacios. Quienes esperaban una boda casi real se equivocaron. Y es que la novia llevaba un vestido medieval gris y botas, como ya había publicado Vanitatis.com. Sin embargo, eso no es suficiente para ser la estrella del publirreportaje. Y tampoco aparecer en casi todas las fotos. Quien causó sensación fue la madre del novio, nieta de Alfonso XIII, con mantilla y unas impresionantes joyas familiares. Con permiso de los novios, la estrella del sarao fue Ana Obregón, con sombrero incluido, y su hijo, que les saca una cabeza a todos. Y tras la boda llegaron los posados. Con la familia, con los amigos, con Obregón… Los Reyes brillaron por su ausencia.

Otro pariente que no estuvo fue Luis Alfonso de Borbón. Según cuenta Hola, el joven fue recibido en audiencia por el mismísimo Papa. Para no estar solo se llevó a su anciana abuela, a su mujer Margarita y a la madre de esta. Eso sí, todas, ninguna española, iban con la tradicional mantilla. Por otro lado, dos confesiones. Con gran dramatismo leemos un extracto de la biografía de Pepe Sancho, en la que habla sin pelos en la lengua de su ex mujer y de tres hijos. Pero también anda de desahogo personal Arancha de Benito, que dice que sigue trabajando pese a que ser madre le ocupa la mayor parte de su tiempo. ¿Y alguien sabe cuál es su empleo? Para quien no se crea su matrimonio con Guti, aclara que ha habido crisis, pero que ya está todo superado.

Muerte en el plató

Pero si hay algo sorprendente esta semana es ver cómo ‘El duque’, ese traficante de drogas de ficción, se muere en Lecturas. Es decir, que esta revista utiliza su portada para sacar el asesinato televisivo de un personaje irreal, al que después de la escena dramática vemos de carne y hueso paseando. Miguel Angel Silvestre, una vez que se ha hecho famoso, prefiere plantar a las guionistas y ser actor de cine. Una vez recuperados del susto, regresa otro fantasma del pasado. Eva Sannum, que pasa de España, ha sido fotografiada con su bebé y su novio en un parque. Sin embargo, una bolsa de Zara en su mano confunde a la audiencia. ¿Hay vida después del Príncipe? Y en el parte médico, Ana Torroja sale del hospital y la familia Botín visita a Severiano Ballesteros.

Diez Minutos va de reencuentros amorosos. Al parecer, Ariadne Artiles ha vuelto con Fonsi Nieto. Aunque ella prefiere callar, el piloto se fue de la lengua y contó todos los detalles en una fiesta. Otro que aprovecha las circunstancias para anunciar que regresa con su ex mujer es Tony Anikpe. Mientras Raquel Mosquera se recupera de un intento de suicidio, el nigeriano hace su agosto en la televisión. Menudo amor aprovechado. Pero lo que más sorpresa ha causado son las costumbres de Laura Ponte, a la que la crisis ha debido tocar de lleno. Y es que la modelo se fue al rastro a comprarse ropa de segunda mano. ¿No le darán crédito las grandes firmas? Ya lo dijo en una ocasión, “no gasto un duro en ropa”.

En Semana, la gran cita de la semana: el cumpleaños real de Carlos de Inglaterra. Al ser una cita privada, nos tuvimos que conformar con ver a todos los herederos montados en coche entrando o saliendo. Y Letizia estuvo allí, ¿Cómo sería su encuentro con Isabel II? ¿Intercambiaría trucos de belleza con Camilla? Y la que tiene claro que no se casa es Eugenia Martínez de Irujo. Así lo volvió a confesar en una fiesta. La que no anda muy bien de salud es María Teresa Campos. Los nódulos de la garganta de los que le operaron eran algo más, pero “no diré el nombre”. Sin embargo, todo ha pasado y hay presentadora para rato.

El mundo del corazón se ha transformado en un culebrón televisivo. Por un lado, y como estrella de la parrilla, las miserias de una familia dominada por el poder. Vamos una versión barata de Dinastía donde María José Campanario arma el Belén y echa a su suegra de casa, según Diez Minutos y Semana. El canal Hola, en cambio, se da a la comedia romántica con la boda exclusiva de un conde. Y ese es el enlace de María Palacios y Alessandro Lequio donde Ana Obregón consiguió brillar más que los demás. Suerte que no era la novia. En Lecturas, podemos ver la muerte de ‘El duque’ foto a foto. Esta revista convierte a un personaje de ficción en el protagonista de la crónica rosa. En OK!, Eva Longoria rentabiliza su matrimonio con Tony Parker, del que cuenta detalles en primera persona.